tag:blogger.com,1999:blog-89699573373843005362024-02-06T22:07:46.026-08:00CriptoeugenismoUnknownnoreply@blogger.comBlogger13125tag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-63564697386472596812009-12-02T21:04:00.000-08:002009-12-02T21:10:20.170-08:00La criptoeugenesia: la estrategia oculta de la "depuración" de la raza humana<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEijmWqRQL_q8dLnY6ffwJ2iItxAqNHdgJWChxJa6AN3tv8AKy108SQ3ETn0ZGToA7HHACd92QBf_vHCXrkkvVwtxKYBrpSe8XBOFgeDiB2gN2fTpBqnqdVnet7PxfKsk7OgmfJdDgl2IGs/s1600-h/atlas+rockefeller.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410872857329606674" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 300px; CURSOR: hand; HEIGHT: 400px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEijmWqRQL_q8dLnY6ffwJ2iItxAqNHdgJWChxJa6AN3tv8AKy108SQ3ETn0ZGToA7HHACd92QBf_vHCXrkkvVwtxKYBrpSe8XBOFgeDiB2gN2fTpBqnqdVnet7PxfKsk7OgmfJdDgl2IGs/s400/atlas+rockefeller.jpg" border="0" /></a><em><span style="color:#660000;">"Que la Sociedad de [Eugenesia] debería perseguir objetivos eugenésicos por medios menos visibles, es decir una política de cripto-eugenesia, que aparentemente es un éxito en la Eugenics Society americana". Doctor Carlos Paton Blacker, dirigente de la Eugenics Society desde 1931</span></em><br /><br />Las Naciones Unidas fueron fundadas, justamente, luego del Holocausto nazi, el 24 de octubre de 1945, con la firma de la Carta del organismo en San Francisco, sólo unos meses después de la rendición de Alemania (8 de mayo) y de Japón (14 de agosto), hecho que puso fin a la Segunda Guerra Mundial.<br />Ante el conocimiento del horror perpetrado por los nazis en sus campos de exterminio, el mundo occidental rechaza de pleno todo lo que tenga que ver con la eugenesia y sus prácticas. Por ello los eugenistas se plantean camuflar sus intenciones y sus acciones comenzando por el cambio de nombre de su asociación más representativa. La Federación Americana para el control de la natalidad, se llamará a partir de ahora Planned Parenthood (Paternidad Planificada) agrupándose a partir de 1952, junto a más asociaciones nacionales en la Federación Internacional de Planificación Familiar (IPPF).<br />La estrategia cambia y pasa a ser cripto-eugenismo sin modificar en esencia sus objetivos. Las tácticas se ocultan y aparecen nuevos términos que trata de tapar las verdaderas intenciones.<br />En la misma época confluye otro hecho importante que es la denominada “Revolución sexual”. Un cambio radical en el comportamiento sexual a raíz de los “estudios” presentados por Alfred Kinsey en 1948. En ellos justifica la homosexualidad, la pederastia y cualquier tipo de perversiones sexuales. De hecho considera la heterosexualidad como anormal, producto de inhibiciones culturales y de condicionamientos sociales.<br />La tercera corriente la constituye el Neomaltusianismo disfrazado de un ecologismo radical será la ideología que justificará el Neocolonialismo del 3ª Mundo.<br /><div></div><br /><div><span style="font-size:85%;">12.1. Frederick Osborn y el population council<br />12.2. Sir Julian S. Huxley (eugenics society)<br />12.3. Otros cripto-eugenistas<br />12.3.1. Dr. Carlos P. Blacker<br />12.3.2. William Shockley<br />12.3.3. Hermann Muller y los bancos de semen<br />12.3.4. Lord John M. Keynes<br />12.3.5. Prof. Dr. Otmar Freiherr von Verschuer<br />12.3.6. Alva Myrdal<br />12.3.7. Prof. Franz j. Kallmann<br />12.4. Eugen Relgis y el pacifismo: la superpoblación como causa de la guerra<br />12.5. La fundación Rockefeller<br />12.5.1. El consejo de población<br />12.6. El “humanismo” secularista<br />12.7. Las aplicaciones actuales de la eugenesia<br />12.8. Las cripto-políticas demográficas<br />12.9. La Eugenesia<br />12.10. Estrategia actual de dominación mundial<br />12.11. El matrimonio a prueba<br />12.12. Las políticas demográficas</span></div>Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-2075728353189691272009-12-02T21:02:00.000-08:002009-12-02T21:04:31.594-08:001. Frederick Osborn y el Population Council<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjtMdQHEcPUcnDucrfcn9X3C5ZCxgXVGgdKbUo9SmbV6Wqr7oY0n03Sk3QTFqHn4wW6r1UAgGfYmL_Y9ktHAf99EPi0fxk6iGtV_fXw_ZZ2hyphenhyphenxc_jbzsx7-xjvyY_bnrSuHcc7sXFQMSN8/s1600-h/Frederick+Henry+Osborn.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410871348733216514" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 256px; CURSOR: hand; HEIGHT: 331px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjtMdQHEcPUcnDucrfcn9X3C5ZCxgXVGgdKbUo9SmbV6Wqr7oY0n03Sk3QTFqHn4wW6r1UAgGfYmL_Y9ktHAf99EPi0fxk6iGtV_fXw_ZZ2hyphenhyphenxc_jbzsx7-xjvyY_bnrSuHcc7sXFQMSN8/s400/Frederick+Henry+Osborn.jpg" border="0" /></a>Después de la segunda guerra mundial, la Sociedad Eugenista Americana cambia también de estrategia: pasa al cripto-eugenismo sin modificar una letra de sus objetivos. Frederick Osborn, presidió la Eugenics Society americana de 1946 a 1952. El constituye la personalidad más destacada de la Sociedad de Eugenesia norteamericana durante la postguerra; fundador, junto con John D. Rockefeller, del Population Council, lobby pro-aborto. Promovió la creación de centros de capacitación demográfica en la ONU.<br />Después de la Segunda Guerra Mundial, lleva a cabo una substitución estratégica del eugenismo por el cripto-eugenismo y fija los objetivos a la Sociedad de Eugenesia: "...buscar a los individuos genéticamente valiosos... tratando al mismo tiempo de reducir los nacimientos de quienes lo son menos".<br />Lo que él preconiza es:<br />1. Condicionar el entorno por medio de "presiones sociales y psicológicas concentradas en los jóvenes y en los padres";<br />2. Manipular los comportamientos: "esta propuesta se presentaría... hablando de ofrecer a un mayor número de niños la posibilidad de crecer en un mejor entorno hogareño, y absteniéndose de argumentar públicamente en favor del eugenismo"<br />3. Introducir la contracepción y el aborto: "...Existen medios de selección que no implican humillación... cuando la planificación familiar se ha extendido a todos los miembros de la población y los medios eficaces de contracepción son fácilmente disponibles...". "Las parejas tendrán un número de hijos acorde con sus ingresos, es decir, acorde con el valor de su calidad social".<br />El mismo declaraba en abril de 1956.<br /><br /><em><span style="color:#660000;">"Hace ya 86 años Galton publicó "Le génie héréditaire" ; hace 86 años (...) él veía al movimiento eugenista como algo que barrería el mundo y haría al hombre amo de su propio destino sobre la tierra. Esto no sucedió. El movimiento eugenista es sólo un pequeño puñado de hombres en varios países; aquí en Inglaterra, en los Estados Unidos, en India, en Francia. Ellos no influyen en la opinión pública. Incluso la palabra "eugenismo" está desacreditada en algunos lugares. Sin embargo, sigo creyendo en el sueño de Galton. La mayoría de ustedes también, creo. Tenemos que preguntarnos: -¿dónde fallamos?<br />Pienso que no tomamos en cuenta un rasgo de carácter casi universal muy instalado en la naturaleza humana. La gente simplemente se niega a aceptar la idea de que la base genética que forma su carácter es inferior y que no debería repetirse en la generación siguiente. Le hemos pedido a grupos enteros de personas que acepten esta idea. Y constantemente se han negado, con lo cual sólo hemos logrado matar al movimiento eugenista.<br />La gente puede aceptar la idea de un defecto hereditario específico. Irán a una clínica de genética y preguntarán cuál es su riesgo de tener un hijo defectuoso. Comparan este riesgo con la probabilidad de tener un hijo sano y por lo general, terminan tomando una decisión inteligente. Pero no aceptarán la idea de que, en general, son de segunda clase. Tenemos que apoyarnos en otras motivaciones.<br />En circunstancias normales, los hombres tienen una cantidad de hijos proporcional a su capacidad para atenderlos. Si se sienten financieramente seguros, si les agrada asumir responsabilidades, si tienen una respuesta afectiva cálida, si son físicamente fuertes y competentes, es probable que tengan grandes familias, a condición de que estén psicológicamente preparados para esto. Por el contrario, los que no pueden alimentar a los hijos que tienen, si le temen a las responsabilidades, si su respuesta afectiva es escasa, no quieren tener muchos hijos. Si disponen de medios eficaces de planificación familiar, no tendrán muchos. Nuestros estudios demostraron que esto es válido en todo el mundo. Sobre esta base, es seguramente posible construir un sistema de selección voluntaria inconsciente Pero los argumentos invocados deben ser aceptables de manera general. Dejemos de decirle a todo el mundo que tienen una calidad genética globalmente inferior, porque jamás estarán de acuerdo. Basemos nuestras propuestas en el deseo de tener hijos (nacidos) en hogares donde disfrutarán de cuidados afectuosos y responsables, quizás entonces nuestras propuestas sean aceptadas.<br />Me parece que si el eugenismo ha de progresar como debería, tiene que seguir políticas nuevas y reafirmarse, y de este renacimiento quizás podamos, durante nuestras vidas, verle alcanzar los elevados objetivos que Galton le había fijado". (Eugenics Review, abril 1956,n°1).<br /></span></em><br />Por lo general, Osborn se lleva el crédito de la reforma del movimiento eugenista después de la segunda guerra mundial, se dice que lo purgó de su racismo. Sin embargo, al mismo tiempo que llevaba a cabo esta "reforma", era secretamente presidente del Pioneer Fund de 1947 a 1956. El Pioneer Fund es una organización notoriamente conocida por pregonar la supremacía blanca. Por supuesto, un racista encubierto no puede purgar el racismo; puede purgar el racismo abierto conservando al mismo tiempo, una política que se puede calificar como "cripto-racista".<br /><br /><em><span style="color:#660000;">"La esencia de la evolución es la selección natural; la esencia de la Eugenesia es el reemplazo de la selección 'natural' por una selección conciente, premeditado u artificial con la esperanza de acelerar la evolución de características 'deseadas' y la eliminación de las no deseadas." I.I. Gottesman, director de la Sociedad Americana de Eugenesia (1970)</span></em><br /><br />En 1973, la Sociedad de Eugenesia Americana cambia de nombre: actualmente se llama: Sociedad para el Estudio de la Biología Social.<br />A fines de los años 50, el doctor Carlos Paton Blacker, que había sido dirigente de la Eugenics Society desde 1931 (Secretario, luego secretario general, luego director y presidente), hizo esta propuesta:<br /><br /><em><span style="color:#660000;">"Que la Sociedad de [Eugenesia] debería perseguir objetivos eugenésicos por medios menos visibles, es decir una política de cripto-eugenesia, que aparentemente es un éxito en la Eugenics Society americana".</span></em><br /><br />En 1960, esta propuesta de Blacker fue adoptada por la Eugenics Society inglesa. Esta resolución declaraba entre otras cosas:<br /><br /><em><span style="color:#660000;">"Las actividades de la Sociedad en el cripto-eugenismo deberían ser continuadas con energía, en particular, la Sociedad debería aumentar su sostén económico a la F.P.A. [Association de Planificación Familiar, la rama inglesa de planificación familiar] y a laI.P.P.F. [International Planned Parenthood Federation] y tomar contacto con la Sociedad para el Estudio de la Biología Humana [Society for the Study of Human Biology], que ya tiene gran cantidad de miembros activos, para ver si hubiera allí proyectos interesantes con los que la Eugenics Society pudiera colaborar.</span></em><br /><br />La I.P.P.F. nació de la Eugenics Society. En el momento en que esta resolución fue adoptada por la Eugenics Society inglesa, Blacker era el presidente administrativo de la I.P.P.F.Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-30135457133516583042009-12-02T21:00:00.000-08:002009-12-02T21:02:19.835-08:002. Julian Huxley (Eugenics Society)<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgy4Pr72N1sLjs5Tvoy4UXi70Z0NqRyii2ZRiVIvf83PTSRDdKeXVadSQStpfhw76LJjSHFXE9rhx8rBpVMyEM0ilBG1NL7QOUhVeGLSV25iONkRvJ9lxxS41wfFA9N5uRDN1RsHJ-4biQ/s1600-h/huxley.png"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410870799641614690" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 200px; CURSOR: hand; HEIGHT: 253px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgy4Pr72N1sLjs5Tvoy4UXi70Z0NqRyii2ZRiVIvf83PTSRDdKeXVadSQStpfhw76LJjSHFXE9rhx8rBpVMyEM0ilBG1NL7QOUhVeGLSV25iONkRvJ9lxxS41wfFA9N5uRDN1RsHJ-4biQ/s400/huxley.png" border="0" /></a>Inglés, (1887-1975), miembro del consejo de la Eugenics Society en 1931, vicepresidente de 1937 a 1944 y presidente de 1959 à 1962. Primer Secretario General de la UNESCO, de 1946 a 1948. Es por otra parte el fundador del World Wildlife Fund.<br />Miembro del comité ejecutivo de la Euthanasia Society, fue vicepresidente de la Asociación por la Reforma de la Ley de Aborto (pro-aborto), de 1969 a 1970.<br />Tuvo cuatro hijos. Uno de ellos fue Aldous Huxley, el autor del libro "Un mundo feliz", sistema soñado por la Sociedad de Eugenesia.<br />Veamos la opinión de este hombre influyente, cuyos objetivos se están realizando hoy:<br /><br /><em><span style="color:#660000;">“Cuando la eugenesia se haya convertido en práctica corriente, su acción […] estará enteramente dedicada, al principio, a elevar el nivel medio, modificando la proporción entre los buenos y malos linajes, y eliminando en lo posible las capas más bajas, en una población genéticamente mezclada” Julian Huxley, 1946</span></em><br /><br /><em><span style="color:#660000;">"Por grupo social problemático entiendo a esa gente de las grandes ciudades, demasiado conocida por los trabajadores sociales, que parece desinteresarse de todo y continuar simplemente su existencia desnuda en medio de una extrema pobreza y suciedad. Con demasiada frecuencia deben ser asistidos por fondos públicos, y se vuelven una carga para la comunidad. Desgraciadamente, tales condiciones de existencia no les impiden seguir reproduciéndose, y sus familias son en promedio muy grandes, mucho más grandes que las del país en su conjunto.<br />Diversos tests, de inteligencia y de otro tipo, revelaron que tienen un C.I. muy bajo, y que están genéticamente por debajo de lo normal en muchas otras cualidades, como la iniciativa, el interés y afán general exploratorio, la energía, la intensidad emocional y el poder de la voluntad. Esencialmente, no son culpables de su miseria e imprevisión. Pero tienen la mala suerte de que nuestro sistema social abona el suelo que les permite crecer y multiplicarse, sin otra expectativa que la pobreza y la suciedad.<br />Aquí también podría ser útil la esterilización voluntaria. Pero yo pienso que nuestras mejores esperanzas deben apoyarse en el perfeccionamiento de nuevos métodos de control de nacimientos, sencillos y aceptables, ya sea por contraceptivos orales, ya sea, quizá preferentemente, por métodos inmunológicos que exigirían inyecciones".<br />"La revolución misma es inevitable. (...) Se la puede hacer de diversas maneras. (...) La manera totalitaria... es poco atractiva, pero es capaz de asegurar un rendimiento muy elevado, como lo descubrieron a sus expensas los adversarios de la Alemania nazi. Existen todos los motivos para creer, sin embargo, que tales ventajas no son duraderas. (...) La democracia necesita ser "repensada" en función de un mundo que se transforma".</span></em><br /><br />Julian Huxley explica entonces su concepción keynesiana: la economía liberal debe ser controlada y dirigida por el Estado.<br /><br /><em><span style="color:#660000;">"La generalización... de Darwin sobre la selección natural, hizo posible y necesario eliminar la idea de que Dios guía las fases de la vida evolutiva. Finalmente, las generalizaciones de la psicología moderna y de las religiones comparadas, hicieron posible, y necesario, eliminar la idea de que Dios guía la evolución de la especie humana mediante la inspiración o alguna otra forma de dirección sobrenatural. (...) Freud, agregado a Darwin, alcanza a darnos una idea general filosófica. (...) [Si el individuo] quiere aplicar sus valores morales, aparentemente absolutos, a situaciones particulares, tales valores exigirán la ayuda constante del relativismo. (...) No se debe matar: pero es menester analizar de manera racional si ese principio concierne a la guerra, a ciertos casos de suicidio y de aborto, a la eutanasia y a la reglamentación de la natalidad. (...) La sociedad debe utilizar racionalmente un mecanismo irracional para crear el sistema de valores que ella desea"<br />“La palabra religión a menudo es empleada restrictivamente para significar creencia en dioses; pero yo no la empleo en este sentido... Yo la empleo en un sentido más amplio, para denotar una relación general entre el hombre y su destino, y una que involucra sus sentimientos más profundos, incluyendo su sentido de lo que es sagrado. En este sentido más amplio - humanismo revolucionario - me parece es capaz de convertirse en germen de una nueva religión, no necesariamente suplantando las religiones existentes, sino suplementándolas”.</span></em>Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-51722352536739411612009-12-02T20:54:00.000-08:002009-12-02T21:00:32.092-08:003. Otros criptoeugenistas<div><div><div><div><div><strong><span style="color:#660000;">3.1. Dr. Carlos P. Blacker</span></strong><br /><br />Inglés, secretario de la Eugenics Society de 1931 a 1943, secretario general en 1943, director de 1944 a 1946, presidente en 1951, honorario en 1957.<br />Discípulo de Julian Huxley, se diploma en medicina en 1931. Miembro de la Comisión Real sobre la Población, es su delegado en la Conferencia Mundial sobre la Población de 1954 y asesor en cuestiones sociales y poblacionales ante el ministerio de Salud en 1958. Presidente administrativo del I.P.P.F. , de 1959 a 1961.<br />En un informe a la Eugenics Society en 1951, referido a los experimentos nazis realizados en personas vivas para desarrollar un método económico de esterilización de masas, concluye que, si bien dichos métodos no funcionaban, "sería perfectamente apropiado continuar la experimentación con alguna de las drogas esterilizantes que fueron utilizadas por los médicos nazis..."<br /><br /><em><span style="color:#660000;">"Las actividades de la Sociedad en el cripto-eugenismo deberían ser continuadas con energía, en particular, la Sociedad debería aumentar su sostén económico a la F.P.A. [Association de Planificación Familiar, la rama inglesa de planificación familiar] y a laI.P.P.F. [International Planned Parenthood Federation] y tomar contacto con la Sociedad para el Estudio de la Biología Humana [Society for the Study of Human Biology], que ya tiene gran cantidad de miembros activos, para ver si hubiera allí proyectos interesantes con los que la Eugenics Society pudiera colaborar.” Propuesta de Blacker en la Eugenics Society inglesa.</span></em><br /><br /><strong><span style="color:#660000;">3.2. WILLIAM SHOCKLEY</span></strong><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiL9HtFrmmsJhfAR9CyX5CffJqJt_15S_08jMBU1TO9JGtgUekiK9JO9OwnXIrXnkSxihyphenhyphenIwKcH5HaVtxAvya6z8QKPwwogYvjaqsE-FVk2TjEyHahbkrJcLfp7Z_qnz7_uJgIlgbuM_wo/s1600-h/William+Shockley.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410870147399590754" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 140px; CURSOR: hand; HEIGHT: 198px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiL9HtFrmmsJhfAR9CyX5CffJqJt_15S_08jMBU1TO9JGtgUekiK9JO9OwnXIrXnkSxihyphenhyphenIwKcH5HaVtxAvya6z8QKPwwogYvjaqsE-FVk2TjEyHahbkrJcLfp7Z_qnz7_uJgIlgbuM_wo/s400/William+Shockley.jpg" border="0" /></a><br />A finales de los años 60 el psicólogo de la universidad de Harvard, Arthur Jensen, volvió a poner en el candelero las ideas hereditaristas de la inteligencia al publicar un polémico artículo titulado ¿Cuánto podemos elevar el cociente de inteligencia y el rendimiento escolar?, en el que defendía que la diferencia en las calificaciones del cociente de inteligencia (CI) entre blancos y negros está determinada genéticamente. Basándose en las ideas de Jensen, el físico de la universidad de Standford, William Shockley, propuso en 1972 la esterilización masiva de los individuos con cociente intelectual inferior a 100. Sugirió comenzar por las personas dependientes de la seguridad social, a las que se incentivaría con una prima económica de 1.000 dólares por cada punto por debajo de 100 en su cociente de inteligencia. “Tal proposición se presentó a los legisladores conservadores convenientemente aderezada, mediante el uso de la Aritmética para demostrar que el coste del programa se amortizaría en dos o tres generaciones, al desaparecer la necesidad de mantener programas de seguridad social, prisiones e instituciones psiquiátricas. En ese año, un mínimo de dieciséis mil mujeres y ocho mil hombres fueron esterilizados por el gobierno de Estados Unidos. En 1974, catorce estados tenían en estudio propuestas legislativas de ese tipo. En esas fechas, el fiscal general de Estados Unidos, William Saxbee, declaró que "los genes determinantes del comunismo tienden a agruparse con mayor frecuencia en familias judías". (Woodward, V. (1982). "cociente intelectual y racismo científico").<br />En aquellos momentos, Daniel Moyniham, entonces consejero del presidente Richard Nixon, proclamaba que “los vientos huracanados de Jensen azotaban la capital” (Woodward, 1982, p.74). La estrecha relación entre las teorías hereditarístas de Jensen y la siniciativas eugenésicas de Shockley es patente en este comentario.<br />Por muy disparatados que puedan parecer estas propuestas, su desaparición no ha sido total. En los Estados Unidos, en fecha reciente como 1995, la asociación MENSA, constituida por personas con un cociente intelectual superior a 132, proponía la eliminación de los individuos inferiores, entre los que incluía a los retrasados mentales. Existe también en los Estados Unidos un banco de semen, dirigido por Robert Clark, para Premios Nobel y otros personajes igualmente destacados que suministra esperma para inseminaciónes artificiales, siempre que las mujeres que lo soliciten tengan un cociente intelectual suficientemente elevado</div><br /><div></div><div><strong><span style="color:#660000;">3.3. HERMANN MULLER Y LOS BANCOS DE SEMEN <a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj9MAAl_e8mpqbGaiTE9zU_I1-h8bgUelAfy7Z_l_-vA24tXtZrJOtj_CZAmnAdLAwp433cdglIN-Qg1sBML4VDA2ggeSCS-TJGNSxw5hNt7O5SAIh56kqg8NKGOBH5tVwidk4dGb5PjRo/s1600-h/Hermann+Muller.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410870011914227010" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 200px; CURSOR: hand; HEIGHT: 250px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj9MAAl_e8mpqbGaiTE9zU_I1-h8bgUelAfy7Z_l_-vA24tXtZrJOtj_CZAmnAdLAwp433cdglIN-Qg1sBML4VDA2ggeSCS-TJGNSxw5hNt7O5SAIh56kqg8NKGOBH5tVwidk4dGb5PjRo/s400/Hermann+Muller.jpg" border="0" /></a><br /></span></strong><br />En 1959, Hermann Muller presentó su idea de la “selección germinal”. Ësta consistía en la creación deun banco de semen donde se conservasen congelados los espermatozoides de hombres ilustres, entre los que figurarían Premios Nóbel, para ser utilizados en procedimientos de inseminación artificial. Naturalmente, las mujeres que tuviesen acceso a las donaciones de semen tendrían que ser seleccionadas por sus características genéticas. El objetivo de tal propuesta era orientar la evolución humana. Con el tiempo la selección germinal iría eliminando los genes deficientes y haría proliferar los de mejor calidad.<br />En el año 1963, el millonario Robert Gram. se compometió a proporcionar a Muller los primeros mil dólares para el establecimiento de una Fundación Germinal y otros tres mil dólares anuales para un depósito de nitrógeno líquido. Según Muller, entre las características que debían poseer los donantes tendrían que figurar la inteligencia y el altruismo.<br />Después de la muerte de Muller en 1971, Gramham creó el depósito de selección germinal que bautizó con el nombre de Hermann J. Muller, a pesar de las objeciones puestas por la viuda de éste. Comenzó a recolectar semen solamente de Premios Nobel y a buscar mujeres sanas e inteligentes para recibirlo. El único premio Nobel que reconoció haber donado su semen para este fin fue William Shockley, del que ya hemos comentado sus aradoras propuestas eugenésicas para la esterilización incentivada de las personas con CI inferior a 100.<br />El “Banco de Semen” sigue existiendo en la actualidad y, aunque ha renunciado a que los donantes sean exclusivamente Premios Nobel, limita sus reservas al semen de científicos.<br /></div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEifq9KO0KZeCxfAAVhTj9VlmLEfWkIGm1VNWqEXNKHy7l-gmgHnJM5QdknbB_utGjJwXzG8kVodgej66HEhcTleU-BJSeG9LqrKgc00obdPT_oUxCRK5I5xBE_k3zqyaslsbYKptgjhJEw/s1600-h/Lord+M+Keynes.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410869856868604994" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 150px; CURSOR: hand; HEIGHT: 225px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEifq9KO0KZeCxfAAVhTj9VlmLEfWkIGm1VNWqEXNKHy7l-gmgHnJM5QdknbB_utGjJwXzG8kVodgej66HEhcTleU-BJSeG9LqrKgc00obdPT_oUxCRK5I5xBE_k3zqyaslsbYKptgjhJEw/s400/Lord+M+Keynes.jpg" border="0" /></a><br /><div><strong><span style="color:#660000;">3.4. Lord John M. Keynes</span></strong> <br /><br />(1883-1946). Economista inglés, fundamentalmente anti-cristiano, director de la Eugenics Society de 1937 a 1944, vicepresidente en 1937. Es el elaborador de la doctrina keynesiana, que preconiza el control de la economía liberal por el Estado. Primer director del Banco Mundial en 1946 (International Bank for Reconstruction and Development). En la India, durante la hambruna de 1966, los préstamos del Banco Mundial estaban condicionados a la implementación de una política de control de nacimientos (aborto, esterilización y contracepción).<br />Keynes creía firmemente en el eugenismo Galtoniano, que consideraba la rama más importante de la sociología.<br /><br /><strong><span style="color:#660000;">3.5. Prof. Dr. Otmar Freiherr von Verschuer</span></strong><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhSaa61r9DZExC7IBeTvBMguYmtvWarQZUWeiE126mKTruPD0MLG32xi6iTjJ-KMx1-oUcYCX9Pd_UdRdHhbzOeDEENKtlngMNRkUltNUkZq28LLHaNAFBUyrcBHM42I9iHWwPvK6quL9E/s1600-h/Otmar+Freiherr+von+Verschuer.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410869728766299794" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 142px; CURSOR: hand; HEIGHT: 194px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhSaa61r9DZExC7IBeTvBMguYmtvWarQZUWeiE126mKTruPD0MLG32xi6iTjJ-KMx1-oUcYCX9Pd_UdRdHhbzOeDEENKtlngMNRkUltNUkZq28LLHaNAFBUyrcBHM42I9iHWwPvK6quL9E/s400/Otmar+Freiherr+von+Verschuer.jpg" border="0" /></a><br />(1896-1969). Alemán, miembro de la Eugenics Society norteamericana en 1956 y de la A.S.H.G. (Sociedad Americana de Genética Humana).<br />Médico, fue director de la división "Herencia humana" del Instituto Kaiser Wilhelm en Berlin, en 1934. Enseñó "el ámbito completo de la antropología, de la herencia humana y de la eugenesia" así como la "heredo-patología general y específica". En 1935, Von Verschuer declaraba ser el "responsable de asegurar que el cuidado de los genes y de la raza, campo en que Alemania era líder mundial, tuviesen una base tan firme que pudieran resistir a cualquier ataque exterior". De 1936 a 1942 es el director del Instituto del Tercer Reich para la Herencia, la Biología y la Pureza Racial, en Francfort.<br />Se trata de un criminal de guerra, que escapó de las persecuciones, a pesar de su asociación con Mengele (el denominado ángel de la muerte), alumno suyo. El aseguraba la financiación y utilización de los resultados de sus "investigaciones" en Auschwitz.<br />Él inspiró a Mengele sus experimentos sobre mellizos. Por ejemplo, recuperaba los ojos de los mellizos muertos por Mengele para alimentar sus propias investigaciones sobre la transmisión hereditaria de defectos oculares.<br />También hacía financiar a su protegido: "Mi co-investigador en el presente estudio es mi asistente Mengele, médico y antropólogo. Presta servicios como Haupsturmführer y médico en el campo de concentración de Auschwitz... Con autorización del Reichsführer S.S. Himmler, se está llevando a cabo un estudio antropológico de las diversas formas de grupos raciales en el campo de concentración, y se enviarán muestras de sangre a mi laboratorio con fines de investigación". El dinero obtenido sirvió para construir una sala de disección, ubicada entre las cámaras de gas y el horno crematorio. Diversos órganos, miembros y muestras de sangre (extraídos de deportados previamente infectados con tifus) fueron preparados allí, y posteriormente enviados a Von Verschuer y otros científicos del Instituto Kaiser Wilhelm.<br />Tras la derrota nazi, Von Verschuer destruyó su correspondencia con Mengele y pretendió ignorarlo todo acerca de Auschwitz y de los métodos bárbaros de su discípulo.<br />El conocimiento tardío de estas maniobras no permitió una condena por el Tribunal de Nüremberg. Kallmann concurrió a testimoniar en favor de Von Verschuer. El jefe de expertos médicos del Tribunal era Leo Alexander, que también fue miembro de la A.S.H.G. (Sociedad Americana de Genética Humana) en 1954.<br />Después de la guerra, Von Verschuer entró en contacto con los eugenistas ingleses (Bureau of Human Heredity en Londres) : "Espero que el equipamiento científico del ex Instituto Kaiser Wilhelm en Dalhem, que yo he traído... a Francfort, me permitirá continuar, o más bien, retomar mi trabajo de investigación.... sobre la tuberculosis... No pierdo la esperanza de que haya gente en Inglaterra y Estados Unidos que me ayudarán a continuar mis investigaciones cientificas".<br />Von Verschuer les informó también que tenía en su poder los resultados de las invstigaciones de Auschwitz.<br />En 1968, culminó su carrera como profesor emérito en el Instituto de Genética Humana de la Universidad de Munster. Su sucesor era Widukund Lenz, hijo de Fritz Lenz, inspirador de la política eugenista de Hitler.<br />En cuanto a Joseph Mengele, el "ángel de la muerte", huyó a la Argentina, donde continuó su carrera practicando abortos, ilegales. Una joven murió a consecuencia de ello y Mengele compareció ante los tribunales que, extrañamente, no lo condenaron (New York Times, 11/02/1992).<br /><br /><strong><span style="color:#660000;">3.6. ALVA MYRDAL</span></strong><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi9vT4qB7OhUGwgsIMzUnaccP8YJIBSjqL1XaYGiOpqe8e65zxoYMfoQ2j3JsF3nne9aT4UtF8KICNXl6OeY15pJ97yV5QZPTtnkimTccsk8QMsWOPsUafpP503nY1riDJvIPrVSNPKwVs/s1600-h/alva+myrdal.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410869556257932674" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 180px; CURSOR: hand; HEIGHT: 236px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi9vT4qB7OhUGwgsIMzUnaccP8YJIBSjqL1XaYGiOpqe8e65zxoYMfoQ2j3JsF3nne9aT4UtF8KICNXl6OeY15pJ97yV5QZPTtnkimTccsk8QMsWOPsUafpP503nY1riDJvIPrVSNPKwVs/s400/alva+myrdal.jpg" border="0" /></a><br />Defensora acérrima del “plan de mejoramiento de la población” Sueca, consistente en la esterilización forzada de miles de personas, por considerárseles “biológicamente inferiores”.<br />Desde 1949 a 1955, el involucramiento de la ONU en asuntos de la mujer sufrió un decidido cambio a manos de la Sra. Alva Myrdal, de origen sueco, quien asumió la dirección de varios de sus organismos. En su libro, Crisis en el asunto de la población, publicado en 1934, Myrdal y su esposo Gunnar promovieron la idea de que la familia tradicional es un sistema “casi patológico”, “sin raíces” y condenado a “la desintegración y la esterilidad”. Alegaban que debía ser reemplazada por un modelo de familia en el cual la mujer se comportaría en el trabajo como “el camarada” del hombre, donde los niños se convertirían en una responsabilidad social y donde nociones supuestamente “anticuadas” como “vida privada” y “hogar”, darían paso a la cooperación social. También favorecían la liberalización de la ley sueca sobre el aborto, la disponibilidad de los anticonceptivos, la educación sexual en las escuelas, la responsabilidad del Estado de establecer metas y controles en asuntos de población y la eliminación de distinciones legales y sociales entre adultos casados y solteros. La Sra. Myrdal también alegaba que para lograr la igualdad de género, había que desmantelar el hogar tradicional por medio de la ley, y que aún sería necesaria la coacción para eliminar aquellos roles femeninos que fuesen incompatibles con esta visión de lo que es la igualdad.<br />Las ideas de Alva Myrdal y de otros dirigentes de similar mentalidad fueron penetrando los distintos organismos de la ONU, manifestándose especialmente a través de sus conferencias internacionales. Como “premio a su contribución a la humanidad” recibió en 1982 el premio Nóbel de la Paz<br /><br /><strong><span style="color:#660000;">3.7. Prof. Franz JOSEF. Kallmann</span></strong><br /><br />Alemán, miembro asociado de la Eugenics Society norteamericana en 1955, fundador de la A.S.H.G. (Sociedad Americana de Genética Humana) en 1948 (junto a Von Verschuer).<br />Este médico psiquíatra comienza su carrera en 1919 en Breslau y la continúa en los laboratorios de neuropatología de los hospitales de Berlín entre 1929 y 1935. Se formó con Ernst Rüdin en Munich. [Ernst Rüdin fut director de esterilización genética bajo el régimen de Hitler, y luego fundador de la Sociedad Nacional-socialista por la Higiene Racial]. Por causa de una ascendencia judía, Kallmann fue expulsado de Alemania en 1936, lo cual no le impidió acudir al tribunal de Nüremberg para prestar testimonio en favor de Von Verschuer (protector de Mengele).<br />Kallmann fundó el departamento de genética médica del Instituto Psiquiátrico del Estado de New-York en 1936. Prosiguió allí sus investigaciones sobre la genética de la esquizofrenia, con el apoyo financiero de los francmasones del rito escocés del Norte (6 millones de dólares).<br />Cuando publicó los resultados de sus trabajos en 1938, no olvidó agradecer, además de los francmasones del rito escocés, a Ernst Rüdin, arquitecto de las leyes raciales de Hitler. "El Dr. Franz J. Kallmann, quien estuvo anteriormente asociado al Dr. Ernst Rüdin, en investigaciones de psiquiatría genética, está actualmente vinculado al Hospital y al Instituto Psiquiátrico de New-York, donde efectúa un trabajo de investigación en el mismo campo" declaraba efectivamente el Eugenical News en 1938.<br />Como Mengele, Kallmann se interese mucho por el estudio de los mellizos. Él es uno de los principales inspiradores y fundadores de la A.S.H.G. (Sociedad Americana de Genética Humana), que originó el desarrollo de los tests prenatales, fuente del aborto eugénico.</div></div></div></div></div>Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-84106752858830153112009-12-02T20:41:00.000-08:002009-12-02T20:54:13.583-08:004. Eugen Relgis y el pacifismo: La superpoblación como causa de la guerra.<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgtyakZzSsF3X4y7SWkgt4nzsEsQUtIF_yHOkAOmqVMuZ9E0P4tL4okuRIQKGu_Dvi8G28i5KfiBhz_wPH3hg8EynN2cyH90b31EnI2ji4cOgme1KE9qdoSVg_PeLQU9laV1_FWgQJ-Al0/s1600-h/eugen+relgis.gif"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410868590148908642" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 132px; CURSOR: hand; HEIGHT: 145px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgtyakZzSsF3X4y7SWkgt4nzsEsQUtIF_yHOkAOmqVMuZ9E0P4tL4okuRIQKGu_Dvi8G28i5KfiBhz_wPH3hg8EynN2cyH90b31EnI2ji4cOgme1KE9qdoSVg_PeLQU9laV1_FWgQJ-Al0/s400/eugen+relgis.gif" border="0" /></a><em><span style="color:#660000;">“¡En nombre de la humanidad, los hombres tendrían que dejarse exterminar por monstruos con rostro humano!”Eugen Relgis 1950</span></em><br /><br />Eugen Relgis (1895-1987) fue un anarquista rumano y es considerado uno de los más importantes abanderados de la corriente pacifista que recorrió Europa después de la segunda guerra mundial. Escribió varios manuales que tienen amplia difusión en los que expone sus ideas. En 1950 publica “Humanitarismo y eugenesia” donde defiende la eugenesia como un acto de progreso de la humanidad.<br />Desde una visión puramente materialista del hombre y la sociedad, parte de la hipótesis de que “los dos ejes que sostienen la existencia terrestre son el hambre y la procreación, el vientre y el sexo”. Eugen argumenta que el eugenismo es un humanismo y que la causa principal de todas las guerras es la superpoblación. Por ello, trabajar por la esterilización y el control de los pobres es luchar por la paz futura. Sus tesis principales son:<br /><br /><strong>1. Esterilización de cuantos manifiesten caracteres patológicos o sufran enfermedades incurables.<br /></strong><br />“Cuando una especie animal comienza a degenerar, hállase condenada a desaparecer. En la especie humana, la perpetuación de los degenerados se ha hecho posible por la ciencia médica y por la doble moral social, que protege a los débiles y sostiene a los estropeados e incluso a los “tarados” incurables. Así, el tipo humano inferior se reproduce y su multiplicación es una causa de degeneración de la especie humana. `La selección natural, atemperada por el hombre, es por tanto disgénica´”.<br />“No podemos exterminar a los degenerados que viven entre nosotros. Pero, podríamos evitar el nacimiento de otros degenerados. En lugar de la selección natural, el hombre puede practicar la selección racional, empleando los medios propios para prevenir la transmisión de la herencia mórbida”.<br /><br /><strong>2. Evitar los pobres como medida de progreso de la humanidad.</strong><br /><br />“La raza de los pobres es inferior a los hombres normales desde todos los puntos: no solamente la talla, la capacidad craneana, la fuerza física y la resistencia a la fatiga son reducidas en ella; no sólo el crecimiento de sus hijos es lento; no sólo sufre anomalías fisiológicas, sino tiene una sensibilidad más reducida y sus caracteres psicológicos aproximan su mentalidad a la del niño y a la del primitivo”.<br /><br /><strong>3. La mujer como pieza clave de la “nueva humanidad”.</strong> <a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhXVLpythrYPTGRgN1AI6mAcXwBT3BM8oxduLAOzB8JyV_CroqRP1wpMbE3f_z56vWa5ZkL-p7C2cjkl2WqVFfafwcpHTrGIAGWb0X0vtOrErTJIQqghe2jLIi4WEDiDpfKJ6Pj1atmq0A/s1600-h/1950relg.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410868505173215042" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 200px; CURSOR: hand; HEIGHT: 308px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhXVLpythrYPTGRgN1AI6mAcXwBT3BM8oxduLAOzB8JyV_CroqRP1wpMbE3f_z56vWa5ZkL-p7C2cjkl2WqVFfafwcpHTrGIAGWb0X0vtOrErTJIQqghe2jLIi4WEDiDpfKJ6Pj1atmq0A/s400/1950relg.jpg" border="0" /></a><br /><br />“Si la mujer del pueblo poseyese los conocimientos sexuales de una mujer del `gran mundo´, si dispusiera, sobre todo, de los medios discretos de evitar la concepción no deseada o el nacimiento que pone a veces en peligro la vida de una madre y es fatal con frecuencia para el hijo, entonces la mujer del pueblo sería un elemento activo en la regeneración de la especie”.<br />“Las mujeres deben adquirir conciencia de su gran misión: el mejoramiento de la especie humana por medio de una educación sexual integral, dispensado a ellas mismas, así como a los hombres y a los niños”.<br /><br /><strong>4. La Iglesia al fomentar la caridad se convierte en el principal enemigo del progreso humano.</strong><br /><br />“Las herejías más importantes que se oponen a estas reformas son contenidas en los dogmas religiosos y ultranacionalistas. La Iglesia –sea cual fuere: cristiana, judaica, islámica – abusa del mandamiento bíblico: “Creced y multiplicaros”. Es mandamiento absoluto también en la India famélica, en la China opiómana y en el Japón imperialista”.<br />“La maternidad consciente exige del hombre un espíritu libre de los dogmas y de las supersticiones, y un corazón grande en el que debe de dominar el respeto ajeno, que es la forma más elevada de la justicia y la piedad, que es la forma más elevada del amor”.<br /><br /><strong>5. La guerra es consecuencia de la “superglobalización”.</strong><br /><br />“La presión de la población en todos los países entraña, como principal consecuencia histórica, emigraciones e invasiones, no sólo con miras a un establecimiento pacífico, sino también, para la conquista, para el sometimiento y la explotación de los pueblos más débiles. Los conflictos internacionales encuentran siempre en ello su causa principal” Informe del comité nacional de la tasa de la natalidad 1916.<br />“La reglamentación de la población – de la procreación – es la manera más eficaz de asegurar el cese de la guerra” Adelyne More.<br />“… la limitación de los nacimientos debe ser mundial, pues el planeta hállase sometido hoy a leyes unitarias. Si por ejemplo, Europa practica el eugenismo, quedará expuesto al peligro de una invasión del Asia prolífica, pese a toda su superioridad en materia de técnica. En efecto, de igual modo que la limitación de los armamentos, la limitación de los nacimientos no será eficaz más que en el cuadro planetario”.<br /><br /><strong>6. La educación sexual constituye el medio para conseguir la “maternidad consciente”.</strong><br /><br />“Esos saboteadores de la vida deben ser considerados y tratados como malhechores por los humanos acrisolados, que sientan en sí mismos el sufrimiento de todos los pobres seres así engendrados”.<br />“La revolución sexual consiste simplemente en la aplicación de los principios eugenésicos y en el reconocimiento de la ley de población del maltusianismo”.<br />“Llegará un tiempo en que los hijos pedirán cuentas a los padres del crimen de haberles hecho nacer para el infortunio. La educación sexual integral hácese más fácil cada día y será obligatoria para cada cual, en la medida que lo es hoy el conocimiento del abecedario”.Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-13341718731234413122009-12-02T20:39:00.000-08:002009-12-02T20:41:10.032-08:005. La fundación RockefellerEl informe Rockefeller señalaba como causa fundamental del peligro para la plena consecución de sus planes de reducción forzada de la población a la Iglesia Católica “que educa a los pueblos, les da cultura, les hace pensar y les anuncia la inalienable dignidad de los hombres” (Sandalio, 2004, Julio 7, El Informe Global 2000).<br />Uno de los más notables portavoces estadounidenses del darwinismo social fue John D. Rockefeller, el primero de la dinastía, que declaró en un discuros Cléber:<br /><br /><em><span style="color:#660000;">“La variedad de rosas American Beauty sólo puede producirse con el esplendor y el perfume que entusiasman a los que la contemplan sacrificando los primeros brotes que nacen a su alrededor. Lo mismo ocurre en la vida económica. No es más que la aplicación de una ley de la naturaleza y de una ley de Dios”. John Davinson Rockefeller</span></em><br /><br />Está mentalidad la transmitió a descendientes, que crearon la Fundación Rockefeller para seguir estos fines. Uno de los campos en el que la Fundación Rockefeller fue pionera es el del control de la natalidad, al punto que ya en 1934 comenzó a desarrollar su labor en ese terreno uno de los miembros del clan, John D. Rockefeller III, si bien los condicionantes mentales de la época no eran aún lo suficientemente propicios para tales planteamientos. Pero ese inicial inconveniente no habría de suponer un gran obstáculo. Todo era cuestión de tiempo y del adecuado despliegue propagandístico para que la mentalidad occidental fuera adaptándose a las necesidades del capitalismo moderno. A medida que el asunto se fue divulgando, el rechazo de los primeros momentos a las tesis anticonceptivas fue dando paso a una acogida más favorable, de tal modo que ya a finales de los cincuenta el control de la natalidad se había convertido en una de las prioridades de la política exterior norteamericana. Tanto es así que, en 1958, el Departamento de Estado adoptó como tesis oficial que el crecimiento demográfico constituía el mayor obstáculo para el desarrollo económico y social y para el mantenimiento de la estabilidad política en los países del Tercer Mundo. Una tesis que ha venido manteniéndose desde entonces, y mediante la cual se han soslayado sistemáticamente las razones de fondo de la postración tercermundista. No será ocioso significar que buena parte del presupuesto dedicado por la Administración norteamericana al control de la natalidad en las regiones subdesarrolladas ha corrido tradicionalmente a cargo de las Fundaciones Ford y Rockefeller, cuyo proverbial altruismo se manifiesta igualmente en el ámbito occidental a través de sus aportaciones millonarias a la causa proabortista.<br />Desde John D. Rockefeller Sr. en el siglo XIX, que había sido influenciado por el darwinismo social de Herbert Spencer, esta poderosa familia norteamericana financia el activismo eugenista. Lo hace especialmente a través de las siguientes organizaciones:<br /><br /><strong>El Population Council,</strong> En 1952, John D. Rockefeller III y Frederick Osborn crean el Consejo de Población, preocupado por las consecuencias que podía tener el crecimiento de la población en los países en desarrollo. Dicho Consejo dio muestras inequívocas de simpatía eugenésica durante la primera década de funcionamiento, cuando financió la creación de la Sociedad Estadounidense de Eugenesia y ofreció apoyo a la publicación Eugenics Quarterly. Tiene además una influencia esencial en la política norteamericana de despoblación (capacitación de "expertos" en demografía y apoyo a la investigación de contraceptivos y abortivos). Es al Population Council que Hoechst-Roussel "donó" la licencia del RU486. También recibe fondos de la Fundación Ford.<br />Desde entonces, el Consejo de Población tiene un papel clave en las investigaciones teóricas sobre "asuntos de población" y en el desarrollo de técnicas de contracepción. En varios casos, y un ejemplo es el del Norplant, se trató de métodos pensados para integrar programas de control de natalidad patrocinados por Occidente a fin de limitar la fertilidad de las mujeres del mundo en desarrollo. Rara vez su aplicación fue totalmente voluntaria.<br /><br /><strong>Los informes Kinsey</strong> fueron una herramienta esencial de la revolución sexual, aun cuando quedó demostrado que eran un fraude científico.<br /><br /><strong>El World Watch Institute,</strong> creado por el Rockefeller Brothers Fund para "alertar a los decisores y al público en general acerca de las tendencias globales emergentes en la disponibilidad y manejo de los recursos, tanto humanos como naturales, bajo la dirección del renombrado activista Lester R. Brown. El World Watch Institute procura dirigir la atención de la prensa hacia la "crisis" poblacional, mediante la publicación de folletos y de libros que anuncian la inminencia de calamidades debidas a la superpoblación. Es igualmente financiado por la ONU y por la Fundación Ford. El World Watch Institute, en su último informe (14/01/96), elogia a China e Irán por sus políticos anti.familiares, al tiempo que deplora la desaparición de ciertas especies de animales salvajes.<br /><br /><strong>Catholics for a Free Choice,</strong> (Católicos por la libre elección), cuyo propósito es hacer creer que se puede ser católico y promover el aborto.<br /><br /><strong>La Planned Parenthood,</strong> (Planificación Familiar), así como todos sus avatares durante en el transcurso del siglo. Margaret Sanger hacía circular el dinero de los Rockefeller y de los McCormick en dirección de Gregory Pincus, para sus investigaciones sobre la "píldora". Actualmente, es la rama activista del eugenismo, oculta tras el camuflaje de "servicios de la salud reproductiva".<br /><br /><strong>El Instituto Kaiser Wilhelm</strong> en Berlin y en Munich. Los Rockefeller han ayudado allí a Ernst Rüdin, arquitecto de la política eugenista de Hitler.<br /><br /><strong>El Council on Foreign Relations (CFR),</strong> destinado a promover un "nuevo orden mundial" contra las soberanías nacionales.<br /><br /><strong>La Fundación Rockefeller,</strong> "para promover el bienestar de la humanidad en todo el mundo", se está concentrando en el desarrollo internacional de las "ciencias de la población". Es un instrumento de transferencia de dinero, especialmente hacia la Planificación Familiar.<br /><br /><strong>La O.N.U.:</strong> la Declaración sobre la Población, de la ONU, era una iniciativa de John D. Rockefeller III. Rockefeller donó el dinero y el terreno para el edificio de la ONU en Nueva York. Entre los representantes norteamericanos en la división "Población", se encuentran F. Notestein y Kingsley Davis, de la American Eugenics Society. La rama demografía de la ONU es una iniciativa de Frederick Osborn (igualmente miembro de la A.E.S.) ; G. Acsadi-Johnson, responsable de la rama "Fertilidad y Población" en 1974 también era miembro de la A.E.S.<br /><br /><strong>EL CONSEJO DE POBLACIÓN<br /></strong><br /> En el mes de junio de 1952, John D. Rockefeller funda el Population Council con el fin de desarrollar la investigación cineífica fundamental sobre la fisiología de la reproducción humana, la investigación aplicada en los métodos anticonceptivos (de ahí la píldora de Pincus en 1956 y el dispositivo intrauterino en 1960) y, por último, sobre las implicaciones sociales, éticas y morales de los métodos anticonceptivos (P. Bourcier de carbon, 1998). Siendo muy activo, el Population Council se asegura la colaboración de los sucesivos directores de la División de la Población de las Naciones Unidas (D. Kira, F. Notestein, B. Berelson) y logra que a través de dicho organismo se admita la idea de que la única forma de evitar las catástrofes anunciadas consiste en reducir por todos los medios la fecundidad en los países pobres. En 1965, la Comisión de la Población de la ONU propone una asistencia internacional a cualquier país solicitante acerca de los problemas de población incluyendo la planificación de los nacimientos. Al año siguiente, John D. Rockefeller obtiene personalmente las firmas de 30 jefes de Estado (entre los que figuran las de Suecia y Finlandia) en un manifiesto de la población que proclama que “las parejas deben tener la posibilidad de planificar a su familia y disponer de los medios y los los conocimientos a tal efecto”. El secretario general de la ONU, U. Thant, crea entonces el Fondo de las naciones Unidas para las actividades en materia de población (UNFPA) que recibe un enorme presupuesto (240 millones de dólares en 1994) para promover la restricción de los nacimientos en cualquier zona del mundo.<br /> Sin embargo, en 1974, en el Tercer Congreso Mundial de la Población celebrado en Bucarest, la resistencia de varios países (Argelia, Argentina) lleva a John D. Rockefeller y, tras él, al Banco Mundial a flexibilizar sus posturas reconociendo que “el crecimiento demográfico rápido no es más que uno de los múltiples problemas a los que se enfrentan la mayoría de los países” y que “reducir el crecimiento demográfico no es una alternativa al desarrollo”. Durante la segunda conferencia mundial que tuvo lugar en México en 1984, se constata que el crecimiento demográfico ha frenado – en la mayoría de los países pero no en todos – y que las poññiticas antinatalistas tienen unos efectos sólo escasos sobre el desarrollo. Estados Unidos, hostil a las intervenciones estatales, suprime su contribución al UNFPA. A partir de entonces, los neomalthusianos hacen más hincapié en los derechos de la mujer y en la salud de la reproducción “para una vida mejor de las generaciones por llegar”. Apoyadas por organismos privados – en particular por la Internacional Parentwood Federation IPPF –, algunas universidades americanas y varios gobiernos logran el apoyo de otra agencia de la ONU, la Organización Mundial para la Salud (OMS), que se hace cargo en cualquier parte del mundo de los programas de anticoncepción y de esterilización; y todo ello en nombre de un “nuevo paradigma” que implica los aspectos económicos y políticos de la salud (M. Schooyans, 1997). Este tema de la “salud reproductiva” ocupa el lugar central durante la Tercera Conferencia Mundial sobre “Población y Desarrollo” (El Cairo, 1994) con sus diferentes aspectos: “maternidad sin riesgo”, “planificación familiar”, “regulación de la fecundidad”. No obstante, resulta imposible obtener el acuerdo unánime de los gobiernos con vistas a generalizar la esterilización y el aborto en los países en desarrollo.<br /> ¿Cuál fue el impacto de estas campañas? En apariencia, el resultado más espectacular ha sido el progreso de la esterilización, que concerniría ahora al 37% de las mujeres en edad de procrear en los países llamados “en vías de desarrollo” (39% en Asia y en Oceanía, 36% en América Latina, 9% en África); pero sale a relucir que el descenso de la fecundidad en dichos países se debe más a ciertos cambios culturales – que se suelen designar con el término impreciso de “modernización” – que a la difusión de procedimientos técnicos. En lo que a Europa se refiere, la ofensiva fatalista ha tenido probablemente efectos indirectos a causa de la ideología que implicaba y ello a pesar de la donosa prgunta que Alfred Sauvy gustaba de hacer: “¿Es que hay que ponerse a dieta so pretexto de que un obeso vive en la casa de al lado?”.Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-51226860983507381672009-12-02T20:37:00.000-08:002009-12-02T20:38:32.241-08:006. El "humanismo" secularistaUna de las raíces ideológicas de la “cultura” de la muerte es lo que podríamos llamar el “humanismo” secularista. Este falso “humanismo” se distingue del verdadero humanismo cristiano en que reduce al hombre a la dimensión inmanente y rechaza su dimensión trascendente: Dios. El humanismo cristiano centra su visión del hombre en Dios, pues reconoce que Dios es el fundamento de su ser y de su dignidad.<br />El “humanismo” secularista, por el contrario, erróneamente ve en Dios o en la religión un “obstáculo” para el “progreso” del hombre, sobre todo el progreso científico. De hecho, el “humanismo” secularista pone todas sus esperanzas en el hombre, en su ingenio científico y tecnológico y en esta vida terrenal, rechazando o restándole importancia a la vida eterna con Dios.<br />Esa es, en pocas palabras, la ideología del “humanismo” secularista, tal y como la han plasmando sus proponentes en los dos Manifiestos humanistas que se han publicado hasta la fecha en Estados Unidos, uno en 1933 y el otro, más radical todavía, en 1973.<br />Uno de los firmantes del I Manifiesto humanista (el de 1933) fue John Dewey, considerado el padre de la educación estadounidense. Sólo podemos imaginarnos el tremendo daño que el excesivo pragmatismo de Dewey le ha hecho a la mentalidad del pueblo de Estados Unidos y, por la poderosa influencia de este país, en el resto del mundo. Los malos frutos de esa ideología se están cosechando hoy en la “cultura” de la muerte.<br />El II Manifiesto humanista, publicado en 1973, tuvo una larga lista de signatarios, todos ellos personnas muy influyentes --intelectuales, académicos, científicos y educadores. Es importante destacar que entre esos firmantes estuvieron el Dr. Alan F. Guttmacher, que en esos tiempos fue dirigente de Paternidad Planificada; Norman Fleishman, otro líder en Estados Unidos en aquel entonces de esa misma organización proabortista; el Dr. Henry Morgentaler, un tristemente famoso abortero del Canadá; Betty Friedan, a quien ya mencionamos y que fue la fundadora del feminismo radical en Estados Unidos y de la organización feminista NOW, a la cual también ya hemos mencionado; Sol Gordon, uno de los promotores principales de la “educación” sexual inmoral en Estados Unidos; y Julian Huxley, de Gran Bretaña y ex director de la UNESCO.<br />Las siguientes citas que hemos seleccionado del II Manifiesto humanista revelan, por sí mismas, la ideología agnóstica, relativista y antivida del “humanismo” secularista.<br />Con respecto a la religión o a la fe en Dios, los signatarios del Manifiesto afirman:<br /><br /><em><span style="color:#660000;">“No podemos descubrir ningún propósito divino o providencia para la especie humana. Aunque hay muchas cosas que desconocemos, los seres humanos somos responsables de lo que somos o de lo que seremos. Ninguna deidad nos va a salvar; tenemos que salvarnos a nosotros mismos”.<br /></span></em><br />Este rechazo de Dios lógicamente lleva a un rechazo también de los principios morales objetivos y absolutos y, consecuentemente, a la aceptación de una “moral” relativista. Con respecto a ello, los firmantes declaran:<br /><br /><em><span style="color:#660000;">“Afirmamos que los valores morales se derivan de la experiencia humana. La ética es autónoma y situacional, no necesita ninguna aprobación teológica o ideológica. La ética surge de las necesidades humanas y del interés humano.”<br /></span></em><br />Toda esta palabrería sonará muy bonito, pero es falsa, absurda y dañina. Si cada cual tiene unas necesidades y unas experiencias diferentes, entonces lógicamente cada cual tendrá una “ética” diferente. La conclusión de todo ello es que los más fuertes impondrán su “moral” o sus “valores” sobre los más débiles e indefensos. Es lo que está ocurriendo, por ejemplo, con el aborto y la eutanasia. Los que tienen voz y voto deciden en una falsa e hipócrita “democracia” aprobar estas prácticas criminales para su propia conveniencia y egoísmo, llamándoles “intereses” o “necesidades”. Sólo una moral objetiva, absoluta y universal, fundada en la bondad y la justicia de Dios, puede garantizar que los derechos y los deberes de todos sean respetados y promovidos.<br />En relación con los crímenes del aborto y la eutanasia, así como otros males, los signatarios declaran: “En el área de la sexualidad, creemos que las actitudes intolerantes, a menudo cultivadas por las religiones ortodoxas y las culturas puritánicas, reprimen indebidamente la conducta sexual. El derecho al control de la natalidad, al aborto y al divorcio debe ser reconocido... Las distintas formas de exploración sexual [¿homosexualismo?] no deben ser consideradas malas en sí mismas... Para acrecentar la libertad y la dignidad, el individuo debe experimentar un ámbito completo de libertades civiles en todas las sociedades. Ello incluye...la eutanasia y el derecho al suicidio.”<br />Obsérvese que, además de recurrir otra vez a la palabrería, los signatarios del Manifiesto tildan a sus oponentes de tener “actitudes intolerantes” y de ser “puritánicos”. Esa es una estrategia típica de los promotores de la “cultura” de la muerte, ridiculizan a los que se le oponen y evitan el diálogo abierto, sincero y fundado en sólidos argumentos científicos y éticos. Los proabortistas de Estados Unidos, por ejemplo, jamás admiten que en los medios de comunicación se muestre qué es el aborto y qué le hace al bebito no nacido y a su madre. Luego acusan de “intolerantes” a los que defienden la vida de aquellos que no tienen ni voz ni voto.Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-92131435068293355882009-12-02T20:35:00.000-08:002009-12-02T20:36:45.591-08:007. Las aplicaciones actuales de la eugenesia<strong>El denominado aborto "terapéutico":</strong> no tiene nada de terapéutico porque no cura a nadie y porque los progresos de la obstetricia hacen que ya no sea absolutamente necesario para "salvar a la madre". No obstante los médicos ejercen presión psicológica en las mujeres embarazadas, especialmente en las mayores de 35 años. El diagnóstico prenatal (con el que por otra parte se corre el riesgo de dañar al niño) tiene la finalidad casi exclusiva de proponer el aborto si el bebé tiene alguna probabilidad de malformación. Se ha decidido hipócritamente llamarlo aborto "terapéutico" en lugar de aborto "eugenésico".<br /><br /><strong>El aborto legalizado bajo la denominación de "Interrupción voluntaria del embarazo”:</strong> la interrupción voluntaria del embarazo proviene de una manipulación de las personas, normalmente acompañada de presiones económicas y psicológicas, cuya finalidad es impedir que los pobres tengan hijos. Para imponer este aborto, se ha recurrido a diversos mitos. El principal es del hijo "deseado".<br /><br /><strong>El aborto provocado involuntario:</strong> por lo general se practica en los países occidentales bajo el nombre de "contracepción", pero mediante procedimientos que en realidad son abortivos, (mecánicos o químicos), ya que intervienen después de la concepción. Entre éstos, se destaca el D.I.U., dispositivo abortivo intrauterino, que comenzó a difundirse durante la primera mitad del siglo. Su creación fue financiada por los movimientos para el Control de la Natalidad (especialmente por Margaret Sanger). En Francia, el D.I.U. ha sido erróneamente clasificado, como un anticonceptivo. Se supone que las píldoras "anticonceptivas" de mini- o microdosis, por su escasa dosificación hormonal, tienen un efecto "preventivo" impidiendo la concepción y eventualmente "curativo" destruyendo el fruto; o sea, un efecto 'abortivo', que los fabricantes y los publicitarios se cuidan muy bien de explicar a sus clientes. La píldora abortiva, RU 486 y otras drogas abortivas, como el NORPLANT, están destinadas a ser difundidas como anticonceptivos en la parte pobre del hemisferio, en el Sur. Tienen la ventaja de ser más baratas y fáciles de administrar, y por ende, más accesibles a la población que las píldoras diarias. El pretexto invocado es el riesgo que corren las mujeres, por los abortos ilegales, supuestamente numerosos. (Para la OMS 200.000 mujeres mueren anualmente en el mundo por abortos ilegales). Estas mentiras ya fueron utilizadas para obtener la legalización del aborto.<br /><br /><strong>La fecundación in vitro con transferencia de embriones:</strong> Se realiza así el sueño de los eugenistas: separar totalmente la procreación de la sexualidad. Si el padre receptor es estéril, se selecciona un donante de "calidad" y luego entre los embriones, se elige al que se ha de implantar en función de criterios de "calidad". Testard denunció esta "eugenesia democrática". La Fecundación in vitro con transferencia de embriones, aun cundo no haya selección, es muy mortífera: se fecundan una cantidad de óvulos, procreando así una cantidad de seres humanos embrionarios. De éstos sólo una minoría tiene alguna probabilidad de llegar a término.<br /><br /><strong>La esterilización involuntaria o forzada:</strong> surgió en los Estados Unidos, en Gran Bretaña y en Suecia, países de eclosión del eugenismo. También se practicó en Alemania bajo el Tercer Reich, donde se llevaron a cabo muchas investigaciones sobre medios de esterilización en masa, que fueron continuados después de la guerra por los movimientos eugenistas en los países anglosajones. La esterilización forzada es aplicada hoy en China por el gobierno comunista, en el marco de una política abiertamente eugenista. La esterilización involuntaria se aplica en muchos países del Sur: ya sea esterilizando a las mujeres sin que éstas lo sepan durante otras operaciones, ya sea sometiéndolas a campañas de "vacunación" que incluyen un esterilizante con la vacuna.<br /><br /><strong>La eutanasia:</strong> Actualmente se practica a gran escala en Francia y en todos los países occidentales, tanto legal como ilegalmente. Su finalidad es reducir el costo de mantenimiento de las personas de edad avanzada y de aquéllas que se han convertido en socialmente "inútiles" y por no alcanzar ciertas normas de "calidad de vida", son consideradas como "indignas de vivir". El sistema permite perpetuar los sistemas de jubilación para las personas activas con buena salud. Aquí también hay una gran hipocresía: se habla de reducción del sufrimiento de los enfermos, de calidad de vida, de muerte digna.<br /><br /><strong>El proyecto del genoma humano:</strong> es un viejo proyecto de los eugenistas. Fue lanzado por la Sociedad Americana de Genética Humana (ASHG), fundada por el Dr. Franz J. Kallmann (miembro de la Sociedad de Eugenesia Americana) que había trabajado con los nazis. El conocimiento del mapa del genoma humano permitirá afinar la selección de los hijos antes del nacimiento, e incluso su producción industrial, dentro de la óptica de Francis H. Crick (premio Nobel en 1962 junto con James D. Watson por el descubrimiento del ADN): "Ningún recién nacido debería ser declarado humano mientras no haya pasado con éxito ciertas pruebas relativas a su patrimonio genético, y en caso de fracaso ante dichos controles, debería ser privado del derecho a vivir." (Pacific News Service, 01/1978). Se presentan estas investigaciones como animadas por la finalidad de la "terapia genética"; pero en realidad la "terapia genética" es la muerte del enfermo; en este caso, la de seres humanos embrionarios.<br /><br /><strong>La injerencia del estado en la familia:</strong> se ejerce de varias maneras. En China, el Estado, con ayuda de la I.P.P.F., obliga a las familias a tener un único hijo, a veces dos, por medios coercitivos (abortos o esterilización forzados) y de propaganda (fuerte represión de los rebeldes). Otras naciones implementan políticas que perjudican a las familias numerosas o las alientan a la esterilización.<br />En el mismo orden de ideas, suele suceder que el Estado pretenda inmiscuirse en la educación de los hijos cuando éste ámbito pertenece a los padres y ellos sólo le delegan su autoridad.Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-55769712286263648862009-12-02T20:33:00.001-08:002009-12-02T20:35:16.406-08:008. Las criptopolíticas demográficas<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiFoXcRcvivJLuK1RtITlkrFNSab2N4SkUuufmh81eVGLdm-4axGYEBJOJL4cPUjqMecZHlE_yNgBDwdiYOMiij5M2jAtVr35ck_s0rqYV2-0CPutTKiZJf-W6Gjk-9GV5yA7EhpCjxSCc/s1600-h/China2.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410863811510863826" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 276px; CURSOR: hand; HEIGHT: 400px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiFoXcRcvivJLuK1RtITlkrFNSab2N4SkUuufmh81eVGLdm-4axGYEBJOJL4cPUjqMecZHlE_yNgBDwdiYOMiij5M2jAtVr35ck_s0rqYV2-0CPutTKiZJf-W6Gjk-9GV5yA7EhpCjxSCc/s400/China2.jpg" border="0" /></a>No es fácil definir el ámbito propio de las políticas demográficas en el seno de la política general (J. Verriére, 1978). No podemos atenernos al estrecho sentido de “políticas voluntaristas que tienen un objetivo demográfico explícito”; pero ¿hay que pasar a la amplia acepción basada no en el efecto buscado sino en el resultado logrado? Entonces, de las políticas demográficas dependerá cualquier medidad que afecte al estado o al movimiento de la población en un aspecto u otro. Peero entonces podríamos llegar a englobar a toda la política económica y a cualquier acción social así como a la ordenación territorial y a las migraciones. Nos atendremos, por tanto, al término de “cripto-políticas”, a las medidas que tienen efectos indirectos – a veces deseados, a veces perversos, a veces ocultos – sobre la constitución de la familia y la reproducción de los hombres.<br />La cripto-política más evidente concierne la legislación del matrimonio y la reglamentación de los poderes en lafamilia. Por tradición y sobre tyodo desde la Revolución Francesa, el estado se ha arrogado un derecho de observación y de intervención en la esfera familiar convirtiéndose en protector de sus miembros contra el poder arbitrario del pater familias. Ha transmutado el matrimonio en un acto de derecho civil, productor de efectos jurídicos sobre las personas y sobre los bienes. Tiende a limitar el poder paterno en todos los países, a rebajar la mayoría de edad, a definir los derechos del niño e incluso, en caso de peligro, a retirar a éste de la tutela de sus padres. Desde la emergencia de nuevos valores, su gran preocupación estriba en asegurar la igualdad real del hombre y de la mujer en el seno de la pareja así como la de los hijos legítimos y de los hijos naturales. De ahora en adelante, la autoridad es compartida y la noción de cabeza de familia ha desaparecido. El divorcio se ha vuelto más fácil, lo que, con toda evidencia, correspondía a la evolución de las costumbres que aquél ha precipitado.<br />Por último, algunos estados europeos tratan de dar una estatuto a los concubinos otorgándoles los mismos derechos materiales y sociales que a las personas casadas sin astringirles a los mismos deberes (ayuda, fidelidad). Particularmente típica es a este respecto la reivindicación de un reconocimiento de los “matrimonios homosexuales” con eventual posibilidad de adoptar hijos. En Dinamarca, fueron autorizados en octubre de 1989. En otros países (Países Bajos, Suecia, Noruega, Francia, República Checa) tienden a seguir esta tendencia. Por poco que esta evolución jurídica se acompañe de ventajas fiscales y sociales para los concubinos – presuntamente necesitados de protección – la institución del matrimonio queda seriamente dañada y, por repercusión, lo está también la natalidad ya que las uniones de hecho son menos fecundas que las uniones legítimas.<br />En el ámbito fiscal es donde, sobre todo, la spolíticas gubernamentales perjudican la nupcialidad y la fecundidad. Por regla general, los impuestos indirectos, aquellos que pesan sobre el consumo, son desfavorables a las familias numerosas como también lo es la tasación de las viviendas cuando se basa en las superficies ocupadas. En cuanto a la fiscalidad directa, aquella que pesa sobre el capital y los ingresos, tiene efectos contradictorios en función de la elección de la unidad impositiva y del cálculo de las exoneraciones de base: en principio, es más ventajoso para una pareja ser gravada de manera conjunta que por separado pero a condición de que su límite impositivo sea netamente más elevado que el del contribuyente aislado. En Francia, por ejemplo, el límite máximo de la ventaja fiscal de la que, hasta 1996, se beneficiaban los concubinos con hijos ha bastado para hacer progresar en 30.000 el número anual de matrimonios. En cuanto a la política social y más particularmente a la política de la vivienda, tiene efectos no despreciables sobre la constitución y dimensión de la familia: vivienda pequeña, familia pequeña. Por regla general, la política familiar que era prioritaria en los años de la posguerra y ello no sin segundas intenciones fatalistas al menos en Francia, se ha transmutado progresivamente a partir de 1970 en política social de redistribucción de los ingresos: el afán de “compensación horizontal” (entre familias en función de su tamaño) ha cedido el paso al de “compensación vertical” (en función de los ingresos). En Francia, por ejemplo, ya sólo se conceden la mayoría de las prestaciones por falta probada de recursos; y algunas primas – particularmente el subsidio de padre o madre aislados – destinadas en principio a las personas desamparadas se han convertido en unas prestaciones de conveniencia que tienen efectos perversoso sobre la nupcialidad (E. Sullerot, 1994).<br />Por último, el envejecimiento de las poblaciones europeas que conlleva el del cuerpor electoral ha tenido el ineludible efecto de dar prioridad a la tercera edad en la spreocupaciones gubernamentales en detrimento de los jóvenes adultos, cuya entrada en la vida activa no es facilitada ni mucho menos. En Francia, por ejemplo, donde los jubilados, que sólo contribuyen en un 10% al presupuesto de sanidad, absorben un 50%.<br />Se puede generalizar estos desarrollos sobre las cripto-políticas evocando las nocones de “entorno social” (J.D. Lecaillon, 1992) y de “señal política”: la percepción por familias de las buenas o malas disposiciones del gobierno hacia ellas tiene efectos psicológicos que probablemente superan los efectos materiales de las medidas adoptadas. Y esto vale para el conjunto de las políticas de población.Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-5319602839247410802009-12-02T20:30:00.000-08:002009-12-02T20:33:24.708-08:009. La eugenesia<em><span style="color:#660000;">«La eugenesia es la auto-dirección la evolución humana»: Lema del Segundo Congreso Internacional de Eugenesia, 1921, representado como un árbol que unifica una diversidad de campos diferentes.</span></em><br /><em><span style="color:#660000;"></span></em><br />La eugenesia es una filosofía social que defiende la mejora de los rasgos hereditarios humanos mediante varias formas de intervención. Las metas perseguidas han variado entre la creación de personas más sanas e inteligentes, el ahorro de los recursos de la sociedad y el alivio del sufrimiento humano. Los medios antiguamente propuestos para alcanzar estos objetivos se centraban en la selección artificial, mientras los modernos se centran en el diagnóstico prenatal y la exploración fetal, la orientación genética, el control de natalidad, la fecundación in vitro y la ingeniería genética. Su oponentes arguyen que la eugenesia es inmoral y está fundamentada en o es en sí misma una pseudociencia. Históricamente, la eugenesia ha sido usada como justificación para las discriminaciones coercitivas y las violaciones de los derechos humanos promovidas por el estado, como la esterilización forzosa de personas con defectos genéticos, el asesinato institucional y, en algunos casos, el genocidio de razas consideradas inferiores.<br />La selección artificial de seres humanos fue sugerida desde muy antiguo, al menos desde Platón, pero su versión moderna fue formulada por vez primera por Sir Francis Galton en 1865, recurriendo al reciente trabajo de su primo Charles Darwin. Desde sus inicios, la eugenesia (término derivado del griego ‘bien nacido’ o ‘buena reproducción’) fue apoyada por destacados pensadores, incluyendo a Alexander Graham Bell, George Bernard Shaw y Winston Churchill. La eugenesia fue una disciplina académica en muchos institutos y universidades. Su reputación científica se vino abajo en los años 1930, época en la que Ernst Rüdin empezó a incorporar la retórica eugenésica a las políticas raciales de la Alemania nazi. Durante el periodo de posguerra, gran parte tanto del público como de la comunidad científica asociaba la eugenesia con los abusos nazis, que incluyeron la «higiene racial» y la exterminación, si bien varios gobiernos regionales y nacionales mantuvieron programas eugenésicos hasta los años 70.<br /><br /><strong><span style="color:#660000;">1. Significados de la eugenesia</span></strong><br /><br />La eugenesia, desde su mismo principio, significó muchas cosas diferentes para muchas personas diferentes. Históricamente, el término ha sido usado para cubrir cualquier cosa comprendida entre el cuidado prenatal de las madres hasta la esterilización forzada y la eutanasia. En el pasado tuvieron lugar muchos debates, algunos de los cuales continúan en la actualidad, sobre qué se considera exactamente parte de la eugenesia.<br />El término eugenesia se usa a menudo para referirse a los movimientos y políticas sociales que tuvieron influencia a principios del siglo XX. En un amplio sentido histórico, la eugenesia también puede ser el estudio de la «mejora de la cualidades genéticas humanas». Algunas veces se aplica para describir en términos generales cualquier acción humana cuya finalidad sea mejorar el acervo genético. Algunas formas de infanticidio en las sociedades antiguas, la actual reprogenética, los abortos preventivos y los bebés de diseño han sido llamados (a veces controvertidamente) eugenesia.<br />Debido a sus finalidades normativas y a su relación histórica con el racismo científico, así como al desarrollo de la ciencia de la genética, la comunidad científica internacional se ha desvinculado casi totalmente del término eugenesia, calificándola a veces de pseudociencia, si bien pueden encontrarse defensores de lo que se conoce como eugenesia liberal. Las investigaciones modernas sobre los potenciales usos de la ingeniería genética ha llevado a una cada vez mayor invocación de la historia de la eugenesia en discusiones sobre bioética, la mayoría de las veces de forma cautelar. Algunos bioéticos sugieren que incluso los programas de eugenesia no coactiva serían inherentemente poco éticos, si bien este punto de vista ha sido cuestionado por pensadores tales como Nicholas Agar.<br />Los eugenesistas defienden políticas específicas que (de tener éxito) llevarían a una mejora observable del acervo genético humano. Puesto que el definir qué mejoras son deseables o beneficiosas es percibido como una elección cultural más que un asunto que pueda determinarse objetivamente (es decir, por investigaciones empíricas y científicas), la eugenesia ha sido considerada a menudo una pseudociencia. El aspecto más discutido de la eugenesia ha sido la definición de «mejora» del acervo genético humano, como qué es una característica beneficiosa y qué es un defecto. Este aspecto de la eugenesia ha sido históricamente contaminado con racismo científico.<br />Los primeros eugenesistas estaban más preocupados con los factores observables de la inteligencia que a menudo se correlacionan fuertemente con la clase social. Muchos eugenesistas se inspiraron en la cría selectiva de animales (donde se suele trabajar para lograr pura razas) como analogía para la mejora de la sociedad humana. La mezcla de razas (o miscegenación) solía ser considerada como algo a evitar en nombre de la pureza racial. En aquella época este concepto parecía tener cierto respaldo científico, y siguió siendo un asunto beligerante hasta que el desarrollo avanzado de la genética llevó al consenso científico de que la división de especies humanas en razas desiguales es injustificable. Algunos ven esto como un consenso ideológico, dado que la igualdad, lo mismo que la desigualdad, es una elección cultural más que un asunto que pueda ser determinado objetivamente.<br />La eugenesia también se ha preocupado por la eliminación de enfermedades hereditarias tales como la hemofilia y la enfermedad de Huntington. Sin embargo, hay varios problemas en calificar ciertos factores como «defectos genéticos»:<br />• En muchos casos no hay consenso científico sobre lo que es un «defecto genético». A menudo se argumenta que es más un asunto de elección social o individual.<br />• Lo que parece ser un «defecto genético» en un contexto o entorno puede no serlo en otro. Este puede ser el caso de los genes con una ventaja heterocigota, como la anemia falciforme y la enfermedad de Tay-Sachs, que en su forma heterocigota pueden ofrecer una ventaja contra, respectivamente, la malaria y la tuberculosis.<br />• Muchas personas minusválidas o inválidas pueden tener éxito en la vida.<br />• Muchas de las enfermedades que los primeros eugenesistas identificaron como hereditarias (por ejemplo la pelagra) se consideran actualmente imputables completa o al menos parcialmente a las condiciones medioambientales.<br />Parecidas preocupaciones han surgido cuando el diagnóstico prenatal de una enfermedad congénita lleva al aborto (véase también diagnóstico genético preimplantacional).<br />Las políticas eugenésicas han sido clasificadas conceptualmente en dos categorías: eugenesia positiva, que fomenta la mayor reproducción de los designados «más aptos», y la eugenesia negativa, que desaconseja o impide la reproducción de los designados «menos aptos». La eugenesia negativa no necesita ser coactiva: un estado podría ofrecer recompensas económicas a ciertas personas que se sometan a la esterilización, si bien algunos críticos podrían responder que este incentivo, junto con la presión social, podría percibirse como coacción. La eugenesia positiva también puede ser coactiva: el aborto en mujeres «aptas» era ilegal en la Alemania nazi.<br />Durante el siglo XX, muchos países promulgaron políticas y programas eugenésicos, incluyendo:<br />• Promoción de tasas de natalidad diferenciales<br />• Esterilización obligatoria<br />• Abortos forzosos<br />• Restricción del matrimonio<br />• Exploración genética<br />• Control de natalidad<br />• Control de la inmigración<br />• Segregación (tanto racial como de los enfermos mentales)<br />• Genocidio<br />La mayoría de estas políticas fueron posteriormente consideradas coactivas, restrictivas o genocidas, y actualmente son pocas las jurisdicciones que incluyen políticas explícitamente clasificadas de eugenésicas o inequívocamente eugenésicas en esencia. Sin embargo, algunas organizaciones privadas ayudan a la gente con servicios de orientación genética, y la reprogenética puede ser considerada una forma de eugenesia «liberal» no patrocinada por el estado.<br /><br /><strong><span style="color:#660000;">2. Historia</span><br /><br />Teoría de Galton</strong><br /><br />La selección artificial de seres humanos fue sugerida desde muy antiguo, al menos desde Platón, quien creía que la reproducción humana debía ser controlada por el gobierno. Platón registró estos puntos de vista en La República: «que los mejores cohabiten con las mejores tantas veces como sea posible y los peores con las peores al contrario». Platón proponía que el proceso se ocultase al público mediante una especie de lotería. Otros ejemplos antiguos incluyen la supuesta práctica de las polis de Esparta de abandonar a los bebés débiles fuera de los límites de la ciudad para que murieran. Sin embargo, dejaban a todos los bebés fuera durante un periodo de tiempo, considerándose más fuertes a los supervivientes, mientras muchos bebés supuestamente más débiles fallecían.<br />Durante los años 1860 y 1870, Sir Francis Galton sistematizó estas ideas y costumbres de acuerdo al nuevo conocimiento sobre la evolución del hombre y los animales provisto por la teoría de su primo Charles Darwin. Tras leer El origen de las especies de éste, Galton observó una interpretación de la obra de Darwin a través de la cual los mecanismos de la selección natural eran potencialmente frustrados por la civilización humana. Galton razonó que, dado que muchas sociedades humanas buscaban proteger a los desfavorecidos y los débiles, dichas sociedades estaban reñidas con la selección natural responsable de la extinción de los más débiles. Sólo cambiando estas políticas sociales, pensó Galton, podría la sociedad ser salvada de una «reversión hacia la mediocridad», un frase que acuñó primero en estadística y que más tarde cambio a la hoy frecuente «regresión hacia la media».<br />Galton esbozó por vez primera su teoría en el artículo de 1865 «Talento y personalidad hereditarios» (Hereditary Talent and Character), explicándola luego más detalladamente en su libro de 1869 El genio hereditario. Galton comenzó estudiando la forma en la que los ragos humanos intelectuales, morales y de personalidad tendían a presentarse en las familias. Su argumento básico era que el «genio» y el «talento» eran rasgos hereditarios en los humanos (aunque ni él ni Darwin tenían aún un modelo de trabajo para este tipo de herencia). Galton concluyó que, puesto que puede usarse la selección artificial para exagerar rasgos en otros animales, podían esperarse resultados similares al aplicar estas prácticas en humnanos. Como escribió en la introducción de El genio hereditario:<br />Me propongo mostrar en este libro que las habilidades naturales del hombre se derivan de la herencia, bajo exactamente las mismas limitaciones en que lo son las características físicas de todo el mundo orgánico. Consecuentemente, como es fácil a pesar de estas limitaciones lograr mediante la cuidadosa selección una raza permanente de perros o caballos dotada de especiales facultades para correr o hacer cualquier otra cosa, de la misma forma sería bastante factible producir una raza de hombre altamente dotada mediante matrimonios sensatos durante varias generaciones consecutivas. — Galton, El genio hereditario, 1<br />Según Galton, la sociedad ya fomentaba las enfermedades disgenéticas, afirmando que los menos inteligentes se reproducían más que los más inteligentes. Galton no propuso sistema de selección alguno, sino que esperaba que se hallaría una solución cambiando las buenas costumbres sociales de forma que animasen a la gente a ver la importancia de la reproducción.<br />Galton usó por primera vez la palabra eugenesia en su libro de 1883 Investigaciones sobre las facultades humanas y su desarrollo (Inquiries into Human Faculty and Its Development), en el que quiso «mencionar los diversos tópicos más o menos relacionados con el cultivo de la raza o, como podríamos llamarlo, con las cuestiones “eugenésicas”». Incluyó una nota a pie para la palabra que rezaba:<br />Esto es, con cuestiones relacionadas con lo que se denomina en griego eugenia, a saber, de buen linaje, dotado hereditariamente de cualidades nobles. Esta y las palabras relacionadas (eugénico, etcétera) son igualmente aplicables a hombres, bestias y plantas. Deseamos enormemente un palabra breve para aludir a la ciencia de la mejora del linaje, que en modo alguno se limita a las cuestiones de emparejamientos sensatos, sino que, especialmente en el caso del hombre, toma conciencia de todas las influencias que tienden a dar aunque sea en remoto grado a las razas o variedades más aptas una mejor oportunidad de prevalecer más rápidamente sobre los menos aptos de lo que de otra forma habría hecho. La palabra eugenesia expresaría suficientemente esta idea, siendo como mínimo una palabra más efectiva que viricultura, que una vez me aventuré a usar. — Francis Galton, Inquiries into human faculty and its development (Londres, Macmillan, 1883), pág. 17, nota 1<br />En 1904 Galton aclaró su definición de eugenesia como «la ciencia que trata sobre todas las influencias que mejoran las cualidades innatas de una raza, y también con aquellas que las desarrollan hasta la mayor ventaja.»<br />La formulación de Galton de la eugenesia estaba basada en un fuerte enfoque estadístico, fuertemente influenciado por la «física social» de Adolphe Quetelet. Sin embargo, a diferencia de éste Galton no exaltaba al «hombre medio» sino que lo despreciaba por mediocre. Galton y su heredero estadístico Karl Pearson desarrollaron lo que se llamó el enfoque biométrico de la eugenesia, que desarrolló nuevos y complejos modelos estadísticos (más tarde exportados a campos completamente diferentes) para describir la herencia de los rasgos. Sin embargo, con el redescubrimiento de las leyes de la herencia de Gregor Mendel, surgieron dos bandos separados de defensores de la eugenesia. Uno estaba formado por estadísticos y otro por biólogos. Los primeros creían que los segundos tenían modelos matemáticos excepcionalmente primitivos, mientras los biólogos creían que los estadísticos sabían poco sobre biología.<br />La eugenesia terminó aludiendo a la reproducción humana selectiva como intento de obtener niños con rasgos deseables, generalmente mediante el enfoque de influir sobre las tasas de natalidad diferenciales. Estas políticas se clasificaban en su mayoría en dos categorías: eugenesia positiva, la mayor reproducción de los que se consideraba que contaban con rasgos hereditarios ventajosos, y la eugenesia negativa, la disuasión de la reproducción de los que tenían rasgos hereditarios considerados malos. En el pasado, las políticas eugenésicas negativas han ido de intentos de segregación a esterilizaciones e incluso genocidio. Las políticas eugenésicas positivas han tomado típicamente la forma de premios o bonificaciones para los padres «aptos» que tenían otro hijo. Prácticas relativamente inocuas como la orientación matrimonial tenían vínculos primitivos con la ideología eugenésica.<br />La eugenesia era diferente de lo que más tarde se conocería como darwinismo social. Aunque ambos sostenían que la inteligencia era hereditaria, la eugenesia afirmaba que eran necesarias nuevas políticas para cambiar activamente el statu quo hacia un estado más «eugenésico», mientras los darwinistas argumentaban que la propia sociedad «advertiría» naturalmente el problema de la «disgenesia» si no se ponían en práctica políticas de bienestar social (por ejemplo, los pobres podrían reproducirse más pero tendrían tasas de mortalidad más elevada).<br /><br /><strong>La eugenesia y el estado (1890-1945)</strong><br /><br />Uno de los primeros defensores modernos de las ideas eugenésicas (antes de que fueran clasificadas como tales) fue Alexander Graham Bell. En 1881 Bell investigó la tasa de sordera en Martha's Vineyard, Massachusetts. De esto concluyó que la sordera era de naturaleza hereditaria y recomendó la prohibición del matrimonio con sordos («Memoria sobre la formación de un tipo de sordera en la raza humana») incluso a pesar de que él mismo estaba casado con una sorda. Como muchos otros de los primitivos eugenesistas, propuso controlar la inmigración con fines eugenésicos y advirtió que los colegios internos para sordos podrían considerarse posiblemente como lugares de cría de una raza humana sorda.<br />Aunque la eugenesia es hoy relacionada a menudo con el racismo, no siempre fue así: tanto W.E.B. DuBois como Marcus Garvey apoyaron la eugenesia o ideas similares como forma de reducir el sufrimiento de los afroamericanos y mejorar su estatura. Muchos métodos legales de eugenesia incluyeron leyes estatales contra la miscegenación o la prohibición de los matrimonios interraciales. La Corte Suprema de los Estados Unidos derogó estas leyes estatales en 1967 y declaró inconstitucionales las leyes antimiscegenación.<br />La Alemania nazi de Adolf Hitler fue famosa por los programas eugenésicos que intentaban mantener una raza alemana «pura» mediante una serie de medidas recogidas bajo la llamada «higiene racial». Entre otras actividades, los nazis realizaron extensivos experimentos en seres humanos vivos para comprobar sus teorías genéticas, yendo desde la simple medida de las características físicas a los horrendos experimentos efectuados por Josef Mengele y Otmar von Verschuer con gemelos en los campos de concentración. Durante los años 1930 y 1940, el régimen nazi esterilizó forzosamente a cientos de miles de personas a los que consideraba mental y físicamente «no aptos» (se estima que unas 400.000 entre 1934 y 1937). La escala del programa nazi provocó que los defensores estadounidenses de la eugenesia buscasen una ampliación del suyo, con alguna queja sobre que «los alemanes nos están ganando en nuestro propio juego». Los nazis fueron incluso más allá, matando decenas de miles de inválidos oficiales mediante programas obligatorios de «eutanasia».<br />También implantaron varias políticas eugenésicas positivas, otorgando premios a las mujeres arias que tenían un gran número de hijos y promoviendo un servicio en el que mujeres solteras «racialmente puras» eran fecundadas por oficiales de las SS (Lebensborn). Muchas de sus preocupaciones sobre la eugenesia y la higiene racial estuvieron también presentes en su exterminio sistemático de millones de personas «indeseables», incluyendo judíos, gitanos, testigos de Jehová y homosexuales durante el Holocausto (buena parte del equipo y los métodos de exterminio usados en los campos fueron desarrollados inicialmente en un programa de eutanasia). El alcance y la coacción de los programas eugenésicos alemanes, junto con el fuerte uso de la retórica eugenésica y la llamada «ciencia racial» durante todo el régimen, crearon una indeleble asociación cultural entre la eugenesia y el Tercer Reich en los años de posguerra.<br />El segundo mayor movimiento eugenésico se dio en los Estados Unidos. Comenzando con Connecticut en 1896, muchos estados aprobaron leyes sobre el matrimonio con criterios eugenésicos, prohibiendo casarse a cualquiera que fuese «epiléptico, imbécil o débil mental». En 1898 Charles B. Davenport, un prominente biólogo estadounidense, comenzó como director de una estación de investigación biológica situada en Cold Spring Harbor unos experimentos sobre la evolución de plantas y animales. En 1904, Davenport recibió fondos del Instituto Carnegie para fundar la Estación de Evolución Experimental. La Eugenics Record Office (’Oficina de Registro de Eugenesia’) abrió en 1910 mientras Davenport y Harry H. Laughlin empezaban a promocionar la eugenesia. <br />Durante el siglo XX, los investigadores se vieron intrigados por la idea de que las enfermedades mentales podían transmitirse dentro de las familias y llevaron a cabo varios estudios para documentar la heredabilidad de enfermedades tales como la esquizofrenia, el trastorno bipolar y la depresión. Desafortunadamente estos intereses terminaron asociados con el movimiento eugenesista. A finales del siglo XIX y principios del XX se promulgaron leyes estatales para prohibir el matrimonio y forzar la esterilización de los enfermos mentales con el fin de evitar la «transmisión» de las enfermedades mentales a la siguiente generación. Estas leyes fueron ratificadas por la Corte Suprema de los Estados Unidos en 1927 y no fueron abolidas hasta mediados de siglo. Para 1945 unos 45.000 enfermos mentales habían sido esterilizados forzosamente.<br />En los años siguientes, la Eugenics Record Office reunió una enorme colección de árboles genealógicos y concluyó que quienes eran no aptos procedían de entornos económica y socialmente pobres. Eugenesistas tales como Davenport, el psicólogo Henry H. Goddard y el conservacionista Madison Grant (todos muy respetados en su época) empezaron a presionar para lograr diversas soluciones políticas al problemas de los «no aptos». (Davenport abogaba por la restricción de la inmigración y la esterilización como métodos principales, Goddard recomendaba la segregación en su libro La familia Kallikak, y Grant era partidario de todo lo anterior y más, abrigando incluso la idea del exterminio.) Aunque su metodología y métodos de investigación se consideran actualmente muy defectuosos, en la época se consideró una investigación científica legítima. Tuvo sin embargo detractores científicos (notablemente Thomas Hunt Morgan, uno de los pocos mendelistas en criticar explícitamente la eugenesia), si bien la mayoría de ellos se centraron más en la primitiva metodología de los eugenesistas y en la consideración de casi cualquier característica humana como hereditaria, que en la idea de la eugenesia en sí.<br />La idea del «genio» y el «talento» fue también considerada por William Graham Sumner, un fundador de la American Sociological Society (actual American Sociological Association), quien mantenía que si el gobierno no interfería en la política social de laissez faire, surgiría una clase de genios en la cima del sistema de estratificación social, seguida de una clase de talentos. La mayor parte del resto de la sociedad caería en la clase de los mediocres. Aquellos que eran considerados anormales (retrasados mentales, minusválidos, etcétera) tenían un efecto negativo sobre el proceso social al consumir recursos necesarios. Deberían ser dejados solos para que se valiesen por sí mismo. Pero los de la clase de delincuentes (criminales, pervertidos, etcétera) deberían ser eliminados de la sociedad.<br />Con la aprobación de la ley de inmigración Johnson-Reed, los eugenesistas jugaron por vez primera un papel protagonista en el debate del Congreso como expertos asesores sobre la amenaza de «linajes inferiores» procedentes del este y el sur de Europa. Esto redujo el número de inmigrantes del extranjero al 15% de años anteriores, al controlar el número de individuos «no aptos» que entraban al país. La nueva ley reforzó las anteriores que prohibían la mezcla racial en un intento por conservar el acervo genético. Las consideraciones eugenésicas también estuvieron tras la aprobación de leyes sobre el incesto en buena parte de los Estados Unidos y fueron usadas para justificar muchas leyes antimiscegenación.<br />Algunos estados esterilizaron a los «imbéciles» durante buena parte del siglo XX. La Corte Suprema de los Estados Unidos sentenció en el caso Buck contra Bell de 1927 que el estado de Virginia podía esterilizar a los considerados no aptos. La época más importante de esterilización eugenésica fue entre 1927 y 1963, cuando unas 64.000 personas fueron esterilizadas forzosamente bajo las leyes eugenésicas de los Estados Unidos. Un informe favorable sobre los resultados de la esterilización en California, con mucho el estado que más esterilizaciones realizó, fue publicado con formato de libro por el biólogo Paul Popenoe y sería ampliamente citado por el gobierno nazi como evidencia de que los programas masivos de esterilizaciones eran factibles y humanos. Cuando los dirigentes nazis fueron juzgados por crímenes de guerra en Núremberg tras la Segunda Guerra Mundial, justificaron las esterilizaciones masivas (unas 450.000 en menos de una década) citando a los Estados Unidos como sus inspiradores.<br /><br /><strong>Otros países</strong><br /><br />Muchos países occidentales adoptaron algunas leyes eugenésicas. En julio de 1933 Alemania aprobó una ley que permitía la esterilización involuntaria de «borrachos, criminales sexuales y lunáticos hereditarios e incurables, y de aquellos que padezcan una enfermedad incurable que pudiera transmitirse a su descendencia». Canadá llevó a cabo miles de esterilizaciones forzosas hasta los años 1970. Muchos First Nations (nativos canadienses), así como inmigrantes del este de Europa, fueron objeto de este programa que identificaba como genéticamente inferiores a las minorías raciales y étnicas. Suecia esterilizó por la fuerza a 62.000 personas, principalmente enfermos mentales en las últimas décadas, pero también minorías étnicas y raciales al principio, como parte de un programa eugenésico que duró 40 años. Como fue el caso de otros programas, se creía que la etnia y la raza tenían relación con la salud mental y física. Aunque el programa no era del agrado de muchos suecos, los políticos normalmente lo apoyaban, más como un medio de mejorar la salud social que como la medida de proteccionismo racial que en realidad era. (El gobierno sueco ha indemnizado posteriormente a los afectados.) Aparte de los programas a gran escala de los Estados Unidos, otros países como Australia, el Reino Unido, Noruega, Francia, Finlandia, Dinamarca, Estonia, Islandia y Suiza llevaron a cabo programas de esterilización de personas declaradas deficientes mentales por el estado. Singapur practicó una forma limitada de eugenesia positiva que incluía la promoción del matrimonio entre graduados universitarios con la esperanza de que engendrarían mejores hijos.[20]<br />Varios autores, notablemente Stephen Jay Gould, han afirmado repetidamente que las restricciones sobre la inmigración aprobadas en los Estados Unidos durante los años 1920 (y derogadas en 1965) estuvieron motivadas por las metas de la eugenesia, en particular por el deseo de excluir a las razas consideradas inferiores del acervo genético nacional. Durante el comienzo del siglo XX, los Estados Unidos y Canadá empezaron a recibir un número muy superior de inmigrantes del sur y el este de Europa. Eugenecistas influyentes como Lothrop Stoddard y Harry Laughlin (quien fue designado como testigo experto por el Comité del Congreso para Inmigración y Naturalización en 1920) presentaban el argumento de que estas eran razas inferiores que contaminarían el acervo genético nacional si su número no se restringía. Se ha argumentado que esto movió a Canadá y los Estados Unidos a aprobar leyes que creaban una jerarquía de nacionalidades, clasificándolas desde los más deseables anglosajones y nórdicos hasta los inmigrantes chinos y japoneses, que a quienes casi se prohibió completamente entrar al país.[21] Sin embargo, varias personas, incluyendo a Franz Samelson, Mark Snyderman y Richard Herrnstein, han argumentado que, basándose en el examen de los registros de los debates del Congreso sobre política de inmigración, no se dio virtualmente consideración alguna a estos factores. Según estos autores, las restricciones fueron primordialmente motivadas por el deseo de mantener la integridad cultural del país frente al fuerte influjo de los extranjeros. Esta interpretación, sin embargo, no es aceptada por la mayoría de los historiadores de la eugenesia.<br />Algunos de los que no están de acuerdo con la idea de la eugenesia en general sostienen que a pesar de ello la legislación eugenésica tuvo beneficios. Margaret Sanger (fundadora de Planned Parenthood of America) halló que era una herramienta útil para impulsar la legalización de los métodos anticonceptivos. En su tiempo la eugenesia era vista por muchos como científica y progresista, como aplicación natural del conocimiento sobre reproducción al campo de la vida humana. Antes de los campos de exterminio de la Segunda Guerra Mundial, la idea de que la eugenesia pudiera llevar al genocidio no era considerada seriamente.<br /><br /><strong>Estigmatización de la eugenesia en los años siguientes al nazismo</strong><br /><br />En las décadas siguientes a la Segunda Guerra Mundial, la eugnesia se hizo cada vez más impopular para la ciencia académica. Muchas organizaciones y publicaciones que tuvieron su origen en el movimiento eugenésico empezaron a distanciarse de dicha filosofía, como cuando Eugenics Quarterly se convirtió en Social Biology en 1969.<br />Tras la experiencia de la Alemania nazi, políticos y miembros de la comunidad científica renegaron públicamente de muchas de las ideas sobre la «higiene racial» y los miembros «no aptos» de la sociedad. Los Juicios de Nuremberg contra antiguos dirigentes nazis revelaron al mundo muchas de las prácticas genocidas del régimen y llevaron a la formalización de políticas de ética médica y la declaración sobre las razas de la UNESCO en 1950. Muchas sociedades científicas publicaron sus propias «declaraciones raciales» parecidas con los años, y la Declaración Universal de los Derechos Humanos, desarrollada en respuesta a los abusos cometidos en la Segunda Guerra Mundial, fue adoptada por la ONU, afirma en su Artículo 16 que «Los hombres y las mujeres, a partir de la edad núbil, tienen derecho, sin restricción alguna por motivos de raza, nacionalidad o religión, a casarse y fundar una familia»[23]. A continuación, la declaración de la UNESCO en 1978 sobre la raza y los prejuicios raciales declara que la igualdad fundamental de todos los seres humanos es el ideal hacia el que deberían converger la ética y la ciencia.<br />Como reacción a los abusos nazis, la eugenesia pasó a ser casi universalmente vilipendiada en muchas de las naciones en las que había sido una vez popular (sin embargo, los programas eugenésicos, inluyendo la esterilización, continuaron discretamente durante décadas). Muchos eugenesistas dedicados antes de la guerra a lo que más tarde sería calificado como «criptoeugenesia» enterraron decididamente sus creencias eugenésicas y se convirtieron en respetados antropólogos, biólogos y genetistas en la posguerra (incluyendo a Robert Yerkes en los Estados Unidos y Otmar von Verschuer en Alemania). El eugenesista californiano Paul Popenoe fundó la orientación familiar durante los años 1950, un cambio de profesión que surgió de sus intereses eugenésicos por promover los «matrimonios saludables» entre personas «aptas».<br />Los libros de texto de educación secundaria y universitaria solían tener entre 1920 y 1940 capítulos sobre el progreso científico que supondría la aplicación de principios eugenésicos sobre la población. Muchas publicaciones científicas antiguas dedicadas a la genética eran editadas por eugenesistas e incluían artículos eugenésicos junto con estudios sobre la herencia en organismos no humanos. Después de que la eugenesia cayese en desgracia ante la comunidad científica, la mayor parte de las referencias a la eugenesia fueron eliminadas de los libros de texto y de las subsecuentes ediciones de las publicaciones importantes. Incluso cambiaron los nombres de algunas publicaciones para reflejar las nuevas actitudes. Por ejemplo, Eugenics Quarterly se convirtió en 1969 en Social Biology (la revista sigue existiendo, pero se parece poco a su predecesora). Entre los miembros notables de la American Eugenics Society (1922–94) durante la segunda mitad del siglo XX se incluyen Joseph Fletcher, creador de la ética situacional; el Dr. Clarence Gamble de la farmacéutica Procter & Gamble y Garrett Hardin, un defensor del control de natalidad y autor de La tragedia de los comunes.<br />A pesar del cambio de actitud de la posguerra sobre la eugenesia en los Estados Unidos y Europa, unos pocos países, notablemente Canadá y Suecia, mantuvieron programas eugenésicos a gran escala, incluyendo la esterilización forzosa de inviduos con taras mentales, así como otras prácticas, hasta los años 1970. En los Estados Unidos, las esterilizaciones se abolieron en los años 1960, a pesar de que el movimiento eugenésico había perdido la mayor parte de su popularidad y apoyo político a finales de los años 1930.<br /><br /><strong>Eugenesia moderna e ingeniería genética</strong><br /><br />Desde comienzos de los años 1980, cuando el conocimiento sobre la genética avanzó significativamente, la historia y conceptos eugenésicos han sido ampliamente discutidos. Esfuerzos como el Proyecto Genoma Humano han logrado que la modificación efectiva de la especie humana vuelva a parecer posible (como hizo la teoría original de la evolución de Darwin en los años 1860, junto con el redescubrimiento de las leyes de Mendel a principios del siglo XX). La diferencia a principios del siglo XXI fue la actitud cautelosa hacia la eugenesia, que se había convertido en una consigna a temer más que abrazar.<br />Sólo unos pocos investigadores científicos (como el controvertido psicólogo Richard Lynn) han pedido abiertamente la adopción de políticas eugenésicas usando tecnología moderna, pero representan una opinión minoritaria en los actuales círculos científicos y culturales. Un intento de implantación de una forma de eugenesia fue un «banco de esperma de genios» (1980-99) creado por Robert Klark Graham, del que fueron concebidos cerca de 230 niños (el donante más conocido fue el ganador del premio Nobel William Shockley). Sin embargo, en Estados Unidos y Europa estos intentos han sido frecuentemente criticados por tener el mismo espíritu racista y clasista que las iniciativas eugenésicas de los años 1930. En cualquier caso, los resultados han sido desiguales en el mejor de los casos.<br />Debido a su relación con la esterilización forzosa y los ideales raciales del Partido Nazi, la palabra «eugenesia» rara vez es usada por los defensores de tales programas.<br />Sólo unos pocos gobiernos tienen actualmente algo parecido a un programa eugenésico en el mundo. En 1994 China aprobó la Ley de Asistencia Sanitaria Maternal e Infantil, que incluía una exploración premarital obligatoria para «enfermedades genéticas de naturaleza grave» y «enfermedades mentales relevantes». A quienes diagnosticaban tales enfermedades se les obligaba a no casarse, a aceptar «medidas anticonceptivas a largo plazo» o a someterse a la esterilización.<br />Una política parecida de exploraciones (incluyendo la exploración prenatal y el aborto) destinada a reducir la incidencia de la talasemia existe en las dos partes de la isla de Chipre. Desde la implantación del programa en los años 1970, se ha reducido el porcentaje de niños nacidos con esta enfermedad sanguínea hereditaria de 1 de cada 158 a prácticamente cero. Dor Yeshorim, un programa que busca reducir la incidencia de la enfermedad de Tay-Sachs en ciertas comunidades judías, es otro programa de diagnóstico que ha atraído comparaciones con la eugenesia. En Israel, a costa del estado, se anima a la población en general a realizar pruebas genéticas para diagnosticar enfermedades antes del nacimiento de un bebé. Si se diagnostica la enfermedad de Tay-Sachs a un feto puede optarse por la interrupción del embarazo de forma voluntaria. La mayoría de las demás comunidades judías askenazíes también efectúan programas de diagnóstico debido a las altas tasas de incidencia de ciertas enfermedades hereditarias. En algunas comunidades judías, la antigua costumbre de la tercería (shidduch) se sigue practicando, y en un intento por evitar la tragedia de la muerte infantil que siempre resulta de ser homocigótico para la Tay-Sachs, asociaciones como la fuertemente religiosa Dor Yeshorim (que fue fundada por un rabí que perdió cuatro hijos por esta enfermedad para evitar que otros sufrieran la misma tragedia) realizan pruebas a las parejas jóvenes para comprobar si tienen riesgo de transmitir esta enfermedad o alguna otra mortal. Si ambos resultan ser portadores de Tay-Sachs, es frecuente que el compromiso se rompa. El Judaísmo, como muchas otras religiones, desaconseja el aborto salvo que haya riesgo para la madre, en cuyo caso la salud de ésta tiene preferencia. Debe también advertirse que, dado que todos los niños con la enfermedad morirán en su infancia, estos programas intentan evitar tales tragedias más que directamente erradicar el gen, lo que es una coincidencia secundaria.<br />En la literatura bioética moderna, la historia de la eugenesia presenta muchas cuestiones morales y éticas. Los comentaristas han sugerido que la «nueva eugenesia» surgirá de tecnologías reproductivas que permitirán a los padres crear los llamados «bebés de diseño» (lo que el biólogo Lee M. Silver denominó prominentemente «reprogenética»). Se ha argumentado que este tipo «no coactivo» de «mejora» biológica estará predominantemente motivada por la competitividad individual y el deseo de lograr «las mejores oportunidades» para los hijos más que por el impulso de mejorar la especie completa que caracterizó las formas de eugenesia de principios del siglo XX. Debido a esta naturaleza no coactiva, la falta de implicación del estado y las diferencias en las metas, algunos comentaristas han cuestionado que estas actividades sean eugenésicas o algo más en conjunto.<br />Algunos activistas prominusválidos argumentan que aunque sus discapacidades pueden provocarles dolor y malestar, lo que realmente les incapacita como miembros de la sociedad es un sistema sociocultural que no reconoce su derecho a un trato genuinamente igualitario. También se muestran escépticos sobre que alguna forma de eugenesia pudiera beneficiar a los discapacitados si se tiene en cuenta el trato que le dispensaron las campañas eugenésicas históricas.<br />James D. Watson, el primer director del Proyecto Genoma Humano, inició el Programa de Implicaciones Éticas, Legales y Sociales (Ethical, Legal and Social Implications Program), que ha financiado varios estudios sobre las implicaciones de la ingeniería genética humana (junto con un importante sitio web sobre la historia de la eugenesia), porque:<br />Al situar la ética tan pronto en la agenda del genoma, esta dando respuesta a mi propio temor personal de que demasiado pronto los críticos del Proyecto Genoma Humano señalarían que era un representante del Cold Spring Harbor Laboratory que una vez albergó a la controvertida Eugenics Record Office. Mi no formación de un programa ético sobre el genoma podría rápidamente ser usada como falsa evidencia de que era un eugenesista secreto, teniendo como propósito real a largo plazo la identificación inequívoca de los genes que llevan a la estratificación social y ocupaciones así como de los que justifican la discriminación racial. — James D. Watson, A passion for DNA: Genes, genomes, and society (Cold Spring Harbor, Nueva York: Cold Spring Harbor Laboratory Press, 2000): 202.<br />Distinguidos genetistas incluyendo a los ganadores del premio Nobel John Sulston («No creo que uno deba traer al mundo a un niño claramente minusválido») y Watson («Una vez que tienes una forma para mejorar a nuestro hijos, nadie puede detenerla» apoyan el diagnóstico genético. Qué ideas deberían ser descritas como «eugenésicas» sigue siendo un asunto polémico en círculos de investigadores y de opinión pública. Algunos observadores como Philip Kitcher han descrito el uso del diagnóstico genético por parte de los padres como la habilitación de una forma de eugenesia «voluntaria».<br />Algunas subculturas modernas defienden diferentes formas de eugenesia apoyada por clonación humana e ingeniería genética humana, algunas veces como parte de un nuevo culto (véase el movimiento raeliano, cosmoteísmo o prometeísmo). Estos grupos hablan también de «neo-eugenesia», «evolución consciente» o «libertad genética».<br />Los rasgos conductuales identificados también como potenciales objetivos de modificación mediante ingeniería genética humana incluyen la inteligencia, la depresión, la esquizofrenia, el alcoholismo, el comportamiento (u orientación) sexual y la delincuencia.<br />Más recientemente, en el Reino Unido podría decirse que el caso La Corona contra James Edward Whittaker-Williams sentó un precedente al prohibir el contacto sexual entre personas con «problemas de aprendizaje». El acusado, un hombre con problemas de aprendizaje, fue encarcelado por besar y abrazar a una mujer de la misma condición. Este fallo se basó en la Ley de Delitos Sexuales de 2003, que redefine los besos y abrazos como sexuales y afirma que las personas con problemas de aprendizaje son incapaces de dar su consentimiento independientemente de que el acto implique coacción o no. Los opositores a esta ley la han atacado por traer de vuelta la eugenesia por la puerta de atrás bajo el disfraz de la exigencia de «consentimiento».<br /><br /><strong>Críticas<br /><br />Enfermedades frente a rasgos<br /></strong><br />Mientras la ciencia de la genética ha provisto cada vez más medios para poder identificar y entender ciertas características y enfermedades, dada la complejidad de la genética humana, la cultura y la psicología, no hay en este momento medio alguno para determinar qué rasgos serían definitivamente deseables o indeseables. Las manipulaciones eugenésicas destinadas a reducir la propensión hacia la criminalidad y la violencia, por ejemplo, podrían resultar en que la población terminase siendo esclavizada por un agresor externo si pierde la capacidad de defenderse a sí misma. Por otra parte, las enfermedades genéticas como la hemocromatosis puede incrementar la vulnerabilidad ante algunas dolencias, provocar deformidades físicas y otras disfunciones. Las medidas eugenésicas contra muchas de estas enfermedades ya están siendo emprendidas en países de todo el mundo, mientras las medidas contra rasgos que afectan más sutilmente y se entienden peor, como la criminalidad, están relegadas al ámbito de la especulación y la ciencia ficción. Los efectos de las enfermedades son en esencia totalmente negativos y las sociedades de todas partes buscan reducir su incidencia por varios medios, algunos de los cuales son eugenésicos en todo salvo el nombre. Los otros rasgos que se discuten tienen efectos tanto positivos como negativos y generalmente no se controlan en la actualidad en ningún lugar. Además, los últimos estudios indican que la personalidad poco tiene que ver con los genes.<br /><br /><strong>Pendiente resbaladiza</strong><br /><br />Una crítica comúnmente avanzada a la eugenesia es que, como queda demostrado por su historia, inevitablemente lleva a medidas que resultan poco éticas (Lynn 2001). H. L. Kaye escribió que «la verdad obvia es que eugenesia ha sido desacreditada por los crímenes de Hitler» (Kaye 1989). R. L. Hayman argumentó que «el movimiento eugenésico es anacrónico, siendo reveladas sus implicaciones políticas por el Holocausto» (Hayman 1990).<br />Steven Pinker ha afirmado que es «una opinión ortodoxa entre los académicos de izquierda que los genes implican genocidio.» Ha respondido a esta «opinión ortodoxa» comparando la historia del marxismo, que tenía la posición opuesta a la del nazismo sobre los genes:<br />Pero el siglo XX sufrió dos ideologías que llevaron a genocidios. La otra, el marxismo, no tenía uso para la raza, no creía en los genes y negaba que la naturaleza humana fuese un concepto significativo. Claramente, no es un énfasis en los genes o la evolución lo que es peligroso. Lo es el deseo de rehacer la humanidad mediante métodos coactivos (eugenesia o ingeniería social) y la creencia de que la humanidad avanza gracias a una lucha en la que los grupos superiores (raza o clases) triunfan sobre los inferiores — Steve Sailer<br />Richard Lynn argumenta que cualquier filosofía social es susceptible de uso ético incorrecto. Aunque los principios cristianos han ayudado a la abolición de la esclavitud y la institución de programas de bienestar social, Lynn advierte que la iglesia cristiana también ha quemado a muchos disidentes y ha hecho la guerra contra los infieles, asesinando los cruzados cristianos a gran número de mujeres y niños. También argumenta que la respuesta apropiada es condenar estas muertes, pero creer que el cristianismo «inevitablemente lleva a la exterminación de aquellos que no aceptan su doctrina» carece de justificación (Lynn 2001).<br /><br /><strong>Diversidad genética</strong><br /><br />Las políticas eugenésicas también llevan a perder diversidad genética, en cuyo caso una mejora culturalmente aceptada del acervo genético puede, si bien no necesariamente, terminar en un desastre biológico debido a una mayor vulnerabilidad a las enfermedades, menor capacidad de adaptación a los cambios ambientales y otros factores tanto conocidos como desconocidos. Este tipo de argumento procedente del principio de precaución es a su vez ampliamente criticado. Un plan eugenésico a largo plazo es probable que lleve a su escenario parecido debido a que la eliminación de rasgos considerados indeseables reduciría la diversidad genética por definición.<br />Por el contrario, algunos estudios parecen mostrar que las tendencias disgenésicas llevan a una menor diversidad genética, una tendencia que en teoría podría ser contrarrestada con un programa eugenésico.<br />La posible eliminación del genotipo del autismo es un asunto político importante para el movimiento por los derechos de los autistas, que sostiene que el autismo es una forma de neurodiversidad. Muchos defensores de los derechos de los afectados por el síndrome de Down (trisomía del par 21) consideran esta enfermedad un tipo de neurodiversidad, a pesar de que los hombres afectados suelen ser estériles.<br /><br /><strong>Rasgos recesivos heterocigóticos</strong><br /><br />En algunos casos los esfuerzos por erradicar ciertas mutaciones de un único gen resultarían baldíos. En el caso de que la enfermedad en cuestión fuese un rasgo recesivo heterocigótico, el problema es que tras la eliminación del rasgo visible no deseado, quedarían aún tantos genes para la enfermedad en el genoma como los que fueron eliminados en virtud del principio de Hardy-Weinberg, que afirma que los genes de una población se definen como pp+2pq+qq en el punto de equilibrio. Mediante el diagnóstico genético sería posible detectar todos los rasgos recesivos heterocigóticos, pero supondría un coste enorme con la tecnología actual. Bajo circunstancias normales sólo es posible eliminar un alelo dominante del genoma. Los rasgos recesivos pueden ser reducidos drásticamente, pero nunca eliminados a menos que se conozca la composición genética completa de todos los miembros de la población, como se ha mencionado antes. Dado que sólo unos pocos rasgos indeseados, como la enfermedad de Huntington, son dominantes, el valor práctico de «eliminar» rasgos es bastante bajo.<br /><br /><strong>Contraargumentos<br /><br /></strong><strong>Disgenesia<br /></strong><br />Los defensores de la eugenesia a menudo se preocupan por el declive disgenésico de la inteligencia, que creen que llevará al colapso de la actual civilización y que también ha sido la causa del colapso de anteriores civilizaciones. Este declive haría que la eugenesia fuese un mal necesario, ya que el posible sufrimiento humano provocado por ella palidecería en comparación con dicha catástrofe.<br /><br />Beneficios<br />Pequeñas diferencias en el CI medio de todo el grupo podrían teóricamente tener grandes efectos sobre los resultados sociales. Herrnstein y Murray alteraron el CI medio (100) de la muestra del National Longitudinal Survey of Youth estadounidense borrando aleatoriamente a individuos con un CI inferior a 103 hasta que la media poblacional subió a 103. Este cálculo fue realizado dos veces y promediado para evitar errores de la selección aleatoria. El nuevo grupo con un CI medio de 103 resultó tener una tasa de pobreza un 25% menos que un grupo con un CI medio de 100. También se midieron correlaciones sustanciales parecidas en las tasas de fracaso escolar, criminalidad y otros indicadores.<br />Se sigue discutiendo sobre si un incremento global de la inteligencia realmente incrementa la salud nacional, pues el CI está parcialmente correlacionado con el estatus socioeconómico, que no cambiaría en absoluto.<br />De todas maneras, los últimos estudios indican una alta plasticidad del cerebro y por ende la variabilidad voluntaria del coeficiente intelectual.<br /><br /><strong>La eugenesia en la cultura popular</strong><br /><br />La eugenesia es un tema recurrente en la ciencia ficción (a menudo distópica). La novela Un mundo feliz de Aldous Huxley explora el tema en profundidad, al igual que la más reciente (y científicamente actualizada) película Gattaca, cuya trama gira en torno al diagnóstico genético. Boris Vian (bajo el pseudónimo Vernon Sullivan) adoptó un enfoque más alegre en su novela Que se mueran los feos.<br />Algunas de las novelas que tocan este tema son La puerta al país de las mujeres de Sheri S. Tepper y Esa horrible fortaleza de C. S. Lewis. Las Guerras Eugenésicas son una parte importante de la historia de fondo del universo de Star Trek (episodios Semilla espacial, Tierra fronteriza, Estación Fría 12, Los amplificados y la película La ira de Khan). La eugenesia es también una parte importante de la trama de la película de James Bond Moonraker (el personaje del villano Sir Hugo Drax fue basado en Adolf Hitler).<br />En la serie de novelas Dune de Frank Herbert los programas de reproducción selectiva constituyen un tema importante. Al comienzo de la serie, la orden religiosa Bene Gesserit manipula los patrones reproductivos durante muchas generaciones para crear al Kwisatz Haderach. En Dios Emperador de Dune, el emperador Leto II vuelve a manipular la reproducción humana para lograr sus propios fines. Los Bene Tleilax también emplearon la ingeniería genética para crear seres humanos con atributos genéticos concretos.<br />Tiende a haber una contracorriente eugenésica en el concepto de ciencia ficción del supersoldado. Varias representaciones de estos supersoldados suelen mostrarlos criados para el combate o seleccionados genéticamente para que tengan rasgos beneficiosos para el combate.<br />En las novelas Los hijos de Matusalén y Tiempo para amar de Robert A. Heinlein, se crea un gran fondo de inversiones para dar incentivos financieros a los matrimonios (las Familias Howard) entre personas cuyos padres y abuelos han sido longevos. El resultado es un subconjunto de la población de la Tierra que tiene una esperanza de vida significativamente mayor que la media. Los miembros de este grupo aparecen en muchas de las otras obras de este autor.<br />En el libro de Eoin Colfer The Supernaturalist, Ditto es un bebé Bartoli, nombre de un experimento fallido del famoso Dr. Bartoli, quien intentó crear una raza superior de humanos, pero terminó en desarrollo atrofiado, con mutaciones, incluyendo percepción extrasensorial e imposición de manos.<br />En la serie televisiva de ciencia ficción de Gene Roddenberry Andrómeda, toda la raza nietzscheana está fundada sobre los principios de la reproducción selectiva.<br />En la serie del Mundo Anillo, de Larry Niven, el personaje Teela Brown es un resultado de varias generaciones de ganadores de la «lotería de la procreación», un sistema que intenta animar a las personas ganadoras a procrear.<br />En la 2ª temporada de Dark Angel, el principal villano Ames White es miembro de una secta conocida como el «Cónclave», que ha infiltrado en varios niveles de la sociedad a una raza de superhumanos. Esta secta intenta exterminar a todos los transgénicos, incluyendo al protagonista Max Guevara, a quien ven como un ser genéticamente impuro por tener algún ADN animal mezclado con el ADN humano.Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-17724767594969798382009-12-02T20:20:00.000-08:002009-12-02T20:29:39.239-08:0010. La estrategia actual de dominación mundial<strong><span style="color:#660000;">1. ANTECEDENTES LEGALES Y JURISPRUDENCIALES ESTADOUNIDENSES.</span></strong><br /><br />En 1924, los Estados Unidos sancionaron, bajo la presidencia de Calvin Coolidge, la Inmigration Restriction Act, que considera racialmente inferiores a los polacos, negros, griegos, irlandeses, orientales, y a otros europeos del Sur y del Este. Y como racialmente superiores a los ingleses, alemanes, escoceses, daneses, suecos y a los franceses no católicos. Tal como su nombre lo indica, dicha ley se encaminó a preservar la mayoría de la población W.A.S.P. (White, Anglo-Saxon, Protestant) de los embates de la inmigración “no deseada”.<br />Paralelamente, el célebre Juez de la Corte Suprema Federal del mismo país, Oliver Wendell Holmes, en su voto al sentenciar el caso “ Buck vs. Bell” ( 274 US, 200-207, 1927) autorizando la esterilización eugenésica forzada de mujeres negras pobres, decía “...es importante para la salud del país tener ciudadanos sanos. Para fortalecer el Estado es necesario hacer estos pequeños sacrificios (...) No veo razón para atribuirle al hombre un significado distinto al de un babuino o un grano de arena...”<br /><br /><strong><span style="color:#660000;">2. ANTECEDENTES NACIONAL-SOCIALISTAS.</span></strong><br /><br />Inspirado en la doctrina estadounidense reseñada y en el pensamiento de Alfred Rosemberg, principal referente del mito racial sostenido por el nacional-socialismo y Ministro para los Territorios Ocupados del Este, el Dr. Wetzel desarrolló recomendaciones para aplicar en los territorios conquistados a la U.R.S.S. a partir de 1941. “Se debe inculcar en la población rusa por todos los medios de la propaganda, en particular la prensa, la radio, el cine, los volantes, folletos y conferencias, que un gran número de hijos no representa sino una carga pesada. Hay que insistir en los gastos que ocasionan los hijos, en las buenas cosas que podrían tenerse con el dinero que se gasta en ellos. Se podría asimismo aludir a los peligros que para la salud de la mujer representan los partos(...)Al mismo tiempo, se debe establecer una propaganda amplia y poderosa a favor de los productos anticonceptivos. Se debe crear una industria apropiada con este objeto. La ley no castigará ni la difusión, ni la venta de los productos anticonceptivos, ni tampoco el aborto. Habrá que facilitar la creación de instituciones especiales para el aborto, entrenar al respecto a parteras o enfermeras. La población acudirá con más frecuencia a los servicios de abortos si éstos se hacen con cuidado. Los médicos deben participar sin que esto atente contra su honor. La propaganda debe recomendar igualmente la esterilización voluntaria”<br /><br /><strong><span style="color:#660000;">3. ESTRATEGIA ACTUAL DE DOMINACIÓN GLOBAL.</span></strong><br /><br />3.1. En la inmediata posguerra (1945) el médico eugenesista norteamericano Guy Irving Burch, fundador de Population Reference Bureau publicó su trabajo <em>“ Rutas de Población para la Paz o la Guerra”</em> que presentó como guía para las negociaciones de paz de ese entonces. En el aconseja la esterilización obligatoria de todas las personas “biológicas o socialmente inadecuadas”, recomendando a los diplomáticos adoptar esas leyes para todas las naciones sin insistir sobre las mismas en los países derrotados, advirtiendo que, si no se promulgaban universalmente, la nueva paz sería tan transitoria como la obtenida en Tratado de Versalles, firmado al concluir la I Guerra Mundial (1918).<br /><br />3.2. El pensamiento anti-natalista tuvo otra gran expresión en 1968, cuando por iniciativa del economista e industrial italiano Aurelio Peccei, apoyado por el escocés Dr. Alexander King, fundaron en la capital italiana el Club de Roma, surgido de la reunión que mantuvieron unas sesenta personalidades de relieve internacional que representaban a la industria, la ciencia, la economía, la sociología y los gobiernos, para discutir libremente y sin formalidades sobre la situación presente (de ese entonces) y futura de la humanidad.<br />Como primera medida el Club encomendó a un grupo de científicos del Instituto de Tecnología de Massachussets (M.I..T.) bajo la dirección del Profesor Meadows, que estudiara la evolución probable de la situación del mundo, “prestando especial atención a los problemas que plantea una estrategia de transición entre el actual crecimiento en escala mundial y el equilibrio dinámico del globo”.<br />Sobre bases matemáticas y haciendo intervenir en los cálculos de proyecciones una serie de variables que influyen en el crecimiento, el grupo científico produjo su primer estudio que se publicó en 1972 bajo el ya mundialmente famoso título de “Los límites del Crecimiento” (The limits to grouth, Fondo de Cultura Económica, México, 1973).<br />Los fenómenos elegidos por los científicos del M.I.T (Meadows, Donella; Meadows Dennis, Randers, J; Behrens W.W.) fueron los siguientes: 1) Población en continuo aumento; 2) Posibilidad de abastecer dicha población con la producción agrícola e industrial; 3) Contaminación producida por las actividades anteriores; 4) Consumo de recursos naturales exigido por el crecimiento.<br />Las conclusiones de dicho Estudio, según la propia expresión del Dr. Peccei expresan: “Si las tendencias actuales continúan, el crecimiento en progresión geométrica de la producción, del consumo, de la contaminación y del agotamiento de las materias primas en el mundo, nos conducirá a una situación totalmente insostenible, caracterizada por la saturación humana del planeta, el empobrecimiento del medio, los altos índices de contaminación (toxicidad) de la atmósfera, el agua, etcétera.” En base al espeluznante informe, el Club de Roma propugnó “poner límites al crecimiento si se quiere evitar el desastre”.<br />Estas recomendaciones y las políticas inspiradas en ellas provocaron la inmediata repulsa de las naciones del Tercer Mundo -a quienes iban dirigidas las propuestas restrictivas-, por el Vaticano, y por numerosas científicos que refutaron las bases científicas sobre las que se extiende el informe antedicho.<br />Los trabajos del integrante de la Academia Sueca de Ciencias Gunnar Myrdal, y de los académicos de las Universidades de Hannover y Cleveland, Mihalo Mesarovic y Eduard Pestel respectivamente, demostraron plenamente la precariedad del estudio del M.I.T.<br /><br />3.3. De todos modos, esa impronta ideológica fue sostenida por sociedades que reunieron –como en el caso del Club de Roma- a los representantes del poder en el mundo post-desarrollado, como fueron durante la década de 1970 el Bildelberger, encabezado por el entonces Príncipe Bernardo de Holanda, la Trilateral Comission fundada por Nelson Rockefeller, y posteriormente por la W.W.F presidida por el Príncipe de Edimburgo, consorte real de Isabel de Inglaterra.<br />El enorme peso específico de los integrantes de estas sociedades sobre de los resortes del poder mundial logró la inmediata y creciente aplicación de políticas basadas en las recomendaciones del citado informe tendientes a obtener la permanencia del status quo en el dominio planetario.<br />Por ejemplo, en 1969 el presidente Richard Nixon nombró al general Willian Draper como representante de los EE.UU. en la Comisión de Población de la O.N.U. y a partir de ese momento, Draper se convirtió en el impulsor de la idea “Crecimiento demográfico cero”; posteriormente el presidente Lyndon Jonhson afirmó ante la XXV Asamblea del mencionado organismo internacional que “cinco dólares invertidos en el control de la natalidad equivales a cien en ayuda al desarrollo” explicitando claramente las prioridades del gobierno de esa potencia mundial.<br /><br />3.4. Simultáneamente, diversos organismos no estatales desarrollaban una activa política de idéntico objetivo. Así en 1969 se reunió en Dacca la Conferencia Internacional de la IPPF (International Planned Parenthood Federation), organismo asesor de las Naciones Unidas. Allí el Dr. Bernard Berenson, quien presidía el Population Council, presentó las acciones que deberían realizar los gobiernos para reducir a la mitad las poblaciones del Tercer Mundo, entre las que se encontraban:<br />• impuesto sustancial al matrimonio<br />• impuesto a la familia numerosa<br />• evitar que el Estado asigne viviendas por el tamaño de la familia<br />• reducir o eliminar asistencia médica, becas, viviendas, préstamos y subsidios familiares financiados por el Estado a familias con numerosos hijos.<br />• el uso de agentes esterilizantes en fuentes de agua o en productos de primera necesidad, como la sal<br />• el aborto obligatorio para embarazos ilegítimos (posteriormente se cambió este término por “no deseados”)<br />• esterilización obligatoria permanente o temporaria en determinados segmentos de la población.<br />• permiso estatal obligatorio previo al embarazo<br />• liberalización del aborto<br />• imponer como elemento primordial en la salud de la mujer, la planificación familiar<br />• alentar la cultura de la homosexualidad<br />Estos objetivos se encuentran en “Estrategia para un cambio en las leyes” , trabajo editado por la IPPF para instruir a sus filiales en el modo de influir en la modificación de leyes que califica de anticuadas y restrictivas. Este organismo está representado en nuestro país por su filial denominada “ Asociación Argentina de Protección Familiar”<br /><br />3.5. Entre el 19 y el 30 de Agosto de 1974 se reunió en Bucarest, capital de Rumania (en esa época integrante del Bloque Soviético) la Conferencia Internacional de Población, bajo el auspicio de la O.N.U. En esa ocasión, “expertos” y representantes de gobiernos se reunieron con el objetivo de implementar acuerdos para un programa global de control de la población. El Plan de Acción Mundial (WPPA) presentado en esa oportunidad es hasta el momento, el documento madre para la elaboración de pautas sobre políticas de población, tanto en las Naciones Unidas como en sus organismos, como el BIRF (Banco mundial, regido en esa época por Robert Mc. Namara), la UNESCO, la OMS y la UNICEF.<br />El Plan fue presentado por los representantes de los EE.UU., siendo duramente objetado por las representaciones de los países iberoamericanos y árabes, muchos países africanos y el bloque socialista, a excepción del país anfitrión. Los argumentos contrarios al “Plan de Acción” se centraron en principios éticos y religiosos, y en la salvaguarda de la soberanía de las naciones.<br />En esa ocasión La Argentina presentó un Proyecto de Enmiendas al “Plan” que comprendía agregados, reformas o supresiones a 68 de los 93 párrafos que lo integraban. Este Proyecto, que circuló como Documento Nº 1 del Grupo de Trabajo causó revuelo por su tesis y amplitud, concitando fuerte apoyo de los países en desarrollo y enconada oposición del grupo de los países que propugnaban el control de la natalidad como única salida. Entre las propuestas argentinas, podemos citar:<br />• Reafirmación de la soberanía nacional de los países en materia de políticas de población, sin ingerencia externas directas ni indirectas.<br />• Reforma de la finalidad del “Plan de Acción” que tendía fundamentalmente a la limitación cuantitativa de la natalidad. El Proyecto Argentino sostuvo que el problema no es el crecimiento poblacional en si, sino la falta de un desarrollo económico y social que lo acompañe. Dicha posición contó con el máximo apoyo de los países del Tercer Mundo, y quedó consagrado en todo el documento adoptado por gran mayoría.<br />• Eliminación de la fijación de metas cuantitativas de reducción en la fecundidad en el mundo.<br />• Darle mayor importancia en el Plan a las migraciones internacionales como instrumento de política e población.<br />El representante argentino expresó: ”La visión del continente latinoamericano, con una densidad demográfica inferior a la de otros países del mundo y con una cuantiosa reserva de recursos a explotar, nos lleva a preguntarnos nuevamente como debe plantearse la ecuación población-desarrollo y cuestionar el control indiscriminado de la natalidad como herramienta válida para el desarrollo de nuestros pueblos. Creemos que mucho antes que aumento de la población como peligro para la sobrevivencia de la humanidad, existen otros flagelos que el hombre tiene que erradicar. Ellos son, básicamente, las relaciones de dependencia y explotación sistemática de los países pobres por los ricos y las relaciones de injusticia social dentro de cada país. No se puede pretender que los países pobres reduzcan su presión demográfica, para que aquellos ya enriquecidos puedan mantener un nivel de vida superior al que los actuales recursos materiales del mundo permite”<br />Finalmente, en general el Plan de Acción Mundial fue aprobado por el voto de los países industrializados y la impresionante presión ejercida por éstos sobre los representantes de algunos países sub-desarrollados (literalmente: “arrollados”) . Los que, como La Argentina, se opusieron, fueron catalogados como “marxistas, pro-natalistas y desarrollistas utópicos”.<br /><br />3.6. Meses después, en un Informe secreto –posteriormente desclasificado- elaborado por el gobierno de los EE.UU. se expresaba: “Hubo consternación general cuando al comienzo de la conferencia el Plan fue sometido a un ataque fulminante que se prolongó durante cinco horas, encabezado por Argelia, con el apoyo de varios países africanos; Argentina, apoyada por Uruguay, Brasil y Perú y en forma limitada, por otros países latinoamericanos; el grupo de países del Este europeo (menos Rumania) y la Santa Sede. Las creencias, ideologías y errores expuestos por muchas naciones en Bucarest indican la necesidad urgente de educar con intensidad a los dirigentes de muchos gobiernos”. En todo el informe, los dirigentes de los países en desarrollo juegan un papel muy importante. Para ellos se preveen estadías de estudio en las Naciones Unidas y en los Estados Unidos y todo tipo de apoyo. “Es necesario poner énfasis en motivar a los dirigentes de los países en vías de desarrollo para que acepten las actividades de planificación familiar.” Más adelante este Informe expone que se comprueba que en los países de bajo desarrollo hay una “motivación inadecuada” y “lentitud en el cambio de las preferencias familiares” lo que obliga a los EE.UU. a poner “mejores esfuerzos para cambiar las actitudes y creencias especialmente en los sectores populares”. Ese fin se conseguiría tomando “la educación como un modo de alcanzar índices de natalidad más bajos y no como un derecho cultural de la población”. Para eso, el Informe contempla mejorar la propaganda sobre materias de población a través de un creciente énfasis en programas de educación y motivación contraconceptiva a niveul mundial, realizados por la ONU, la USIA y la USAID, utilizando para ello las comunicaciones satelitales.<br />El documento que glosamos, oficialmente denominado “Memorando sobre Seguridad Nacional nº 200. Implicaciones del Crecimiento de la Población Mundial para la Seguridad de los Estados Unidos y sus intereses de Ultramar” más conocido como “Informe Kissinger” por ser dicho político norteamericano quien dirigió su preparación, fue “clasificado” en Diciembre de 1974, perdiendo esa categoría en Julio de 1989, cuando se tornó público.<br />Nos limitaremos a reproducir algunos de sus párrafos, ya que su claridad exime de todo comentario en cuanto a sus objetivos, su implementación y sus resultados actuales.<br />“Está dirigido a examinar las implicaciones internacionales, políticas y económicas, del crecimiento de la población antes que aspectos ecológicos, sociológicos y otros” e incluye recomendaciones para “intervenir en asuntos de población en el extranjero particularmente en los países en desarrollo”. “El motivo el informe radica en la preocupación de que las tasas de crecimiento de la raza humana en los países en desarrollo puedan desequilibrar la balanza del poder en perjuicios de los países industrializados del hemisferio norte y en beneficio de las emergentes naciones del sur”. Por un lado explica razones de estricta seguridad militar, por otro, dice que “se debe asegurar a toda costa la provisión de materias primas provenientes de los recursos naturales de esos países, abastecimiento que peligraría de aumentar la población”.<br />Previene sobre “el crecimiento político y estratégico” de aquellos países donde los EE.UU. tienen particulares intereses y sobre su “creciente poder en el escenario mundial”. Aconseja “que el Presidente y el Secretario de Estado acuerden especial importancia al tema del crecimiento de la población”, incluyendo como “objetivo mundial: modificar los niveles de fertilidad para el año 2000”. Para eso, “los EE.UU. se ofrecen a colaborar con otros países desarrollados interesados y las organizaciones donantes, p.ej. OMS, FNUAP, BIRF, UNICEF”<br />El control sobre el crecimiento de la población en el extranjero es el único aspecto de la política exterior de los EE.UU. en el cual es crucial una planificación a largo plazo. “La estrategia propuesta llama a concretar un acercamiento coordinado para responder a este importante interés de la política exterior de los EE.UU.: controlar la influencia del crecimiento de la población en los sistemas políticos, económicos y ecológicos del mundo. Lo inusual del tema de población es que este interés político externo debe tener un horizonte temporal mucho más lejano que otros objetivos”.<br />“Es fundamental llegar a un compromiso mundial, político y popular para estabilizar la población”. Por eso, dice “Es mucho más efectivo usar los aportes de ayuda económica para fines de control de población que elevar la producción a través de inversiones directas en riego, proyectos de energía o industrias”.<br />El Informe insiste en que “debemos tener cuidado que la apariencia de nuestras actividades en materia de población no aparezca a los ojos de los países en vías de desarrollo como una política contra ellos”. “Se debe ayudar a los dirigentes de los países en vías de desarrollo a integrar las políticas de población en los planes nacionales de salud, educación, recursos agrícolas y desarrollo”. Esos dirigentes “deben relacionar las políticas de población y planificación familiar, con las políticas de desarrollo: salud, nutrición, agricultura, educación, servicios sociales, actividades femeninas y desarrollo de la comunidad”. Integrar la planificación familiar en los servicios de salud desterrará cualquier sospecha de imposición extrajera. Incluir el control de la natalidad en el área de salud “ayudará a rebatir la acusación ideológica que los EE.UU. están interesados en frenar el crecimiento de población de los países de bajo desarrollo”<br />“Los EE.UU. pueden ayudar a minimizar los cargos de una motivación imperialista escondida detrás de su apoyo a las actividades de población afirmando reiteradamente que tal ayuda deriva de la preocupación sobre: a) el derecho individual a determinar libre y responsablemente el espaciamiento de los hijos; y b) el derecho al desarrollo de los países pobres”.<br /><br />3.7. A partir de la Conferencia de Bucarest se desarrolló en el marco de sucesivos congresos de la ONU una verdadera revolución semántica, guiada por la lógica esclavista de los centros de poder mundial que coherentemente buscan asegurar el control de la situación tal como actualmente se presenta.<br />Esta revolución semántica es obediente a una premisa que fue expuesta desde hace más de cincuenta años por un gran observador de la realidad argentina, el Dr. Arturo Jauretche quien enseñaba que las ideologías y las doctrinas, cuando traspasan el Atlántico y la línea del Ecuador, suelen cambiar de signo. Así lo que en el hemisferio norte es expuesto como elemento de progreso y liberación, es en nuestras tierras, instrumento de atraso y opresión.<br />Así en las cumbres de Río de Janeiro (1992), El Cairo (1994), Beijing (1995) se fue modelando un lenguaje posteriormente trasladado a las legislaciones internacionales y nacionales que presentan como progresos de la humanidad y de las libertades personales, a aquellos objetivos colonialistas que sin mayores disimulos quedaron expresados en los documentos que anteriormente expusimos. Por ejemplo, se refiere como “hijo no deseado” a todo aquel posterior al segundo por pareja; al aborto voluntario como “derecho humano básico”; a la castración de los humildes, como “salud sexual”; a “todas las formas de familia” para aludir a la promiscuidad, las uniones homosexuales, etcétera.<br />Para distinguir con nitidez el hilo conductor de la política poblacional actual, cabe citar las instrucciones que llevaron los diplomáticos norteamericanos a la conferencia preparatoria para El Cairo, que decían “La Administración (Clinton, paréntesis mío) ve la política internacional de población, como un objetivo importante de la política exterior de los EE.UU”. Debían tener en cuenta la necesidad de “asegurar el acceso universal a la planificación familiar y a los servicios de salud reproductiva, incluido el acceso al aborto seguro (...) Es prioridad específica de los EE.UU. estabilizar el crecimiento de la población y proteger el medio ambiente mundial (...) La delegación de los EE.UU. usará un lenguaje fuerte sobre la importancia del acceso a los servicios de aborto. Los EE.UU. creen que el acceso al aborto seguro, legal y voluntario es un derecho fundamental de las mujeres”.<br />Todas estas prédicas no han quedado en el plano teórico. Desde varias décadas atrás se han documentado sus concretas aplicaciones en los pueblos del Tercer Mundo, asiático, africano y americano. Cientos de miles de mujeres han sido esterilizadas sin su consentimiento, literalmente castradas cuando creían someterse a un control ginecológico, tal como ocurriera con pueblos indígenas y campesinos pobres del Brasil y Puerto Rico. Miles de millones de dólares han sido invertidos por la O.N.U. y sus “organismos asesores” en políticas de esterilización más o menos forzadas en todo el planeta. Como solíamos decir: Morgan no solo navega, también desembarca.<br /><br /><strong><span style="color:#660000;">4. LA OTRA CAMPANA.</span></strong><br /><br /><em>“Y creó Dios al hombre a su imagen. A imagen de Dios los creó. Varón y mujer los creó. Dios los bendijo diciéndoles “Sean fecundos y multiplíquense. Llenen la tierra y sométanla” (Génesis, 1,27-28) </em><br />La Iglesia Católica ha mantenido inveteradamente en sus documentos, discursos y participaciones en foros temáticos, la férrea defensa de la vida, de la libertad y de la dignidad humana, presentando opciones relativas al crecimiento de la población que son diametralmente opuestas a las políticas reseñadas en el capítulo anterior.<br />El mismo mahatma Ghandi, citado por el Papa Juan Pablo II en su discurso en Bombay del 9 de Febrero de 1986, dijo “el acto generativo debe ser controlado para el crecimiento ordenado de la humanidad. ¿Cómo se ha de conseguir la suspensión de la procreación? No por medios inmorales o artificiales, sino por medio de una vida de disciplina y autocontrol. Los resultados morales solo pueden conseguirse con medios morales”<br />De modo similar, el afamado científico brasileño Josué de Castro, en una obra de imprescindible consulta sobre la materia, expresaba: “...cuando más asole el hambre a estas zonas, más crece su efectivo humano. Mostraremos que esto se explica por la influencia del hambre que aumenta el coeficiente de fertilidad y los índices de natalidad de los grupos más miserables, sujetos a su acción permanente. De donde se puede deducir que, si no es posible exterminar el hambre del mundo con medidas tendientes a fiscalizar el crecimiento de las poblaciones, es perfectamente posible obtener la fiscalización de ese crecimiento por el exterminio del hambre”<br />Nuestro país ha generado una doctrina interna e internacional que enfrenta a los designios recién expuestos, principalmente expuesta por el fundador del Movimiento Justicialista y Presidente de la Nación Argentina por tres oportunidades.<br /><em>“La denatalidad debe ser preocupación del gobierno, que ha de tomar cuantas medidas tiendan a que el aumento vegetativo de la población sea el que corresponde. Cuando nosotros denunciamos públicamente la despoblación del campo y su correlativo hacinamiento urbano; cuando exhibimos el rancho y el conventillo como vivienda obligada de los trabajadores; cuando describimos la desnutrición y la miseria fisiológica de los habitantes del interior, y el resultado de estas condiciones infra-humanas de existencia; cuando señalamos que el cincuenta por ciento de nuestros muchachos de veinte años están inhabilitados para la prestación del servicio militar, lo que significa su incapacidad para la lucha por la vida; cuando estudiamos el problema del salario con relación al costo de la subsistencia; cuando nos referimos a la natalidad de nuestra población que no aumenta, estamos en realidad diciendo que la suerte del más humilde ciudadano está ligada por inmutable solidaridad a la suerte de la Nación entera, y que cualquier injusticia contra él cometida, ofende a la Patria toda”<br /></em>Estos conceptos de Perón, pronunciados en 1944, fueron ratificados tres décadas más tarde en su “Mensaje a los Pueblos y Gobiernos del Mundo”, remitido a la O.N.U. en vísperas de la reunión de Estocolmo en 1972, en memorable documento ecologista que contiene la propuesta integral justicialista sobre la cuestión, y que constituye un elemento de estudio y análisis indispensable para cualquier propuesta seria sobre esta cuestión insoslayable.<br />Reiterándolos poco después, en su Mensaje del 7 de Septiembre de 1973 a la IV Conferencia de Países No Alineados reunida en Argel Perón afirmó: “ Más importante que planificar el crecimiento de la población, es aumentar la producción y mejorar la distribución de alimentos y la difusión de servicios sociales, como la educación y la asistencia sanitaria(...) El crecimiento de la población debe ser planificado, pero a través de métodos que no perjudiquen la salud humana, según las condiciones particulares de cada país. La República Argentina, por ejemplo, no está en dicho caso pues necesita mayor capital humano para su desarrollo integral...”<br />La doctrina enunciada en los párrafos recién transcriptos, infundió toda la tarea de protección de la familia trabajadora y numerosa, de las madres solas y de la niñez desamparada, tanto en el campo de la educación, como en la salud, la vivienda, etcétera, durante las tres presidencias del Gral. Juan Perón, dejando una marca indeleble en la memoria de nuestra sociedad.<br /><br /><strong><span style="color:#660000;">5. CONCLUSIONES PARA ABORÍGENES.<br /></span></strong><br />A nuestro país, en la Nueva División Internacional del Trabajo decidida en los círculos conformados por los cenáculos anteriormente mencionados, le ha sido asignado el papel de mero proveedor de materias primas (“commoditties”); hoy soja, trigo, maíz, petróleo, minerales varios, mañana agua potable.<br />En ese esquema estorbaba el desarrollo industrial independiente alcanzado por La Argentina a partir de 1937, y que tuvo un claro y sostenido crecimiento hasta 1976, cuando el gobierno cívico-militar de Videla y Martinez de Hoz vino a encuadrar el país al esquema mundial, comenzando una política de desguase tecnológico y productivo a lo cartaginés sin parangón en la historia contemporánea del mundo, continuada bajo los gobiernos constitucionales que se sucedieron al llamado “Proceso de Reconstrucción Nacional”.<br />Dichas administraciones de jure terminaron también con toda la actividad educativa, cultural y científica destinadas a fundamentar y fortalecer el desarrollo nacional.<br />Al parecer, hoy ha llegado el momento de atacar a los cimientos mismos de una sociedad, de cercenar la última resistencia, el Ser mismo de un Pueblo, a su gente y su simiente.<br />Para ello se recurre a múltiples medios de disolución social, y entre ellos, a la legislación “progresista” en materia de “derechos a la salud sexual y reproductiva”. Nuevos espejitos y cuentas de colores para los aborígenes locales, que consumiremos para satisfacción de los diseñadores de las políticas para las poblaciones del Tercer Mundo acordes a los del Mundo de Primera, y de sus amanuenses locales.<br />La actitud de estos últimos frente al hecho de la miseria que atenacea a grandes sectores de nuestra sociedad, es –por diversos y diferentes motivos- promover, proponer y presionar para aplicar herramientas anti-natalistas como la legislación comentada, desdeñando utilizar el método inductivo para allegarse a la realidad que deberíamos aprehender para modificar y superar.<br /><em><span style="color:#660000;">“Hay que partir de las preocupaciones reales del pueblo real, no de supuestos o de modelos. Los pobres preguntan como alimentar a sus hijos, no como tenerlos. Los amamos dándole más cabida en nuestras vidas, no decidiendo cuantos hijos estamos dispuestos a autorizarles. No son mascotas hogareñas. Otros argumentan que en muchos casos el marido llega borracho a casa y obliga a la mujer a tener relaciones sexuales contra su voluntad y hasta con violencia física. Me pregunto: ¿ligar las trompas en una solución”<br /></span></em>En nuestro país sufrimos las consecuencias de un fenómeno de larga data, que es la actitud imitativa de sus intelectuales, o para ser más preciso de su “intelligentzia”, carcomida por el síndrome del suburbano cultural que la lleva a la subordinación automática al pensamiento elaborado por los centros decisionistas. Sin ahondar en los orígenes de tal actitud, baste decir que en la mayoría de nuestras ¿altas? casas de estudio se sigue rindiendo incondicional pleitesía intelectual a lo que es moda en el centro cultural del momento, sin medir su mayor, menor o nula aplicación a la realidad nacional.<br />La premisa parece ser “Si lo dicen en Estados Unidos, o en Inglaterra, o en las Naciones Unidas (antes pudo ser en la U.R.S.S. o en China), ¿cómo vamos a ponerlo en duda nosotros, que somos negritos –untermensch- de un paisejo periférico y subdesarrollado?”<br />Y mientras nosotros nos afanamos en imitar modas ya abandonadas por los países que las originaron, en la vieja Europa, los gobiernos de Francia, Italia y Alemania incentivan de diferentes maneras y con un importantísimo aporte económico, a sus ciudadanos para llevarlos a procrear con mayor ímpetu, y para que mantengan sus hábitos de vida seculares, evitando el despoblamiento de las áreas rurales.<br />Si a lo largo de la historia de los últimos sesenta años sobran los ejemplos de la incomprensión del “stablishment” cultural de nuestra sociedad hacia aquellos innovadores que se atrevieron a pensar en la realidad argentina -como por ejemplo los sabios médicos Massa y Alvarado, a los que tanta gratitud adeudamos- ¡cuanto más difícil será ahora en que la globalización pretende imponer el pensamiento único!<br />Cabe indagar entonces si los políticos y doctrinarios que generan y apoyan leyes que imponen técnica no-natalistas, padecen del síndrome indicado; pretenden aunque equivocadamente atender al interés de la Nación Argentina; o son obedientes al mandato del pensamiento uniforme que imponen los centros imperiales.<br />Porque La Argentina es un país escasamente poblado, y con una distribución poblacional muy irregular que concentra en pequeñas áreas a la mayoría de sus habitantes; y si bien la tendencia a la densificación urbana es un fenómeno mundial, en nuestro caso presenta características socio-patológicas –como la pérdida de calidad de vida en los centros urbanos y desertificación humana de extensas áreas interiores- que llegan a comprometer la viabilidad de un proyecto nacional. Este tema, cuyo estudio, sistematización, exposición pública y modificación positiva debe ser afrontado como política de estado, resulta ignorado por los responsables, que por el contrario, suman a esa actitud el agravio que implica propiciar leyes como la que comentamos.<br /><br /><br /><em></em><br /><em><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5410861535925162738" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 290px; CURSOR: hand; HEIGHT: 400px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgB7ErwQwM7_Oc8uu1x5Z4uwnt5SHDl6kQPP79BG-McT5Rch2MLqKjyIXTtBvXsn2EL_3Z_vKaHVSzMJ5Zr0ggadKUDOjAqFrwyreoNHzhsldbYcUH7wxeTpnjkJ4BkT-JXADdqMoXJ1DM/s400/memorandum+200.jpg" border="0" />Informe secreto impulsado por el presidente Nixon y firmado por Henry Kissinger que trata el tema de cómo reducir la población mundial. En el punto 29, los Bilderbergers sugieren "intensificar programas de población" para poder reducirla "en unos 5000 millones hacia el año 2000 (de 1974) y en unos 3 mil millones hacia el año 2050." Todo se basa en la premisa que el planeta se esta quedando sin recursos naturales para abastecer a casi siete mil millones de personas.</em>Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-30206654207202547762009-12-02T20:18:00.000-08:002009-12-02T20:20:03.788-08:0011. El matrimonio a pruebaActualmente existe una curiosa dicotomía en la vida pública americana. Por un lado, quienes pueden, y de alguna manera están motivados a casarse, deciden luego no hacerlo. La cantidad de matrimonios en EU ha bajado un 50% desde 1960. La proporción de mujeres americanas solteras entre las edades de 25-29 años, que constituían poco menos de 10% en 1965, alcanzó un 39% en el 2000: lo que representa un incremento cuádruplo. Entre los hombres de la misma edad, hubo un incremento de hombres que nunca se han casado, de 18% en 1965 a 44.4% en el 2000. Lo que el Censo ha llamado “hogares de personas no casadas” ha aumentado: de 523,000 casos de parejas heterosexuales que convivían en 1970 a 4,900,000 en el 2000; nueve veces más. Mientras tanto, el número de propietarios de hogares que no constituyen una familia en EU, sin matrimonio ni hijos, subió de 7 millones en 1960 a cerca de 33 millones en el 2000. Una cifra cuatro veces más grande. Al mismo tiempo, el número de parejas casadas con hijos se redujo un poco, de 25.7 millones en 1960 a 25.2 millones en el 2000. Visto en proporción, del 76 % de los hogares que en 1960 estaban formados por parejas casadas, sólo se dio un 53 % en el 2000.<br />También podemos observar lo que el psicólogo Kingsley Davis, de la Universidad de Southern California, ha denominado “Declining Marital Output”, que significa “menos hijos”. El por ciento de fertilidad en parejas en EU bajó de 157 partos (por cada 1000 mujeres casadas entre los 18 a 44 años) en 1957 a sólo 84 en el 1995, una dramática merma de hijos. Por otro lado, hay un creciente reclamo por obtener matrimonios legales entre personas cuyas relaciones han sido tradicionalmente rechazadas. Según Lamba Legal explica-“Las parejas del mismo sexo desean contraer matrimonio por las mismas razones que cualquier otra pareja: buscan la seguridad y protección que resultan de una unión legal…; quieren el reconocimiento de sus familiares, amigos y del mundo…; y buscan la estructura y el sostén que por los lazos emocionales y económicos brinda el matrimonio.” Muchos analistas legales creen que la decisión que en el 2003 la Corte Suprema de los EU, tomó para el caso Lawrence y Garner vs. Texas ha abierto la puerta para la aceptación del matrimonio legal entre parejas del mismo sexo.<br />Hay retos mucho más amplios para la institución del matrimonio contemporáneo. Una serie de recomendaciones que la ALI emitió en noviembre de 2002, le restaría el estatus legal al matrimonio tradicional, no por revocación directa, sino por extenderle a otras relaciones las protecciones que el matrimonio provee. Estas propuestas, por ejemplo, conceden el derecho de sustento y de propiedad a parejas que convivan, sean hetero u homosexuales: “una pareja doméstica tiene derecho a pagos compensatorios igual que un esposo o esposa.” Más aun, el ALI urge que el adulterio se elimine como un factor determinante en cuanto a los acuerdos de divorcio como son la custodia de los hijos y la división de bienes: “No es justo que el adulterio de un cónyuge sea relevante para el reclamo de pensión”. El número de personas que pueden pedir custodia de o derechos para visitar un niño también se extiende para incluir a un padre o una madre “de facto”, como sería una pareja lesbiana de la madre biológica del niño. Mientras tanto, “The Alliance for Marriage”, dirigida por el ex delegado del Distrito de Colombia Walter Fauntroy, ha propuesto en este Congreso una enmienda a la Constitución de los EU declarando que “El matrimonio en los EU consistirá solamente de la unión entre una mujer y un hombre” y que las cortes confieran el estatus matrimonial a otros tipos de parejas o grupos.<br />Al observar el desarrollo de las naciones occidentales, dos eruditos notan que las estructuras legales concernientes con el matrimonio, que habían sido “bastante estables durante varios siglos, de pronto se han desmoronado bajo la presión combinada del capitalismo, el individualismo y la degradación moral.” Donde “el matrimonio era para toda la vida” la salida de éste, vía el divorcio, ahora es fácil y unilateral. El papel legal del matrimonio, que confiere legitimidad a los hijos, también ha desaparecido. Las relaciones informales están a la par los matrimonios tradicionales. “Aun, uno de los últimos restos de las leyes tradicionales de la familia, el requerir que los esposos y padres sean de diferentes géneros, está bajo ataque,” en algunas naciones que entienden “derechos casi-matrimoniales a parejas del mismo género.” Los autores concluyen: “Los principios que incuestionablemente dominaron las leyes familiares por cientos de años, han tomado un giro de 360 grados.”<br />Es curioso notar que en el 1926, los líderes comunistas de la Unión Soviética impactaron al mundo al considerar abolir el matrimonio legal. Uno de los defensores más apasionados de esta medida, el fiscal Kritenko, explicó:<br />¿Por qué el Estado tiene que saber quien se casa con quién? Claro, si vivir juntos sin el registro legal, prueba suficiente de relación marital la poligamia o la poliandria, pero el Estado no puede poner barreras en contra de esto. El amor libre es la meta de un estado socialista. En ese Estado el matrimonio estaría libre de cualquier obligación, incluyendo lo económico, y se convertiría en una unión absolutamente libre entre dos seres.<br />Aunque el comunismo fracasó como sistema económico y político, su visión social del matrimonio como ‘libre de toda obligación, incluyendo la economía’ se ha concentrado en Europa Occidental, especialmente en Suecia. En ese país, el sello ‘matrimonio’ aún sobrevive, pero no confiere un estatus significativo. Para cualquier beneficio social para las contribuciones se asume que la pareja casada son realmente dos individuos. Más aún, un ‘matrimonio tradicional’ de padre proveedor y madre ama de casa, paga una gran penalidad financiera. Según el American Law Institute Report sugiere, la profesión legal en EU está promoviendo llegar al mismo fin.<br />Es muy peculiar el hecho de que- distinto a personas, por ejemplo, de 1957, hoy sabemos, a partir de la evidencia irrefutable de las ciencias sociales que el matrimonio es favorable para la sociedad, para los adultos y para los hijos. Libros como los de Glenn Stanton, The Marriage Matters (1997), The Case for Marriage de Linda J. Waite and Maggie Gallagher ( 2000) y A Family Portrait de Bridget Maher (2002) demuestran que el matrimonio tradicional es un gran e irremplazable don social ; todo buen gobierno tiene un interés vital en promover todos los matrimonios tradicionales que sean posibles. Bajo el matrimonio tradicional, los adultos suelen estar significativamente más saludables, más felices, más seguros, más ricos, pudientes y viven más años. Los hijos de matrimonios tradicionales estables están mucho más saludables de alma, cuerpo y espíritu. Son más exitosos en la vida y en su educación, y mucho menos propensos a utilizar drogas y alcohol o a tener problemas con la justicia. Estos matrimonios tradicionales le reducen dramáticamente los costos de beneficencia pública al gobierno, aumentan los ingresos y producen un ciudadano mucho más comprometido. Aún así, muchos gobiernos que se benefician de los matrimonios legales conspiran a menudo para debilitarlos.<br />En esta época de confusión, quizás debamos hacernos la pregunta fundamental: ¿Qué es exactamente el matrimonio? Los griegos tenían una respuesta. De acuerdo a una leyenda comentada por Platón, hubo una vez un ser de ambas naturalezas, mujer y hombre, que ofendió a los dioses y como castigo, estos lo dividieron en mujer y hombre. Desde ese momento, el hombre y la mujer buscan su otra mitad; cuando la encuentran se reintegran mediante el matrimonio. El libro de Génesis, sagrado para los judíos, los cristianos y los musulmanes, da otra respuesta: “Dios los creó a su imagen y semejanza.” Los creó hombre y mujer y les bendijo, y les dijo: Creced y multiplicaos y dominen la tierra.” Por eso el hombre deja a su padre y a su madre y se une a su esposa para formar una sola carne. El escritor francés del siglo XIX, Louis de Bonald, quien contribuyó en la fundación de la ciencia moral moderna, define el matrimonio como “Una sociedad en potencia” que se convierte en una ´’sociedad real’ cuando nace el primer hijo/ hija. “En síntesis, la razón del matrimonio es procrear hijos.” Compare esta imagen tan rica en su contenido con la de los sociólogos modernos que la describen como característica primordial del matrimonio el darse simplemente para la “aprobación pública y el reconocimiento”: es decir, que es “matrimonio”, si el “público” dice que lo es.<br />Como miembro certificado del “público”, quiero ofrecerles mi definición, aún tosca, de lo que es el “matrimonio” y presentarles, además, sus implicaciones públicas. Lo haré utilizando cinco imágenes:<br /><br />PRIMERO: EL MATRIMONIO ES PARTICULARMENTE AMERICANO.<br /><br />Un punto de vista popular tiende a ver al americano, entre los pueblos del mundo, como seres comprometidos únicamente con el individualismo, la autonomía personal y el cultivo del propio ser. Algunos analistas arguyen que esta actitud se remonta a los tiempos coloniales, antes de la Revolución Americana. Al escudriñar la historia más a fondo descubrimos otro parecer. Según el científico político de la Universidad de Colgate, Barry Alan Shain, en su maravillosa libro “The Myth of American Individialism” (de Princeton University Press), parece ser que la mayoría de los americanos del siglo XVIII no pueden ser caracterizados certeramente como predominantemente individualistas. La gran mayoría vivía voluntariamente en comunidades agrícolas, moralmente estrictas, influenciadas por normas sociales y morales protestantes. Estas comunidades se definirán por sus enlaces entre los círculos familiares y comunitarios, la auto-regulación y hasta la abnegación.<br />En efecto, la evidencia sugiere que en América ha pervivido una fuerte cultura del matrimonio. Ben Franklin lo entendió al atribuir la abundancia de tierra y oportunidades en América al matrimonio universal durante mediados del siglo XVIII. Los matrimonios en América son más generales y se llevan a cabo más temprano que en Europa, escribió Franklin, al ver que la cantidad de matrimonios y la tasa de natalidad duplicaban el promedio de Europa. Veinte años más tarde, Adam Smith lo entendió, al atribuirle a la cultura americana del matrimonio un carácter de economía próspera.<br />Lo que determina la prosperidad de un país es el incremento en el número de sus habitantes. El valor de los hijos es el mayor estímulo para el matrimonio. No podemos, entonces sorprendernos porque los americanos generalmente contraigan matrimonio a una corta edad.<br />Alexis de Tocqueville lo comprobó durante su visita a América a mediados del siglo XIX:<br /><br />Ciertamente no hay un país en el mundo donde los lazos matrimoniales sean más respetados que en América, o donde la felicidad conyugal es más apreciada. Mientras que el europeo hace todo lo posible por olvidar sus problemas domésticos agitando la sociedad, el americano deriva de su propio hogar el amor por el orden, que después lleva consigo a los asuntos públicos.<br /><br />Sociólogos americanos lo observaron a medidas del siglo XX, cuando la edad promedio para el primer matrimonio bajó a 20 para las mujeres y 22 para los hombres. Para el 1960, el 90% de las mujeres entre 25-29 años y el 80% de los hombres de la misma edad, ya estaban o habían sido casados. A los 40 años, 95% de todos los americanos estaban o habían estado casados.<br />¿Cómo funcionaba esta cultura americana del matrimonio? Permítanme compartir con ustedes una anécdota personal. Comencé mis estudios universitarios en una institución luterana de Artes Liberales cerca del rió Mississippi en Illinois, Augustana College. Cuando llegué en septiembre de 1967 como estudiante de primer año, el tan comentado desorden moral de los años 60 aún no había llegado a nuestro campus. Por el contrario, nuestro presidente saludó a todos los estudiantes nuevos y a sus padres en una asamblea, en la que jovialmente dijo: “Miren a su alrededor. Puede que su futuro esposo, esposa, o suegros estén sentados al lado suyo.” Todos nos reímos pero él decía la verdad. El campus de Augustana, como muchos de ese tiempo, era el sitio donde uno esperaba conocer a su futuro esposo o esposa. Por lo menos para mí y para muchos de mis amigos fue así. La expectativa del matrimonio perneaba el ambiente ya que se asumía que el próximo paso era el matrimonio; todas las señales culturales e institucionales te dirigían hacia esa dirección.<br />Hoy día, estas señales no se encuentran en la mayoría de las universidades y colegios. Una excepción importante es la Universidad de Brigham Young, que ahora es la universidad privada más grande de la Nación Americana. En ésta las expectativas de una pronta madurez y de un matrimonio temprano existen todavía. Así es todo, desde el ambiente hasta el estatus en el campus, en donde se destacan imágenes positivas de la maternidad, la paternidad, los hijos, y el hogar.<br />Curiosamente, la cultura del matrimonio en América está sobreviviendo en otro lugar mucho menos esperado: Hollywood. ¿Qué tienen en común las siguientes películas populares: My Big Fat Greek Wedding, Maid in Manhattan, Sweet Home Alabama, Kate and Leopold, Notting Hill, Runaway Bride, You’ve Got Mail, Pretty Woman y Sleepless in Seattle? Mi hija las llama “películas sólo para mujeres”. Una mejor descripción puede ser “películas para matrimonios”, porque todas presentan el matrimonio como algo fantástico, que satisface y llena todas las expectativas en la vida de una mujer. Ninguna de estas películas, ni siquiera el género completo, pudieron haber sido hechas en la Europa Occidental, cínica y libertina. Los europeos ya no creen en la cenicienta; los americanos sí. Estas películas son exclusivamente nuestras: señal de que todavía existe un anhelo por el matrimonio y el hogar.<br /><br />SEGUNDO: EL MATRIMONIO ES LA UNIÓN DE LO SEXUAL Y LO ECONÓMICO.<br /><br />Esta no es sólo mi observación; más bien ésta es la definición clásica del matrimonio tradicionalmente utilizada por antropólogos culturales para explicar mejor esta institución: a saber, hombres y mujeres cooperan económicamente para producir y criar hijos.<br />De acuerdo con las grandes investigaciones antropológicas del siglo XX, el matrimonio como tal existe en toda sociedad humana. El paleo-antropólogo C. Owen Lovejoy escribió en la revista Science que la evidencia demuestra que los hombres y las mujeres se atraen por una afinidad natural: un deseo innato por la unión permanente con una pareja. En efecto, él ve este desarrollo de cooperación económica en parejas de unión permanente como la clave para una evolución social humana; esto es, como la razón primordial para la supervivencia y el éxito. Ciertamente, por miles de años y por cientos de generaciones, la humanidad ha organizado sus tareas económicas en torno a la familia. El cultivo, la preservación y preparación de comestibles, el refugio, la manufactura de ropa, la educación y la atención médica, todas estas tareas y muchas más se llevaban a cabo en el hogar. El hombre y la mujer, el esposo y la esposa se especializaban en su labor de acuerdo a sus fuerzas. El trabajo de ambos, sin embargo, se desarrollaba en el hogar y fundamentalmente para la sobre vivencia de la familia. En otras palabras, la familia humana se había aclimatado a una vida en hogares autosuficientes, en la finca o en el pueblo.<br />Muchos catalogan la revolución industrial de los últimos 150 años como “el cambio tecnológico más grande que ha ocurrido en la sociedad” y como el origen de los retos actuales del matrimonio. La industrialización rasgó la economía del hogar. Más concretamente, esta revolución movió el lugar de trabajo del hogar a la fábrica u oficina; desplazó las destrezas productivas de cultivo y tareas domésticas por especializaciones exageradas entre marido y esposa buscando preservar el hogar como refugio para los hijos. Pero hasta esta concesión dejó de funcionar por los ataques ideológicos y la gran demanda de mano de obra femenina y por oficinas y fábricas.<br />Hay mucho de verdad en este análisis. Sin embargo, muchos argumentan que ahora se necesita otro tipo de familia: una familia “igualitaria”, sin roles específicos ni producción en el hogar que se acomode a las demandas industriales. Pero no será posible. Concuerdo con Kingsley Davis que “tal sistema de familia igualitaria” como la que podemos ver hoy día en Europa occidental no se puede mantener. El altos por ciento de divorcios y de la cohabitación, combinado con el bajo índice de natalidad “crea dudas sobre si sociedades bajo este sistema igualitario pueden sobrevivir”.<br />La alternativa es buscar nuevos métodos de articular o promover el matrimonio como asociación económica. Entre 1948 y 1969, por ejemplo, el gobierno de los EU trató el matrimonio como una verdadera sociedad (asociación) para fines de contribuciones, permitiendo que parejas casadas dividieran sus ingresos como cualquier otra asociación legal. Un resultado fue el aumento en matrimonios durante esa era; un fenómeno que terminó al eliminar la división de ingresos. Además, estudios en Australia revelan que la economía tradicional en el hogar no ha desaparecido. En sociedades industriales avanzadas. como EU y Australia, el valor de las actividades en el hogar como el cuidado de niños, la carpintería y preparación de comida, aún es tan grande como la economía oficial. Un creciente número de americanos están cambiando radicalmente la industrialización de actividades, que una vez fueron de la familia, como vemos, Por ejemplo, en la educación en la casa, que ahora busca 2 millones de niños americanos hoy. Como resultadote esto vemos matrimonios más sólidos.<br /><br />TERCERO: EL MATRIMONIO ES EL BALANCE ENTRE LAS RESPONSABILIDADES Y LOS BENEFICIOS<br /><br />El profesor de leyes Richard Stith, de Valparaíso University, ofrece una perspectiva libertaria que puede clarificar esta situación. El sostiene que liberales y conservadores deben aceptar que los registros estatales de amistades son una mala idea. En efecto, en el presente, muchas clases de amistades no están reguladas en los EU. Muchos estados han decidido que las relaciones sexuales fuera del matrimonio no constituyen un crimen y por lo tanto no las prohíben. Esto implica, por ejemplo, que esos que participan en relaciones con el mismo sexo son tan libres como cualquier persona para formar uniones sexuales duraderas- y sellarlas con promesas, votos, o contratos, todo sin la aprobación y el registro del gobierno.<br />Stith enfatiza que sólo una categoría de unión heterosexual es inscrita por el gobierno: aquellos que forman un matrimonio legal. Pero que esto no puede ser visto como una libertad o derecho. Más bien, es ante todo una carga. En su mayor parte, la legislación sobre el matrimonio limita, en vez de incrementar, la libertad del individuo. Las leyes sobre el matrimonio regularmente ordenan el compartir ingresos y deudas, obligan el mutuo apoyo, y limitan los derechos para concluir con la relación.<br />¿Por qué los gobiernos no regulan la mayor parte de las relaciones, y continúan cargando e inscribiendo las uniones heterosexuales? Stith contesta:<br />Todos sabemos la respuesta: las relaciones sexuales entre hombre y mujer puede y generar hijos, seres vulnerables y esenciales para el futuro de toda comunidad… Matrimonios duraderos reciben la aprobación de la sociedad, porque ayudan a procrear seres humanos capaces de practicar la libertad.<br />Uniones heterosexuales pueden procrear un niño en cualquier momento, así que el público tiene gran interés en que se estabilicen desde el principio. Por el contrario, uniones sexuales del mismo sexo son absolutamente estériles; el interés público en se estabilización sólo se daría en aquellos casos de adopción por estas parejas; y solamente en el momento de la adopción no al principio de la relación. Los pocos beneficios adjudicados al matrimonio legal (y no disponible por contrato privado) como el seguro social, se justifica como compensación a esos padres que se sacrifican, Como los que renuncian a su carrera para criar a sus hijos. Tal padre, voluntariamente, comparte la vulnerabilidad de sus hijos al convertirse en dependiente, y merece alguna protección financiera.<br />Stith hace otras preguntas pertinentes: ¿Realmente queremos la regulación extendida sobre otros tipos de relaciones? Los dueños de armas de fuego, él anota, ven como alarmante cualquier tipo de legislación que facilite la inscripción de armas. “¿Cómo los homosexuales y las lesbianas pueden asegurarse que una lista de inscripción al final no va a ser perjudicial? ¿Por qué limitar la inscripción de matrimonios y sus beneficios solamente a uniones de parejas? ¿O en comportamiento sexual? Si la potencial preocupación de niños no es el criterio, ¿por qué no inscribir todo tipo de relación y adjudicarle beneficios?<br />El problema surge que al expandir los beneficios matrimoniales los costos suben, y por tanto disminuyen el valor promedio del beneficio. Es importante notar que al extender “los derechos matrimoniales a parejas del mismo sexo en Suecia se dejó sin cubierta de estatus legal y beneficios económicos al “matrimonio”. Se obtuvo la clasificación, pero sin ninguna ventaja, y con el precio de terminar con la protección a favor de niños vulnerables y padres naturales abnegados.<br /><br />CUARTO: EL MATRIMONIO EN UN EVENTO COMUNAL<br /><br />Hace falta un poeta para recordarnos que el matrimonio es más que un vínculo entre dos personas. Andel Berry de Kentucky realza que el matrimonio también existe para atar a la pareja como “padre a hijo, familias a comunidad y comunidad a la naturaleza”. Los novios proclaman sus votos a la comunidad como a ellos mismos y la comunidad se reúne alrededor para escucharlos y desearles bien. La salud y el futuro de la comunidad depende de la perseverancia de estos votos. Estos atan a los contrayentes con el pasado y el futuro, con el cielo y la tierra. ”El matrimonio es “la conexión fundamental sin la cual nada se mantiene unido.” Aún la muestra de amor de un enamorado a otro: nos persuade a entender que somos: Uno para el otro y para todos...<br />Cuán raro es pensar que aún en los niños que no han nacido nosotros estaremos presentes. Berry insiste que el amor sexual dentro del matrimonio es el corazón de la vida comunitaria, de la misma forma que la persona se conecta con la creación, la abundancia de la tierra y la fertilización. Berry utiliza la metáfora diciendo que el matrimonio “nos lleva a bailar juntos para así mantener la comunidad en su sitio. Esta tarea del construir comunidades realiza la tragedia que representa la revolución del divorcio por mutuo acuerdo. Hasta fines de los 60, todos los estados americanos requerían encontrar una falta -como el adulterio, crueldad, abandono – antes de llevar a cabo un divorcio. La introducción de causa “sin culpa” en las últimas décadas realmente provocó que los sentimientos negativos simplemente se movieran a otros asuntos como: custodia de los hijos. originado para reducir el tiempo que en corte toma resolver conflictos familiares, el cambio al divorcio por mutuo acuerdo condujo a un incremento en la tasa del divorcios. Más importante aún, es que la eliminación del concepto de falta en casos de divorcio ocasionó la pérdida entendimiento colectivo que consideraba que romper un matrimonio era un crimen en contra de la comunidad. Los niños, vecinos, amigos, la comunidad en general, sería afectada negativamente por el divorcio. Es importante que alguien se responsabilice por este golpe en contra de la comunidad. Pero aún en esto hemos fracasado.<br /><br />QUINTO: Y ULTIMO: EL MATRIMONIO ES POLITICO<br /><br />Esto es cierto hasta cierto punto, un estudio reportado por Business Week señala que las mujeres tienden a votar por los demócratas después de un divorcio y por los republicanos después de contraer nupcias. Pero estoy más interesado en el matrimonio como “político” en un sentido más amplio, como explica el periodista inglés G.K. Chesterton. El entiende que la familia es un “triángulo de verdades entre padre, madre e hijo”, una institución antigua que existe antes del estado y una que no puede ser destrozada, pero que si puede destruir a aquellas civilizaciones que la desatiende. Este pequeño estado fundado por los sexos es a la misma vez voluntario y el más natural de todos los estados autogobernados”. Los gobiernos modernos buscan apartar a los individuos de sus familiares para poder gobernarlos mejor: los dividen para dividirlos para debilitarlos. Pero la familia es auto-renovable como expresión misma de la naturaleza humana, que construye sobre el estado natural del matrimonio. “El ideal sobre el que se apoya el matrimonio es la libertad, sostiene Chesterton. Se basa en la libertad porque es “necesario y voluntario a la misma vez. Es el único control en el estado que se renueva constantemente.” Crea una “provincia de libertad” donde la verdad protege la persecución, y donde el buen ciudadano puede sobrevivir dentro de un mal gobierno.<br />En conclusión, veo el matrimonio como especialmente americano, como la unión de lo sexual con lo económico, como un balance fructífero entre cargas y beneficios, como un evento comunal, y como político en su esencia. ¿Qué implicaciones políticas pueden substraerse de este análisis? Brevemente: los estados deben incluir las “faltas” de nuevo en las leyes que regulan el proceso del divorcio. Medidas para que el llamado “matrimonio por contrato”, que crea una unión voluntariamente aceptada, requieran que haya una falta para disolverlo, lo que sería una manera relativamente indolora para comenzar el proceso. Lo ideal es que las “faltas” sean reincorporadas a las leyes de divorcio aplicables a todos los casos, para que así se recalque la naturaleza comunal del matrimonio y la gravedad social del divorcio.<br />Todo gobierno debe tratar el matrimonio como una asociación económica. A nivel federal, esto implica reintroducir verdadera “división de ingresos” en contribuciones federales (lo que eliminaría la “penalidad de matrimonio”). A nivel de estado, este principio estimularía una amplia aplicación del concepto de propiedad comunitaria, heredado de los antiguos códigos hispanos del suroeste de los Estados Unidos.<br />El status legal del matrimonio, y los beneficios que éste confiere, deben restringirse a la unión monógama de mujer y hombre: simple y precisamente porque de ahí derivan los niños. La salud y el buen orden de nuestras comunidades y nación depende de los matrimonios fuertes y sólidos.<br />Idealmente, el antiguo principio seguirá siendo reconocido por los 50 estados. De ser necesaria, una enmienda a la Constitución de los Estados Unidos para proteger el matrimonio, como ha sido definido aquí, se justificará como escudo contra una ingeniería social perjudicial. En deferencia al principio de libertad, otras relaciones humanas se han dejado sin reglamentar y sin inscribir.<br />La renovación de una cultura americana del matrimonio dependerá ante todo de incentivos comunitarios y religiosos. Así mismo, es apropiado que los programas federales para el bienestar público (como TANF) busquen maneras de fomentar y afirmar el matrimonio entre esos que reciben estas ayudas. Estas no son, y nunca han sido, decisiones estrictamente privadas. El interés público está muy involucrado en el estado del matrimonio. El bienestar de los niños y el futuro de esta nación requieren la creación y mantenimiento de hogares fuertes de parejas casadas. Con respecto a esto el gobierno federal puede asumir un papel afirmativo.<br /><span style="font-size:78%;">Nota: El texto escrito es una traducción literal de la conferencia: “Marriage on Trial” dictada el ___ de febrero de 2004, por Allan Carlson, en la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico.</span>Unknownnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8969957337384300536.post-18097902870420410682009-12-02T20:15:00.000-08:002009-12-02T20:18:36.183-08:0012. Las políticas demográficasSe puede hablar de política demográfica cada vez que se establezcan unas medidas legislativas o reglamentarias con vistas a alcanzar los objetivos inherentes a las doctrinas de población. Sin embargo, parece abusivo incluir aquí las políticas sanitarias que se practican a escala universal incluso si éstas se conciben y se llevan a cabo de manera muy desigual. La principal distinción es la de políticas demográficas abiertas, confesadas y asumidas, y de las “cripto-políticas”; entre éstas, se pueden distinguir las que son ocultadas de manera voluntaria cuando el objetivo real no corresponde al objetivo ostentado y las que son el resultado de medidas mal concebidas, con consecuencias mal previstas y efectos perversos.<br />Entre el final de la Primera Guerra Mundial y el inicio de la Segunda, dominaron el eugenismo, el racismo y el poblacionismo; después, a partir de 1940, el neomaltusianismo y las intervenciones contradictorias de los estados en el ámbito de la familia, mientras las políticas migratorias de los estados europeos conocieron en los años setenta una auténtica inversión de tendencias.<br /><br />12.4.1. EL EUGENISMO<br /><br />Ya hemos visto los orígenes del eugenismo y el poder de seducción que éste ejercía desde el comienzo del siglo XX tanto entre políticos como entre eruditos. El éxito desembocó entre ambas guerras mundiales en unas medidas concretas, sobre todo en los países nórdicos y en Alemania.<br /> En Escandinavia, donde los socialdemócratas que habían llegado al poder estaban emprendiendo la construcción de un estado providencia, la política eugenésica estaba destinada tanto a mejorar la calidad de la población como a reducir los costes sociales (A. Drouard, 1998). El primer Estado que se había comprometido a ello fue Dinamarca, donde el pastor Johan Keller y su hijo Christian crearon al final del siglo XIX una estable red de instituciones para enfermos mentales. Confrontado al problema de los perversos sexuales y con vistas a responder a una petición firmada por más de 100.000 mujeres que exigían sus castración (1920), Christian Keller propuso la creación de una comisión para examinar la cuestión: obtuvo satisfacción con la llegada al poder de los socialdemócratas en 1924. Tras un período de dudas y de discusiones, una primera ley autorizó la castración de los autores de crímenes sexuales (1929) aunque la operación podía condicionar una liberación ulterior; después, una segunda ley (1934), la esterilización de todos los deficientes mentales que dieran muestras de ser incapaces de mantenerse y de criar hijos (L. Koch, 1996). Resumiendo, 108 personas fueron esterilizadas de 1929 a 1934, 1.380 en los cinco años siguientes; unas 2.000 durante la guerra y luego 7.500 hasta 1960, fecha en que dicha práctica fue discretamente abandonada.<br /> En Suecia, donde un Instituto de Biología había sido fundado en 1922, la cuestión fue debatida de 1927 a 1929 por una comisión parlamentaria que se atuvo al principio de esterilización voluntaria; pero, en 1934, se votó una ley que autorizaba la esterilización de las personas irresponsables, incapaces de ejercer sus derechos cívicos sin que siquiera el consentimiento fuese requerido si no podían criar hijos o si podían transmitirles sus taras. Hasta algunos liberales como Alva y Gunnar Myrdal aceptaban este principio para limitar los nacimientos de “tarados” o de indeseables” (M. Tyden y G. Broberg, 1911). En 1941, una nueva ley amplió la práctica a las personas responsables tras aviso de la Real Oficina Médica por tres motivos distintos: eugenésico, social, médico. De 1935 a 1957, 62.900 personas fueron esterilizadas por tales motivos, 2.500 de las cuales lo fueron antes de la guerra, 6.347 en los años de 1941 a 1945 y 54.000 posteriormente; la mayoría, al principio, por motivos eugenésicos (95% durante la guerra) y luego, después de 1949, por motivos médicos (77% de 1951 a 1957).<br /> En Noruega, la cuestión de la esterilización fue planteada en el parlamento en 1922. Una ley de 1934 – votada con casi unanimidad – la admitió por motivos socioeconómicos pero también genéticos. El ámbito de la ley fue ampliado en 1942 por el gobierno pro nazi de V. Quisling “para la protección de la raza”. El número de esterilizaciones anuales pasó entonces de 100 a 200 en término medio y después de 1945 no paró de aumentar hasta el final relativamente reciente (1976) de tales prácticas. Resumiendo, 40.891 personas, el 75% de las cuales eran mujeres, fueron esterilizadas en Noruega de 1934 a 1976.<br /> En Finlandia, una ley de 1935 autorizó la esterilización voluntaria de personas mentalmente sanas en caso de riesgo de nacimiento de hijos “de calidad inferior” y de individuos peligroso; pero también la esterilización obligatoria de los “idiotas”, de los “imbéciles” y de los “locos” en crímenes sexuales /medida que fue enérgicamente impugnada). Resumiendo, de 1951 a 1970, se practicaron 56.080 esterilizaciones pero sólo 90 castraciones de un total de 2.777 solicitudes presentadas (A. Drouard, 1998). En los otros estados europeos, exceptuando Alemania, la práctica de la esterilización no alcanzó jamás unas frecuencias semejantes.<br /><br />12.4.2. LA POLÍTICA DE POBLACIÓN DEL III REICH<br /><br /> La política de población hitleriana fue única en su género. Sin duda se vincula en ciertos aspectos a las dos grandes corrientes de la época – el eugenismo y el pobacionismo – aunque, con el racismo añadido, les dio una coloración específica (M. Hubert, 1995). Tal como hemos visto anteriormente, el éxito del eugenismo y la subida del racismo y del antisemitismo en Alemania fueron muy anteriores a Hitler. En 1905, ya se había fundado en Berlín el Instituto para la Higiene de la Raza a partir del modelo de Londres y Estocolmo. Además, el poblacionismo se inscribía en una vieja tradición prusiana que se remontaba al siglo XVII. Con la llegada de Hitler al poder, dichas tendencias se fueron concretizando: el 14 de julio de 1933, una ley destinada en principio a prevenir la transmisión de las enfermedades hereditarias prescribió que se inventariase a los enfermos mentales, a los alcohólicos y a los autores de crímenes sexuales: de 200.000 a 300.000 fueron esterilizados tras aviso de jurisdicciones especiales. En 1935,, una ley adicional prohibió el matrimonio a los alineados, a los tuberculosos y, en general, los portadores de enfermedades incurables.<br /> A partir de 1939, los nazis pusieron en marcha una política de eutanasia que pronto tomó las dimensiones de una exterminación: unos 5.000 recién nacidos y cerca de 100.000 adultos fueron eliminados de este modo durante la guerra. Por las mismas fechas, se creo el Instituto del Matrimonio Racial destinado a producir puros bebés arios en auténticos acaballaderos humanos (Lebensborn).<br /> En un primer tiempo, la expulsión y luego la exterminación de los judíos eran también parte de un programa anunciado en Mein Kampf. Las primeras persecuciones, de carácter administrativo, provocaron una primer oleada de emigración entre los 500.000 judíos (99.000 de los cuales eran extranjeros) establecidos en Alemania. En septiembre de 1935, las leyes de Núremberg “para la protección de la sangre y del honor alemán” les privaron de su ciudadanía. En noviembre de 1938, con la “noche de los cristales rotos” se pasó a la violencia abierta: unos 20.000 judíos fueron internados, muchos otros emigraron antes de que fuese demasiado tarde. En 1939, tras la Anchluss, en el territorio del Reich ya no quedaban más que 330.892 judíos, unos 222.000 de los cuales vivían en el marco de las fronteras de 1933 y 185.000 en Austria, donde las leyes de Núremberg fueron inmediatamente aplicadas. Más de 170.000 acabaron sus días en los campos de exterminación al igual que millones de otros deportados, raptados por toda Europa y asesinados en nombre de la raza.<br /> El tercer aspecto de la política hitleriana, siempre en un afán eugenésico, se tradujo por unas medidas de protección de las mujeres embarazadas – desde el cuarto mes de embarazo, recibían unas prestaciones por maternidad iguales a las tres cuartas partes de su último salario – y por una brutal represión del aborto: en Berlín, según F. Burgdörfer, el principal demógrafo alemán en el período entre las guerras mundiales, el número de abortos habría bajado de unos 6.100 en 1.920 a 3.619 en 1936.<br /> No obstante, el esfuerzo principal recayó sobre la nupcialidad y la natalidad: el 1 de junio de 1933 ya se habían instituido unos préstamos al matrimonio con cancelación parcial de la deuda en cada nacimiento; el 16 de octubre siguiente, una reforma fiscal aumentó el impuesto de los solteros y de las parejas sin hijos si bien alivió de manera considerable el de las familias numerosas, las cuales recibían además otras ventajas (prioridad en la vivienda, reducción de las tarifas en los transportes). Por último, se fueron estableciendo unos subsidios familiares de manera progresiva: limitados al principio a las familias con un mínimo de cinco hijos y, en 1938, siempre y cuando fuese por falta probada de recursos, se extendieron a las que tenían por lo menos 3 hijos. La eficacia de esta política fue irrefutable: de agosto de 1933 a diciembre de 1936, se concedieron 694.357 préstamos al matrimonio y el número de las uniones pasó de 509.597 (en 1932) a 732.147 (en 1934) hasta estabilizarse luego entre 610.000 y 620.000. El índice de fecundidad subió de 1,63 a 2,36 (insuficiente en aquella época, por otra parte, para asegurar el reemplazo a largo plazo) y el número de nacimientos de 971.174 (1933) a 1.413.230 (en 1939). No obstante, hay que observar que la recuperación económica explica en parte este enderezamiento.<br /><br />12.4.3. EL NEOPOBLACIONISMO AUTORITARIO<br /><br /> La política hitleriana no es el único ejemplo de poblacionismo autoritario que existió entre el final de la Primera Guerra Mundial y el inicio de la Segunda: fue precedida y luego acompañada por la del fascismo y seguida por la del estalinismo.<br /> En 1922, Mussolini se consagró como líder de una nación cuya revolución industrial y demografía había modificado apenas la estructura y el movimiento. La primera necesidad, por lo visto, era la de ayudar a vivir a un pueblo numeroso y prolífico cuyos puntos débiles eran la mortalidad y la emigración. Por aquellas fechas, la población se hallaba todavía en plena expansión: en el censo del 1 de diciembre de 1921, Italia contaba con 37.974.000 habitantes – es decir, en territorio constante, un progreso de 1,7 millones con respecto a 1911 -, el número anual de nacimientos (1.112.000 en término medio de 1921 a 1930) superaba con creces el de las defunciones (656.000); a pesar de una fuerte emigración (un total de 1,3 millones para el mismo período), la población italiana sobrepasaba la de Francia. Sin embargo, el nuevo régimen no tardó en afirmarse poblacionista. Mussolini que, antes de la guerra, había sido más o menos maltusiano y que solía considerar la emigración como el mejor remedio contra el paro, cambio de actitud en 1927 por pura voluntad de poder y asignó a Italia el objetivo de 60 millones de habitantes hacia 1950. la política poblacionista de la Italia fascista se desplegó en dos tiempos: la primera etapa (1927-1936) se caracterizó por unas medidas parciales tales como reforma fiscal con impuesto sobre el celibato, desarrollo de la protección materna e infantil, represión del éxodo rural y del aborto; la segunda etapa, inspirada del ejemplo alemán, consistió en la institución de préstamos al matrimonio y de subsidios familiares así como en disposiciones fiscales suplementarias. Al mismo tiempo, el régimen se esforzaba por extender las tierras cultivables (“bonificaciones”), por mejorar los rendimientos agrícolas y encauzar la emigración hacia las colonias.<br /> La primera política dio unos resultados tan sólo decepcionantes: el índice de fecundidad bajó a 2,87 en 1936 y la tasa de reproducción neta cayó por debajo de 1 en Piamonte, Liguria, Lombardía, Emilia y Toscaza. En cambio, la tasa de mortalidad disminuyó gracias a los progresos en el equipamiento sanitario, de la puericultura y de la higiene; de tal manera que el saldo neto del movimiento natural se mantuvo en un término medio de 410.000 anuales. Las medidas adoptadas en 1937 tuvieron muchos más efectos: provocaron un sobresalto de la nupcialidad y de la fecundidad (índice 3,07 en 1939). Como la tasa de mortalidad seguía orientada hacia la baja y como casi se había detenido lla emigración, la población italiana siguió progresando alcanzando 44,5 millones de habitantes en 1941. No obstante, no podríamos olvidarnos de los puntos flacos de esta política: en 1940, la mortalidad – especialmente la mortalidad infantil – seguía siendo considerable, el retraso y la inferioridad del Mezzogiorno persistían. Por último, el esfuerzo económico había logrado unos resultados sólo limitados: la industria no ofrecía ni suficientes productos de consumo para satisfacer una demanda creciente, ni suficientes empleos para la mano de obra agrícola excedentaria. El fascismo pedía a la economía italiana más de lo que ésta podía darle en el contexto de la crisis.<br /> En lo que a la URSS se refiere, resulta incómodo hablar de neopoblacionismo autoritario debido a los bruscos cambios de orientación del régimen y sobre todo a las dramáticas consecuencias – deseadas o sufridas – de su política que provocaron la trágica desaparición de 20 millones de personas como mínimo. Al principio, la política demográfica del régimen traducía sobre todo sus posturas doctrinales (A. Kollontai, 1975): liberación total de la mujer, abolición del matrimonio, libertad del aborto, práctica del eugenismo. “Nuestro problema ahora es abolir a la familia y liberar a la mujer de la educación de los hijos, escribió Lunacharski, comisario para la Educación. Sin embargo, Lenin, que siempre se había mostrado hostil a la unión libre, no tardó en inquietarse por los estragos sociales provocados por esta legislación: el 90% de los hijos de divorciados eran abandonados por los padres. Por lo que, en 1926, se adoptó un nuevo Código de la familia. Por otra parte, Stalin necesitaba mano de obra para su furibunda política de industrialización. El 4 de mayo de 1935, no sin cinismo proclamó al hombre “el capital más preciado”. En consecuencia, rehabilitó a la familia, reorganizó las leyes sobre el divorcio, la autoridad parental y las pensiones alimenticias. Al año siguiente, se prohibió el aborto excepto por motivos terapéuticos, lo que se tradujo en una formidable oleada de nacimientos en 1937 (6.549.000), es decir, 960.000 más que en 1936). Aquel año, un nuevo Código de la familia introdujo al principio de los subsidios familiares. Como, por otra parte, se había prohibido cualquier tipo de emigración, el crecimiento de la población soviética se aceleró constantemente. En vísperas de la guerra, ésta alcanzaba los 168.524.000 habitantes, con un progreso de 27.765.000 con respecto a 1920 y ello a pesar de la guerra civil, de las matanzas, de las deportaciones y de las hambrunas.<br /><br />12.4.4. DOS VÍAS ORIGINALES: FRANCIA Y ESPAÑA<br /><br /> Para Francia, afectada en época temprana por la desnatalidad hasta el punto de que, ya en 1935, el número de fallecimientos era más importante que el de los nacimientos, no podía ser cuestión de expansión ni de política “poblacionista”. Hacía tiempo que unos hombres reagrupados en la Alianza Nacional de Jacques Bertillon se preocupaban pero tan sólo habían logrado unas medidas de menor orden, principalmente fiscal, en beneficio de las familias. Los fundadores de la Tercera República enfrentados a la amenaza militar alemana se habían conformado, al principio, con incentivar las naturalizaciones y los afrancesamientos ampliando la aplicación del derecho del suelo. Tras la Primera Guerra Mundial se llegó sin mucho éxito a la represión: una ley prohibió la propaganda a favor de la anticoncepción y del aborto (23 de julio de 1920); otra penalizó el aborto con vistas a que la represión fuese más eficaz (23 de marzo de 1923). Un poco más adelante, Adolphe Landry, vicepresidente de la Alianza Nacional, ministro del Trabajo en 1931, extendió a todos los asalariados de la industria y del comercio el beneficio de unos escasos subsidios familiares que habían sido creados poco tiempo antes. El gran tiro fue tomado en 1938: Alfred Sauvy, miembro del gabinete de Paul Reynaud, ministro de Hacienda, hizo que éste promulgase un decreto-ley que unificaba el baremo de las prestaciones familiares, que lo aumentaba en la mitad, lo modulaba en función del orden de nacimiento del hijo (5% del salario medio para el primer hijo, 10% para el segundo, 15% a partir del tercero) y que instituyese un subsidio para la madre entregada a las labores de su hogar. Casi de inmediato fue creado junto a la presidencia del Consejo un alto Comité de la población donde A. Landry y F. Boverat se juntaron. Elaboró las grandes líneas de un Código de la familia que fue promulgado el 29 de julio de 1939 justo antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial. Este código instituía una fuerte prima al primer nacimiento pero redujo el baremo de los subsidios familiares para las familias con menos de tres hijos.<br /> Con el gobierno de Vichy, que preconizaba el regreso a los antiguos valores (“Trabajo, Familia, Patria”). La familia fue sacralizada, la maternidad asimilada a un deber cívico, el aborto duramente reprimido. El Alto Comité de la población fue suprimido pero las familias se beneficiaron de un sustancial aumento de los subsidios a partir del tercer hijo. La ley del 29 de marzo de 1941 creó un subsidio de salario único que sustituía al de la madre entregada a sus labores y representó a partir de entonces más de la mitad de las prestaciones proporcionadas. “Este subsidio estaba destinado de manera prioritaria a las jóvenes parejas, en las que incentivaba el desarrollo de su familia atribuyendo fuertes incitaciones a la llegada de los primeros hijos” (J. C. Chesnais). Con la liberación de los Aliados, el gobierno apoyado por toda la opinión decidió seguir con esta política fatalista e incluso fortalecerla. El beneficio de los subsidios familiares se extendió a toda la población, es establecieron unas primas por nacimiento y un seguro por enfermedad y maternidad; con la ley de presupuestos para 1946 surgió el principio del cociente familiar; en 1948, se creó el subsidio de la vivienda; por último, la tasa de los subsidios familiares fue revisada y aumentada en 1946 y luego en 1953. El efecto de tales medidas sobre la natalidad ha sido irrebatible. Sin duda el fortísimo aumento de nacimientos a partir de 1945 se inscribe en el contexto del llamado baby boom de la postguerra pero hay que observar que en Francia ha sido más precoz, más fuerte y más duradero que en la mayoría de los estados de Europa occidental.<br /> Estimulada por el ejemplo italiano, la España franquista se comprometió en una vía análoga a partir de 1938: en plena guerra civil se instituyó un sistema de subsidios familiares. Sin embargo, hubo que esperar el año 1941 para que se instaurase una política familiar completa destinada de manera prioritaria al mundo rural y a las clases humildes; préstamos sin intereses a los jóvenes matrimonio, descuentos sobre los precios a las familias numerosas, deducciones fiscales, tratamiento preferente en los ámbitos de la educación, de la vivienda, del transporte y del empleo. En 1945, todo esto se completó con un sistema muy original, el plus familiar: “El principio consistía en distribuir entre los asalariados de cada empresa, en función de sus cargas familiares, los recursos constituidos por el importe de cierto porcentaje descontado de la masa salarial de la empresa. El porcentaje a aplicar dependía de la rama de producción”. Varió según los períodos de 5 a 20% hasta alcanzar al final el 25% en 1964. Los fondos así recogidos eran administrados en el marco de la empresa por un comité mixto y se volvían a distribuir entre los trabajadores en función de sus cargas familiares reales incluyendo a todas las personas presentes en el hogar. La cuantía en cuestión representaba cerca de la mitad de las prestaciones sociales y cerca del 3% del PIB español.<br /> ¿Cuál fue su impacto en la natalidad? El indicador coyuntural, que había caído de 3,18 a 2,12 durante la guerra civil, subió a 3,09 en 1940 y después se mantuvo en más de 2,8 hasta 1975, nivel éste ligeramente inferior a los índices franceses hasta 1956 y ligeramente superior posteriormente sin que jamás se volviese a recobrar los máximos de antaño. Queda manifiesto que la coyuntura económica, muy difícil después de la guerra y más favorable después, desempeñó un papel fundamental en el ritmo del tardío baby boom español.<br /><br />12.4.5. LA POLÍTICA NEONATALISTA DE LOS PAÍSES DEL ESTE<br /><br /> Tras haber conocido un baby boom pequeñito al acabar la Segunda Guerra Mundial, los países de Europa del este, convertidos ahora en democracias populares satélites de la URSS, conocieron un retroceso de sus tasas de fecundidad en fechas tempranas: ya en 1951, en Bulgaria y en Checoslovaquia, en 1952 en Polonia, en 1955 en Hungría y en 1956 en Rumania; pero sólo en 1965 en la RDA (Alemania del este), país en el que la recuperación había sido más débil y más tardía y donde se produjo la huida masiva de los ciudadanos con destino al oeste, había disminuido la población de 18.408.000 (en 1947) a 17.040.000 (en 1965).<br /> Esta caída de la natalidad se fue acelerando a partir del momento en que se autorizó el aborto más o menos sin restricciones, una vez que al URSS diese ejemplo y señal en 1955; al siguiente año, el ejemplo cundió en Bulgaria, Hungría, Polonia y Rumania, en 1957 en Checoslovaquia pero sólo en 1972 para la RDA. Dado que, durante dicho período, la mortalidad también había ido bajando de manera progresiva, la tasa de incremento natural se mantuvo positiva durante mucho tiempo; aunque disminuyó al comienzo de la siguiente década. Del período 1950-1954 a 1960-1960-64, cayó Polonia de 19,0 a 12,4‰; en Rumania, de 12,9 a 8,1‰; en Bulgaria, de 11,5 a 8,7‰; en Hungría, de 9,7 a 3,5‰. Como necesitaban mano de obra para su política de industrialización, los dirigentes empezaron a preocuparse y tomaron medidas para incentivar la natalidad: Rumania dio el ejemplo a partir de 1956 y fue seguida en 1960 por Hungría y en 1967 por Bulgaria; en 1972, lo hizo la RDA y en 1974 Polonia (INED, 1982).<br /> El objetivo marcado no era poblacionista: se trataba de asegurar el reemplazo de las generaciones para permitir la renovación de la mano de obra, la financiación de las cargas de la vejez y el mantenimiento de un potencial de creación y de innovación. Al realizar este programa, en principio había que respetar la decisión de las parejas, luego no tocar el derecho al aborto sino incitarlas a constituir una pequeña familia (dos o tres hijos) a través de tres tipos de medidas:<br />- Concesiones de prestaciones familiares ligadas al tamaño de la familia (subsidios familiares, subsidios por maternidad, subsidios por la vivienda, deducciones fiscales, ventajas en la jubilación).<br />- Mejor dominio del tiempo para las madres de familia (bajas por maternidad, bajas parentales de educación, organización de los horarios laborales, etc.).<br />- Gestión del espacio familiar (cuotas de viviendas atribuidas a las familias numerosas, construcción de guarderías infantiles).<br />La amplitud de tales medidas variaba mucho de un estado a otro; en proporción con el salario mensual medio, los subsidios por maternidad iban del 36 al 225%; la duración de la baja parental de 6 a 36 meses y la indemnización percibida por la madre de 14% (Polonia) a 75% (RDA) de su último salario. En cuanto a los subsidios familiares, damos a continuación lo que representaban en porcentaje del salario mensual medio en función del número de hijos.<br />¿Cuál fue la eficacia de aquellas políticas? Según las curvas de los índices de fecundidad, como mucho habrían retrasado su caída. Para ilustrar esta afirmación, pondremos dos ejemplos extremos: la RDA y Rumania. En Alemania del Este, el índice de fecundidad se había desmoronado entre 1969 (2,23) y 1974 (1,54) en extraordinario paralelismo con el de Alemania del Oeste (donde había caído entre las mismas fechas de 2,22 a 1,51). La política fatalista de la RDA lo hizo subir a 1,90 en 1978 mientras el de la RFA seguía su caída y alcanzaba 1,38 aquel mismo año. Posteriormente, Alemania del Este conservó su adelanto aunque no recuperó el nivel de 1971; después, el derrumbe del régimen (1989) y las dificultades de la reunificación se tradujeron en un auténtico colapso: en 1993, el índice coyuntural de fecundidad en los nuevos Länder había caído a 0,81, nivel jamás visto en la historia demográfica.<br />En cuanto Rumania, en 1966, obtuvo con poco esfuerzo un resultado espectacular al prohibir el aborto de la noche a la mañana dejando atrapadas a cientos de de miles de mujeres: al cabo de un año, el número de nacimientos había pasado de 273.678 a 527.764, lo que, más adelante, supuso para el país enormes problemas escolares y sociales. El índice de fecundidad subió a 3,66; pero la subida no duró y se estabilizó en 2,5 más o menos hasta la crisis final del régimen; hoy en día, se encuentra en un nivel muy bajo (1,34). Como último análisis, las restricciones más o menos abiertas aplicadas al aborto explican en mayor medida que los efectos de las políticas fatalistas la mayoría de los sobresaltos observados en las curvas. En el contexto político, social y moral de la crisis del comunismo, las ventajas materiales no podían ser suficientes ya para motivar a las jóvenes parejas en busca de una auténtico proyecto parental.<br /><br />12.4.6. LA OFENSIVA ANTINATALISTA<br /><br /> No se trata aquí de las posturas ideológicas resultantes de la “revolución cultural” de mayo de 1968 sino de la política sistemática de cierto número de organismo públicos, de gobiernos e incluso de la ONU para reducir por todos los medios el número de nacimientos en los países llamados “en vías de desarrollo” con dos objetivos confesados; permitir su “modernización” y preservar el medioambiente del planeta. De ahí la sonada fórmula del presidente Jonson en 1966: “menos de cinco dólares invertidos en el control de la población valen 100 dólares invertidos en el crecimiento económico”. Como la mayoría de las iniciativas provenían de Estados Unidos y como la ONU es la que, al final, asume la responsabilidad de esta política dado que los europeos se han conformado con un tímido apoyo, nos limitaremos en el marco de esta Historia de las poblaciones de Europa a un recordatorio de las grandes líneas y de las repercusiones en el viejo continente.<br /> En el mes de junio de 1952, John D. Rockefeller funda el Population Council con el fin de desarrollar la investigación científica fundamental sobre la fisiología de la reproducción humana, la investigación aplicada en los métodos anticonceptivos (de ahí la píldora de Pincus en 1956 y el dispositivo intrauterino en 1960) y, por último, sobre las implicaciones sociales, éticas y morales de los métodos anticonceptivos. Siendo muy activo, el Population Council se asegura la colaboración de los sucesivos directores de la División de la Población de las Naciones Unidas (D. Kira, F. Notestein, B. Berelson) y logra que a través de dicho organismo se admita la idea de que la única forma de evitar las catástrofes anunciadas consiste en reducir por todos los medios la fecundidad en los países pobres. En 1965, la Comisión de la Población de la ONU propone una asistencia internacional a cualquier país solicitante acerca de los problemas de población incluyendo la planificación de los nacimientos. Al año siguiente, John D. Rockefeller obtiene personalmente las firmas de 30 jefes de Estado (entre los que figuran las de Suecia y Finlandia) en un manifiesto de la población que proclama que “las parejas deben tener la posibilidad de planificar a su familia y disponer de los medios y de los conocimientos a tal efecto”. El secretario general de la O.N.U, U. Thant, crea entonces el Fondo de las Naciones Unidas paras las actividades en materia de población (FNUAP) que recibe un enorme presupuesto (240 millones de dólares en 1994) para promover la restricción de los nacimientos en cualquier zona del mundo.<br /> Sin embargo, en 1974, en el Tercer Congreso Mundial de la Población celebrado en Bucarest, la resistencia de varios países (Argelia, Argentina) lleva a John D. Rockefeller y, tras él, al Banco Mundial a flexibilizar sus posturas reconociendo que “el crecimiento demográfico rápido no es más que uno de los múltiples problemas a los que se enfrentan la mayoría de los países” y que “reducir el crecimiento demográfico no es una alternativa al desarrollo”. Durante la segunda conferencia mundial que tuvo lugar en México en 1984, se constata que el crecimiento demográfico ha frenado – en la mayoría de los países pero no en todos – y que las políticas antinatalistas tienen unos efectos sólo escasos sobre el desarrollo. Estados Unidos, hostil a las intervenciones estatales, suprime su contribución al FNUAP. A partir de entonces, los neomaltusianos hacen más hincapié en los derechos de la mujer y en la salud de la reproducción “para una vida mejor de las generaciones por llegar”. Apoyadas por organismo privados – en particular por la Internacional Parenthood Federation (IPPF) -, algunas universidades americanas y varios gobiernos logran el apoyo de otra agencia de la ONU, la Organización Mundial para la Salud (OMS), que se hace cargo en cualquier parte del mundo de los programas de anticoncepción y de esterilización; y todo ello en nombre de un “nuevo paradigma” que implica los aspectos económicos y políticos de la salud. Este tema de la “salud reproductiva” ocupa el lugar central durante la Tercera Conferencia Mundial sobre “Población y Desarrollo” (El Cairo, 1994) con sus diferentes aspectos: “Maternidad sin riesgo”, “planificación familiar”, “regulación de la fecundidad”. No obstante, resulta imposible obtener el acuerdo unánime de los gobiernos con vistas a generalizar la esterilización y el aborto en loa países en desarrollo.<br /> ¿Cuál fue el impacto de estas campañas? En apariencia, el resultado más espectacular ha sido el progreso de la esterilización, que concerniría ahora al 37% de las mujeres en edad de procrear en loa países llamados “en vías de desarrollo” (39% en Asia y en Oceanía, 36% en América latina, 9% en África); pero sale a relucir que el descenso de la fecundidad en dichos países se debe más a ciertos cambios culturales – que se suelen designar con el término impreciso de “modernización” – que a la difusión de procedimientos técnicos. En lo que a Europa se refiere, la ofensiva fatalista ha tenido probablemente efectos indirectos a causa de la ideología que implicaba y ello a pesar de la donosa pregunta que Alfred Sauvy gustaba de hacer: “¿Es que hay que ponerse a dieta so pretexto de que un obeso vive en la casa de al lado?”.<br /><br />12.4.7. LA INCERTIDUMBRE DE LAS POLÍTICAS MIGRATORIAS<br /><br /> Las políticas migratorias de los diversos estados europeos han oscilado en función de lo que en cada momento considerasen prioritario: su cohesión nacional, sus intereses económicos y el respeto de los derechos humanos. Hasta la guerra de 1914, ninguno se había opuesto realmente a la emigración de sus ciudadanos-súbditos dado que más bien veían en ello una especie de válvula de seguridad susceptible de reducir las tensiones sociales. Tampoco trataban de atraer a los extranjeros. Tan sólo Francia, debilitada desde el punto de vista militar, favorecía de manera sistemática las llegadas y las naturalizaciones. La Primera Guerra Mundial creó entre los beligerantes unas necesidades de mano de obra enormes que les llevaron, cuando pudieron, a traerla desde los países neutros e incluso desde otros continentes. Posteriormente, las necesidades de la reconstrucción empujaron a Francia a persistir en esta vía. Al mismo tiempo, la Revolución Rusa y la reorganización de las fronteras provocaron en Europa occidental y central una primera oleada de refugiados: unos dos millones de rusos, 700.000 alemanes de Polonia, 400.000 magiares. Algunos tratados de paz implicaron incluso auténticos traslados de población: 53.000 búlgaros asentados en territorio griego fueron cambiados por 44.000 griegos. Por otro lado, la victoria turca de 1922; y el traslado de Lausana estipulaba el intercambio de 190.000 griegos que permanecían en Asia menor por los 338.000 musulmanes de los territorios helénicos.<br /> Durante los años que siguieron, los países totalitarios empezaron a restringir la emigración de sus nacionales antes de prohibirla por completo. La Segunda Guerra Mundial conllevó al principio unos desplazamientos masivos de mano de obra por los territorios ocupados por Alemania; en 1945, los aliados se encontraron en el centro de Europa con unos 16 millones de “personas desplazadas”: prisioneros, deportados, trabajadores libres y forzados reclutados por la ocupación nazi, notables civiles, refugiados, etc. Al cabo de tres años, en Alemania Occidental quedaba aproximadamente 1 millón de personas que se negaban a volver a su patria de origen. Cerca de la mitad eran polacos, 20% eran bálticos, los otros judíos, ucranianos y yugoslavos. Algunos – particularmente los soviéticos – ya habían sido devueltos a la fuerza a su país aunque la mayoría se benefició de una ayuda internacional que les permitió establecerse en el país de su elección, generalmente fuera de Europa. Los tratados de paz implicaron a otros países en esta larga sucesión de migraciones forzadas: Hungría, Bulgaria y Rumania tuvieron que intercambiar a buena parte de sus respectivos nacionales y éste ha sido, desde entonces, según parece, la única solución al problema de las minorías. Después y para un período de 30 años, estos países se cerraron tanto a la emigración como a la inmigración a imagen de las otras “democracias populares”. Para impedir la huida de sus ciudadanos, el gobierno de Alemania del Este hizo construir en 1961 el muro de Berlín.<br /> En Europa occidental, durante el período de crecimiento sostenido que J. Fourastié ha dado en llamar los “treinta gloriosos” años, los países más ricos incentivaron deliberadamente la inmigración procedente de las regiones mediterráneas más pobres y luego de sus antiguas colonias, con el fin de obtener una mano de obra industrial barata. Esta política estaba concebida con vistas a compensar las penurias coyunturales de mano de obra y no como una aportación demográfica duradera.<br /> Las primeras inquietudes surgieron en 1963 en Suiza, que contaba entonces con un 13% de extranjeros. Se sumaron a éstas unas consideraciones sobre los inconvenientes para la modernización del aparato productivo del recurso masivo a una mano de obra poco cualificada. Al final, la crisis de 1973 llevó a todos los países de Europa occidental a tomar medidas restrictivas pero éstas tuvieron un efecto perverso: empujaron a los inmigrados a establecerse de manera perdurable en los estados que les habían acogido para escapar a los controles durante las entradas al país. Pronto, hacia el final de los años setenta, se proclamó el derecho a la agrupación familiar, lo que provocó un nuevo aumento drástico de los efectivos: por inmigración de los allegados y pro los nacimientos in situ.<br /> La mayoría de las tentativas para incitarles al retorno a su país obtuvieron unos resultados tan sólo modestos y, desde un punto de vista político, su expulsión – incluso al de los clandestinos y de los delincuentes – acabó siendo casi inviable. Además, aprovechando la ampliación de la noción de derecho de asilo, un número creciente de extranjeros solicitó beneficiarse del estatuto de refugiados. En la Europa de los Quince, el número de solicitantes de asilo se ha cuadriplicado de 1985 (159.176) a 1992 (674.056). Se adoptaron unas nuevas restricciones destinadas a alejar a los “refugiados económicos” en la mayoría de los estados de Europa y se definió una política común en la Convención de Schengen (1990). Así y todo, el número de personas dependientes del Alto Comisariado de las Naciones Unidas para los Refugiados (HCR) ha pasado en Europa de 800.000 (1990) a 6.500.000 (1995) a raíz de la desestabilización de Europa del este y de la antigua Yugoslavia.<br /><br />12.4.8. LAS CRIPTO-POLÍTICAS DEMOGRÁFICAS<br /><br />No es fácil definir el ámbito propio de las políticas demográficas en el seno de la política general (J. Verriére, 1978). No podemos atenernos al estrecho sentido de “políticas voluntaristas que tienen un objetivo demográfico explícito”; pero ¿hay que pasar a la amplia acepción basada no en el efecto buscado sino en el resultado logrado? Entonces, de las políticas demográficas dependerá cualquier medida que afecte al estado o al movimiento de la población en un aspecto u otro. Pero entonces podríamos llegar a englobar a toda la política económica y a cualquier acción social así como a la ordenación territorial y a las migraciones. Nos atendremos, por tanto, al término de “cripto-políticas”, a las medidas que tienen efectos indirectos – a veces deseados, a veces perversos, a veces ocultos – sobre la constitución de la familia y la reproducción de los hombres.<br />La cripto-política más evidente concierne la legislación del matrimonio y la reglamentación de los poderes en la familia. Por tradición y sobre todo desde la Revolución Francesa, el estado se ha arrogado un derecho de observación y de intervención en la esfera familiar convirtiéndose en protector de sus miembros contra el poder arbitrario del pater familias. Ha transmutado el matrimonio en un acto de derecho civil, productor de efectos jurídicos sobre las personas y sobre los bienes. Tiende a limitar el poder paterno en todos los países, a rebajar la mayoría de edad, a definir los derechos del niño e incluso, en caso de peligro, a retirar a éste de la tutela de sus padres. Desde la emergencia de nuevos valores, su gran preocupación estriba en asegurar la igualdad real del hombre y de la mujer en el seno de la pareja así como la de los hijos legítimos y de los hijos naturales. De ahora en adelante, la autoridad es compartida y la noción de cabeza de familia ha desaparecido. El divorcio se ha vuelto más fácil, lo que, con toda evidencia, correspondía a la evolución de las costumbres que aquél ha precipitado.<br />Por último, algunos estados europeos tratan de dar un estatuto a los concubinos otorgándoles los mismos derechos materiales y sociales que a las personas casadas sin astringirles a los mismos deberes (ayuda, fidelidad). Particularmente típica es a este respecto la reivindicación de un reconocimiento de los “matrimonios homosexuales” con eventual posibilidad de adoptar hijos. En Dinamarca, fueron autorizados en octubre de 1989. En otros países (Países Bajos, Suecia, Noruega, Francia, República Checa) tienden a seguir esta tendencia. Por poco que esta evolución jurídica se acompañe de ventajas fiscales y sociales para los concubinos – presuntamente necesitados de protección – la institución del matrimonio queda seriamente dañada y, por repercusión, lo está también la natalidad ya que las uniones de hecho son menos fecundas que las uniones legítimas.<br />En el ámbito fiscal es donde, sobre todo, las políticas gubernamentales perjudican la nupcialidad y la fecundidad. Por regla general, los impuestos indirectos, aquellos que pesan sobre el consumo, son desfavorables a las familias numerosas como también lo es la tasación de las viviendas cuando se basa en las superficies ocupadas. En cuanto a la fiscalidad directa, aquella que pesa sobre el capital y los ingresos, tiene efectos contradictorios en función de la elección de la unidad impositiva y del cálculo de las exoneraciones de base: en principio, es más ventajoso para una pareja ser gravada de manera conjunta que por separado pero a condición de que su límite impositivo sea netamente más elevado que el del contribuyente aislado. En Francia, por ejemplo, el límite máximo de la ventaja fiscal de la que, hasta 1996, se beneficiaban los concubinos con hijos ha bastado para hacer progresar en 30.000 el número anual de matrimonios. En cuanto a la política social y más particularmente a la política de la vivienda, tiene efectos no despreciables sobre la constitución y dimensión de la familia: vivienda pequeña, familia pequeña. Por regla general, la política familiar que era prioritaria en los años de la posguerra y ello no sin segundas intenciones fatalistas al menos en Francia, se ha transmutado progresivamente a partir de 1970 en política social de redistribución de los ingresos: el afán de “compensación horizontal” (entre familias en función de su tamaño) ha cedido el paso al de “compensación vertical” (en función de los ingresos). En Francia, por ejemplo, ya sólo se conceden la mayoría de las prestaciones por falta probada de recursos; y algunas primas – particularmente el subsidio de padre o madre aislados – destinadas en principio a las personas desamparadas se han convertido en unas prestaciones de conveniencia que tienen efectos perversos sobre la nupcialidad (E. Sullerot, 1994).<br />Por último, el envejecimiento de las poblaciones europeas que conlleva el del cuerpo electoral ha tenido el ineludible efecto de dar prioridad a la tercera edad en las preocupaciones gubernamentales en detrimento de los jóvenes adultos, cuya entrada en la vida activa no es facilitada ni mucho menos. En Francia, por ejemplo, donde los jubilados, que sólo contribuyen en un 10% al presupuesto de sanidad, absorben un 50%.<br />Se puede generalizar estos desarrollos sobre las cripto-políticas evocando las nociones de “entorno social” (J.D. Lecaillon, 1992) y de “señal política”: la percepción por familias de las buenas o malas disposiciones del gobierno hacia ellas tiene efectos psicológicos que probablemente superan los efectos materiales de las medidas adoptadas. Y esto vale para el conjunto de las políticas de población.Unknownnoreply@blogger.com